SOMOS UNO (#2SAGA: PRIMEROS AMORES)

🖤SOMOS UNO🖤 Capítulo 11

NARRA KANG:

El fin de semana pasó volando y llegó trágicamente el lunes, con la obligación de volver al instituto. Hasta ahora había estado relajado en la escuela por la falta de pruebas pero, como solo restan menos de dos semanas para que comiencen los exámenes parciales, los profesores nos están matando con tantos repasos. En eso se basó el día de hoy: en recordar todo lo dado en cada turno de clases, hasta el punto de casi volverme loco. En los horarios de descanso aproveché para ir a la biblioteca a estudiar, pues aún habían muchos contenidos que no entendía, y casi todos los estudiantes de mi curso hicieron lo mismo.

No tuve tiempo para hablar con Su-Jin, y es que el reloj ni siquiera me permitió comer con calma. Me uní a las clases extras que dan los profesores después del horario de salida, esas que duran hasta las once de la noche. Por un momento pensé que sería una locura, pero la verdad es que a esas horas los maestros dan mejores explicaciones ya que hay menos estudiantes y pueden concentrarse más.

Antes de que empezaran los turnos extras, llamé a mi mamá y le avisé de lo que haría, a lo que no le quedó más remedio que darme permiso. Como era de esperarse, Erick no asistió a este último repaso. Él es un despreocupado en ese aspecto, no le importa si estudia o no, lo único que quiere es pasar de curso.

La profesora apareció en el salón y empezó a impartirnos el repaso, el cual era colectivo ya que habían muchos chicos que no eran de mi clase. Presté toda la atención que pude y tomé nota de lo más importante. Así transcurrió la noche, hasta que en el último turno de clases se me cerraron los ojos, quedándome dormido.

Me despertó el aturdidor sonido del timbre, por lo que acaricié mis párpados, recogí mis cosas y en un bostezo salí del salón. Llamé a mi papá para que me viniera a buscar en su auto, y este llegó quince minutos después. Entré al vehículo, me senté en el asiento del copiloto y cerré la puerta a mi lado. Cuando mi padre arrancó y empezamos a movernos hacia la carretera, visualicé pequeñas gotas de agua caer sobre mi pantalón, cerré la ventanilla por la que entraban y mi superior hizo lo mismo con la suya.

Un peculiar silencio envolvió la escena, tragándose hasta el más mínimo sonido que ninguno de los dos hacía. Así fueron los próximos tres minutos, aburridos, hasta que papá giró el volante para cambiar de calle y se dignó a hablarme.

—Kang, tendremos un nuevo chófer.

Me dejó impactado lo que él anunció, no me lo esperaba. Después de todo, el señor John Min hacía muy bien su trabajo, ¿qué pasó para que de la nada cambiemos de conductor?

—Ese hombre intentó robarnos, por eso lo despedí. Buscaremos a alguien más que sí tenga valores morales —aclaró mi padre, prácticamente leyendo mis pensamientos.

Su mirada se mantenía concentrada en el frente, directa a la autopista. Jamás imaginé que alguien que había trabajado para nosotros durante tantos meses nos haría algo como eso, pero solo quedaba aceptarlo. Vi a papá suspirar y seguir conduciendo hacia casa, por lo que dejé de pensar en ese tema, volviendo a quedarme dormido.

NARRA KIM:

Noté que Kang se había recostado a su asiento, seguramente muy agotado por su largo día. Sonreí, recordando que tengo un hijo que se esfuerza al máximo por sacar excelentes calificaciones, cuidar de su físico y tener buenos hábitos. No es que quiera menos a Tae, Ash o Jaru, es solo que Kang se parece más a mí en todos los sentidos, teniendo en cuenta que somos prácticamente idénticos. Aunque... Siento que hay algo que me está ocultando, quizás no sea nada malo, pero es que nunca antes habíamos tenido secretos entre nosotros. Tal vez ya sea hora de darle su espacio personal, tal vez no. De todos modos, mi esposa me ayudará a tomar una decisión sobre eso.