Capítulo 16: Comenzar de cero

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Hyun-min está de vuelta en la habitación que le habían asignado, con una mezcla de cansancio y alivio pesando en sus hombros La habitación, a pesar de ser espaciosa y cómoda, se siente opresiva después de la intensidad del combate. Se coloca frente al espejo, observando su reflejo. La herida en su mejilla es un recordatorio constante de la batalla reciente.

Mientras limpia cuidadosamente la sangre seca alrededor del corte, Minnie nota algo inusual. Bajo la superfície de su piel, justo debajo de su herida, hay un brillo metálico. Su corazón late con fuerza, y un torrente de recuerdos la inunda. Hace unas semanas, el cuidador de sus tres amigos le había contado la verdad que le costaba asimilar: era mutante. Ella y su hermano habían sido afectados por la misma condición.

Los mutantes eran el resultado de una tragedia ambiental, hijos de mineros expuestos a una sustancia misteriosa que había alterado su ADN. Hyun-min había escuchado muchas historias sobre ellos, a menudo en tonos de miedo o desconfianza. Sus amigos siempre hablaban de los mutantes como seres diferentes, con habilidades y características que los separaban del resto de la humanidad

Mirando fijamente el brillo metálico en su mejilla, la chica se da cuenta de la magnitud de su propia verdad. Ella y su hermano son mutantes. Pero su hermano no lo sabe. Un nudo de preocupación se forma en su estómago al pensar en cómo podría revelarle esta verdad. ¿Cómo le contaría algo tan devastador? ¿Cómo lo haría entender que esto no cambia quiénes son, sino que añade una capa más a su identidad?

Con movimientos lentos y precisos y manos temblorosas, vuelve a aplicar una capa de crema antibiótica sobre el corte, tratando de calmar su agitación interna Sus pensamientos vagan hacia la promesa que hizo de convertirse en repartidora, un peso más en su ya cargada mente.

Mientras se acomoda en la cama, recuerda la actitud de Ryu Seok y su insistencia en la herida de la mejilla. Había algo en sus preguntas, en la forma en que la miraba, y ahora tenía sentido. Él lo sabía. Había conocido su secreto. Su preocupación fingida y sus palabras cautelosas habían sido una tapadera para algo más allá.

Hyun-min siente un escalofrío recorrer su columna vertebral al darse cuenta de que debe tener mucho cuidado. No podía permitirse que nadie más descubriera su mutación. Ryu Seok podría tener planes para ella, y necesitaba mantenerse alerta y proteger su secreto a toda costa.

De repente, el ruido de la puerta llama su atención. Se incorpora rápidamente, con su corazón latiendo con fuerza. Un hombre está esperando en el umbral y su expresión es inescrutable.

-Debes acompañarme -dice, su tono no admite réplica.

Hyun-min sigue al hombre por los pasillos del edificio hasta llegar a una sala fría y estéril. La atmósfera aséptica la pone nerviosa. Sin decir una palabra, el hombre le indica una bata blanca colgada en la pared.

La chica asiente, cambiándose rápidamente en una pequeña habitación blanca, y vuelve. La tela fría contra su piel le hace sentir aún más vulnerable. En cuestión de minutos, varias personas comienzan a prepararse para hacerle pruebas.

Ella siente una aguja penetrar su piel mientras le sacan sangre, y su mente empieza a correr con preguntas y miedos. ¿Por qué están haciendo esto? ¿Qué planean descubrir? Cada pinchazo y cada extracción de sangre la hace sentir más expuesta.

A través de todo esto, Hyun-min se mantiene en silencio, consciente de que cualquier palabra podría revelar más de lo que está dispuesta a compartir. Sin embargo, la persistente preocupación sobre Ryu Seok y su conocimiento de su secreto la mantiene alerta. Debe encontrar una manera de protegerse, de proteger a su hermano y a todos los que le importan.

Uno de los técnicos se acerca con un dispositivo pequeño y metálico, claramente un láser de algún tipo. Sin medir palabra, toma su mano y la extiende, posicionándola bajo el láser. Hyun-min siente un leve cosquilleo mientras el dispositivo comienza a dibujar algo en su piel: su identificador.

-5-7, proceso de registro completado.

La voz que suena en el altavoz la tranquiliza. Solo era parte de su registro.

Horas más tarde, cuando la noche llega, Hyun-min está de pie frente a su nueva casa, un obsequio tangible de su nuevo trabajo como repartidora. A medida que observa la fachada, los recuerdos invaden su mente. La casa de Seol-ah había sido exactamente igual a esta, ya que todas las casas de su entorno eran iguales: grises y cuadradas Aquella uniformidad representaba una vida sin grandes lujos, pero llena de calidez y amor familiar.

La vida con Seol-ah había sido sencilla. Las paredes grises y las formas cuadradas habían sido el escenario durante mucho tiempo, un tiempo en el que no le importaban las apariencias, sino las risas y las historias compartidas en el pequeño salón, junto a Seul-ah y su hermano. Ahora, frente a la nueva casa, Hyun-min no puede evitar sentir un nudo en el estómago. Este lugar es un símbolo de lo lejos que ha llegado, pero también un recordatorio de todo lo que ha perdido en el camino

La fémina mira el código QR en su mano, cosa del sistema de alta tecnología que contrla la vida de los menos necesitados Sostiene la mano frente al escàner situado junto a la puerta y espera mientras el dispositivo lee el código. Con un suave clic, la puerta se desbloquea y se abre, dándole la bienvenida.

Recorre la casa lentamente, absorbiendo cada detalle. Nunca había tenido algo tan lujoso y bien diseñado para ella sola. Todo parece hecho para proporcionar comodidad y un respiro de su vida anterior, marcada por la lucha y la supervivencia.

Llega a la sala de estar y se deja caer en el sofá, sintiendo la suavidas del tapizado contra su piel cansada. Por un momento, cierra los ojos y se permite respirar profundamente, tratando de asimilar todo lo que ha sucedido. La revelación de su naturaleza mutante, la muerte de Seul-ah, los secretos de Seol-ah, la victoria y la ausencia de 5-8 en el momento crucial, todo parece desbordarla.

En lugar de encontrar calma, siente una oleada de emociones que la inunda. Una presión en el pecho comienza a crecer, haciendo que cada respiración sea más difícil que la anterior. Su corazón late con fuerza, retumbando en sus oídos como un tambor.

Las lágrimas brotan de sus ojos, rodando por sus mejillas sin control. Se lleva laa manos a la cara, tratando de sofocar los sollozos, pero su cuerpo tiembla involuntariamente. Un nudo se forma en su garganta, tanto que apenas puede tragar.

La ansiedad toma el control, y Hyun-min siente que el mundo a su alrededor se está cerrando. Las paredes parecen acercarse, y el techo parece bajar, aplastándola. Se desploma al suelo, encogida sobre sí misma, buscando alguna manera de aliviar la angustia que la consume.

Cada pensamiento se consume en una espiral descendente. "¿Qué voy a hacer? ¿Cómo voy a manejar esto sola? No puedo fallar, no puedo...". Las dudas, miedos y dolor que había estado reprimiendo salen a la superfície, multiplicándose con cada segundo que pasa. Se siente abrumada, como si estuviera atrapada en una tormenta emocional de la que no puede escapar.

Hyun-min trata de concentrarse en su respiración, recordando los consejos para calmarse. Inhala contando hasta cuatro, sostiene el aire durante cuatro segundos y exhala contando hasta cuatro. Pero cada intento de calmarse parece en vano, la ansiedad es demasiado poderosa.

El tiempo parece detenerse mientras lucha contra la tormenta interna. Los minutos se alargan, cada uno sintiéndose como una eternidad. Finalmente, la intensidad del ataque de ansiedad comienza a disminuir, dejándola exhausta y frágil. Las lágrimas continúan cayendo, pero su respiración se vuelve más lenta y profunda.

Se queda allí, en el suelo de su nueva casa, sintiéndose más sola que nunca. La casa, con toda su modernidad y confort, no puede ofrecerle el consuelo que anhela. Lo único que desea en este momento es estar rodeada por su hermano y amigos, sentir sus abrazos y escuchar sus voces reconfortantes.

-Prometo que encontraré una manera de mantenernos juntos -susurra con voz temblorosa.

Con esa promesa, Hyun-min se levanta lentamente, limpiando sus lágrimas de su rostro. Sabe que el camino por delante no será fácil, pero está decidida a enfrentarlo con valentía. Esta casa es solo el principio de una nueva vida, y hará todo lo esté en su poder para traer a su hermano y convertirla en un hogar lleno de amor y calidez, tal como lo fue la casa de Seol-ah.

Novata [Black Knight]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora