Susurros

9. Rescate

Wei WuXian tenía un pequeño instinto, Lan WangJi había desaparecido de repente. Sentía que muchas cosas que pasaban había sido obra suya, después de todo, aunque la energía resentida se doblegara ante él no significaba que no fuera mala.

Sin embargo; cuando llegó a la secta Gusu Lan se encontró con una escena no muy buena que digamos, toda la secta estaba destruida, siendo custodiada por la secta Wen. Tal y como querían hacer con Yummeng, una fracción más de aquella secta.

Todo lo que un día fue estaba destruido. Sentía culpa. Como Lan WangJi había confiado en él, podría decirse de una vez por todas que podrían ser amigos, y él no podía hacer nada en contra de eso.

No podía hacer todo eso solo así que simplemente retrocedió para encontrar una manera de resolver toda esta situación.

Haciendo una reunión con las pequeñas sectas, de hecho, Jiang FengMian ya lo tenía pensado, se había puesto a reunirlos a todos y de hecho algunos se mostraron reacios, no apostaban al bando perdedor por nada del mundo, que era lo que parecían todas las casas que se oponían a los Wen.

Pero la mayoría aceptó ya cansados de todo esto.

Alguien acabó con Wen Chao y con Wen Xu, haciendo énfasis en que tenían las de ganar.

—¿Quién asesinó al hijo de Wen Rouhan? — preguntó uno de los ancianos de la secta Nie. Nadie sabía la respuesta, pero Wei WuXian sospechaba quien, pero no podía decirla allí.

—La secta Gusu Lan fue destruida por algún motivo y las cosas solo empeoraran si no hacemos nada... — dijo Jiang FengMian. Comenzó con una pequeña disputa, el debate se formó solo por dudas, las sectas no podían vencer solas y lo sabían, pero poco a poco se fueron uniendo más.

Que la secta Wen gobierne no era bueno para nadie, lo sabían, pero no se podían quedar con los brazos cruzados.

Así que lo aceptaron. Incluso con todo y la duda de lo que podría suceder.

La guerra dio inicio, y Wei WuXian frecuentó de primero, donde habían encontrado todos esos cadáveres entre ellos los de Wen Chao, había sido casi devorado, y en el suelo encontró una pieza de jade que conocía perfectamente de quien se tratase.

De esa manera se convenció que Lan WangJi fue quien había hecho todo esto, se rehusaba a creer que había sido asesinado por Wen Rouhan, así que simplemente lo guardó, no dijo nada a nadie para proteger a Lan WangJi, era mejor pensaran que algo malo le sucedió junto con su secta que estuvo allí quien sabe para qué.

Parecía que ellos podrían ganar, hasta que finalmente aparecieron cadáveres feroces que obedecían a los Wen, definitivamente eso tenía que ser obra de Lan WangJi y por consiguiente tendría que detener todo esto.

Le había salvado la vida, no podría darse el lujo de dejar que lo utilizaran.

Wei WuXian fue quien hizo el plan para dar una ataque sorpresa a ciudad sin noche. Comenzaron con flechas llenas de fuego como enviscada antes de que todos los cultivadores aparecieran para el ataque previo.

El campo de batalla había dado inicio en medio de la Ciudad sin noche, y Wen Rouhan apareció con todo su esplendor, Wei WuXian había predicho sin decirle nada a nadie que Wen Rouhan utilizaría los cadáveres feroces hechos con sus propios miembros de secta.

Lo que jamás esperó es que hiciera exactamente lo que había predicho justo después de salir, era obvio que los demás tuvieran miedo en esos momentos, pero Wei WuXian se había puesto a practicar desde el primer momento que supo que su teoría era acertada, así que con un simple sello provocó que la energía resentida fuera drenada y que los cadáveres feroces cayeran de nueva cuenta al suelo.