🖤SOMOS UNO🖤 Capítulo 9

73 32 50
                                    

NARRADOR ANÓNIMO:

El torneo acabó así que los ganadores salieron del estadio, cansados pero al mismo tiempo radiantes de emoción. Como era de esperarse, el peli rubio propuso ir a celebrar a algún lado, pues de verdad se lo merecían. Los demás optaron por una discoteca, a lo que Kang se preocupó un poco a causa de tan peligrosa idea. Erick le recalcó que no pasaría nada si ninguno de ellos se pasaba de la raya, asegurando seguridad. No tardó mucho en convencerlo ya que, después de todo, solo irían a festejar.

Tomaron el metro —transporte que era muy inusual para Kang— y llegaron al primer club que encontraron. Para su desgracia, el guardia que vigilaba la entrada los echó de allí por ser menores de edad. No les quedó más opción que deambular por las calles en busca de algún otro club en el que sí permitieran menores. Después de caminar y caminar, hayaron uno, pero este se veía muy inestable y ciertamente escalofriante, casi como una casa de brujas. Había un gran cartel en la entrada que decía: "NOCHE DE BEBIDAS" y no había nadie vigilando quiénes entraban. Ese lugar no le agradó en lo absoluto a Kang, el cual se negó rotundamente a entrar allí.

Casi empujándolo, los otros chicos lograron hacerlo pasar, provocando que el peli negro chocara con unos viejos borrachos que estaban pasando por allí en ese entonces. El chico se disculpó con una reverencia rápida que parecía sin sentido, ya que esos hombres ni siquiera se habían dado cuenta.

Pasando por alto lo ocurrido, ellos se dirigen a la barra para ver qué clases de bebidas ofrecían en este lugar. Y sí, parecían ponche de brujas. Como no había nadie en ese momento atendiendo esa sección, los chicos atraviesan la pista hasta terminar en unos muebles ubicados en el centro del local. Allí la música resonaba prácticamente en sus tímpanos, hecho que al sensible peli negro irritaba pero, como no quería seguir causándoles molestias a sus amigos, no lo mencionó.

O al menos no por mucho.

...

—¡¿A que no saben lo que encontré?! —exclama Jiho con dos botellas en las manos, alzándolas para que todos pudieran verlas mejor.

—Ahora sí se puso buena la noche —comentó Erick mientras agarraba una de esas botellas y les empezaba a servir a los demás en sus respectivos vasitos.

Doyun —otro de los amigos de Tae y miembro del equipo— rió al ver cómo le temblaba la mano al peli rubio. Este decidió ayudarlo a servir su propia copa, aprovechando la oportunidad para echarse mucho más de lo que debía.

—¡Doyun! ¡Eso es demasiado para tí! —lo "regaña" Erick, quien solo lo hizo a broma ya que, unos segundos más adelante, él mismo se sirvió más que Doyun.

Mientras tanto, Kang intentó respirar un poco de aire sin olor a alcohol girando su cabeza, sin conseguir mucho, que digamos. No tuvo más opción que volver a su posición inicial, rascando la parte de atrás de su cuello para luego tomar palabra en la conversación:

—Chicos... Midan bien la cantidad que van a beber, recuerden que aún tenemos que regresar a nuestras casas.

Ellos se quedaron pensando por un momento, reflexionando en lo que irían a hacer. Le hicieron caso al chico, tomando la decisión de no emborracharse —o al menos hasta que el peli negro dejara de prestarles atención.

NARRA KANG:

Después de que se diera un par de tragos, Erick se levanta de su asiento y me hace una seña para que lo siguiera hasta la pista de baile. Una vez que estábamos en medio de todos los que se movían allí, el rubio llama a una chica y consigue que venga hacia nosotros. Cuando ella se detuvo a su lado, Erick me habla, ahora con una sonrisa sospechosa:

SOMOS UNO (#2SAGA: PRIMEROS AMORES) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora