Sentimientos encontrados

220 21 1
                                    

Por Lena:

¿Maravillosa mañana, verdad?

Sin lugar a dudas lo es, luego de la increíble escapada nocturna donde volví a besarla después de casi 6 meses, viendo fuegos artificiales, sintiendo mi pecho rebosante de calidez que en su momento creí no volver a experimentar, acariciando la piel de sus mejillas, regocijándome con su calor, sin querer separarme nunca, aunque lamentablemente tuvimos que hacerlo, viéndonos con sonrisas estúpidas, regresando al vehículo entre besos robados, llegamos casi a las 4 am

Por dos segundos considere regresar a mi pent-house, ya había invadido la casa de Eliza durante dos días, claro que eso lo descarte al instante que me arrincono en la cocina luego de comprobar que todo estuviera vacío y volvió a besarme hasta que escuchamos pasos en el piso de arriba, nos separamos a tiempo en que una enfurecida Alex aparecía gritándole en susurros improperios a su hermana por robar su moto otra vez

Cada cual fue a su habitación después de eso, no pudimos despedirnos con un beso simplemente porque no queríamos que nadie más lo sepa, al menos yo, aun no lo hablamos, básicamente por tener la boca ocupada con la otra, pero en esta oportunidad no quería apresurarme, además aún hay verdades que debe saber, mismas que le diré apenas tenga oportunidad, no cometeré los mismos errores que nos trajeron a ese punto

Sin embargo decidí no pensar en eso por la noche, solo rememoré una y otra vez nuestros besos, acariciando mis labios con una sonrisa luego de acostarme, chillando emocionada contra la almohada

Mi pequeño había optado por dormir con su madre solo por ser su cumpleaños, por supuesto que lo extrañe, pero Ónix permaneció conmigo y me acurruque con una imborrable sonrisa, aunque claro, cuando mi cachorrito pensó que estaba dormida, no dudo en partir a la habitación de mi pequeño presumido

Al parecer solo fue a custodiar, porque pocos minutos después regreso conmigo

Al despertar temí que todo se tratase de un lapsus del momento y ahora se arrepienta, o quizás solo fue un sueño, no sería la primera vez que se cuele en ellos. Motivo por el cual abrace más fuerte a mi cachorro, acurrucándome, pero al ver las 9am en el reloj considere que ya era hora de levantarme, enfrentar la realidad, sea cual sea

Abrí la puerta de la habitación que me habían designado hace más de un mes, al instante mi bebé salió corriendo por el pasillo hasta desaparecer en el último cuarto donde dormían Yam y Kara, por supuesto que quise seguirlo, pero considere que sería mejor esperarlos abajo y ese fue el rumbo que tome, pero apenas pase por la puerta del baño alguien jalo mi brazo, ingresándome

- ¡¿Qué diab... - mi pregunta fue cortada por unos labios posándose en los míos, haciéndome sonreír al reconocerla, pasando los brazos tras sus hombros para acercarla mas

Bien, definitivamente no fue un lapsus ni un sueño

Acaricie su nuca con mis pulgares cuando abrazo mi cintura, pegándome más a su cuerpo mientras nuestros labios danzaban ese baile que conocían a la perfección, estuve a punto de concederle acceso cuando paso su lengua por mi labio inferior pero dos cosas me detuvieron

Punto número uno: no me había lavado los dientes; y punto número dos: nos conocía a la perfección, sabia como terminaba esto y por mucho que lo deseara, nuestra segunda primera vez no será en un baño, por lo tanto me separe, no sin antes morder suavemente su labio inferior, alejándome solo unos centímetros para apreciar sus preciosos océanos brillante

-Buenos días – sonrió, dándome un beso rápido - ¿dormiste bien? - pregunto sobre mis labios, embriagándome con su aroma mentolado, recordándome por segunda vez que debía lavarme los dientes, motivo por el cual cuando volvió a acercarse corrí el rostro, generando que sus labios se posen en mí mejilla, riendo cuando intento besarme nuevamente

FuneralDonde viven las historias. Descúbrelo ahora