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Una belleza andrógina. Minghao pocas veces fue llamado así, no androgino, sino que una belleza, él nunca fue bello o especial para los demás habitantes del pueblo, de hecho, con la llegada de su cumpleaños número dieciocho ahora era demasiado mayor como para tomar una esposa. Él no consiguió una pareja, y aunque sus padres intentaron convencerle de comprarle una cortesana para que fuera su esposa Minghao se negó alegando que eso era mucho más humillante que tomar una vida de académico y dejar el matrimonio para los demás.

Pero un día despertó y miró su rostro en el reflejo del agua con los peces haciendo circulos, y notó un brillo extraño en sus ojos. Ese mismo día su madre lo miró con sorpresa y solo le dijo algo que se quedó en su mente hasta el anochecer.

"Floreciste como una mujer."

Eso debió molestarlo, porque él era un hombre, sus manos eran toscas y sus facciones tan duras como las de sus padres y sus primos, y nadie lo confundía con una mujer a pesar de su delgada figura. Minghao tambien era mucho más alto que las otras mujeres del pueblo. Quizás no era el hombre más masculino y viril, pero sin duda no era una mujer ni parecía una.

Pensó en ello mientras cargaba las canastas de pan sobre la madera de la casa. Dos niños corrieron haciéndolo tambalear y Minghao soltó un quejido para que se disculparan, ellos giraron y dieron una pequeña reverencia mientras daban pasos hacia atrás.

—¡No corran!— Les ordenó.

—¡Está bien tía!

Minghao dio un paso rápido y ellos corrieron entre risas. Eran niños así que no tenía porque molestarse, pero estaba molesto, molestos mientras caminaba más lento entre los pasillos de la casa.

Su prima estaba pronta a dar a luz por lo que toda la familia se encontraba trabajando en el cuarto del bebé, el esposo de su prima encargándose de construir la habitación para ellos dentro de la finca, su padre ayudaba al igual que su tío y las mujeres cuidaban de la embarazada, mujeres como su madre, su tia y otras primas. Minghao en cambio traía pan, porque no había mucho que él pudiera hacer con un cuerpo tan delgado y hecho para la pintura. O eso fue lo que dijo su abuelo.

Su abuelo no intentó insultarlo al impedir que ayudara a la contrucción, él admiraba el estudio en artes de Minghao, admiraba sus pinturas y presumía de ellas, pero tambien era terriblemente honesto. Si pensaba que Minghao no sería de ayuda y solo sería un estorbo entonces lo aclaraba.

Llegó hasta una habitación y se detuvo de golpe al escuchar las voces femeninas hablar. Él no espiaba, pero cuando mencionaron su nombre se escondió tras la puerta esperando que no fuera nada.

—Siempre fue un niño dado a las artes. Los pintores no suelen conseguir esposa tan facil. — La voz condescendiente de su madre no lo hizo sentir mejor. —Estoy segura de que Minghao podría conseguir una esposa si él lo quisiera.

—Para una mujer no es buena señal un hombre tan delgado y delicado.— Dijo su abuela cepillando el cabello de su prima embarazada. Su otra prima tambien estaba allí, doblando la ropa seca. —Dudo que Minghao se case.

—La forma en la que él maduró...— Su tia se escuchó al fondo. —¿No se asemeja más al de una mujer? Quizás hay algo delicado en él, la forma en la que se mueve, quizás sea por la pintura. Hermana, si quieres que mi sobrino tenga una esposa deberías pedirle dejar de pintar. Un hombre no puede ser tan femenino.

—Mi primo no luce como una mujer.— Dijo su prima menor, el cascabel de su adorno en el cabello tintineó. —Él no se ve delicado, es solo que... Tiene un aura tan tranquila, no creo que sea por su forma de moverse, es como si su alma fuera femenina.

—¿Un alma de mujer?

—No, solo un alma femenina. Indescriptible.

—Pero...— La mujer embarazada habló por fin. —Justo ahora mi primo parece haber tomado una belleza androgina.

El sonido seco del golpe en la madera las hizo girar a todas. Uno de los panes rodó por el suelo hasta la puerta, y su prima menor se puso de pie asomándose buscando al dueño del pan. Pero Minghao ya había girado en la esquina, ocultándose.

Su vista estaba puesta en el pan.

¿Un alma andrógina? Eso era absurdo. 

PSYCHO [JunHao]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora