Amigos Con Derechos: Donde todo comienza (en edición)

Capitulo 30

Estaba parada bajo el umbral que separaba la sala de ensayo con el pasillo que unia todas las demas salas. Mantenía mi mirada en el ultimo ensayo del día de mi grupo de alumnas.

“Perfección es la palabra justa para la coreografía. Elegancia y diversión, tiene lo que toda una coreografía debe tener. Buen trabajo Yerik.” “Gracias mente”

Esperé un par de segundos a que el tema dejará de reproducirse y así poder evaluarlas como lo hacia de forma habitual. El ultimo segundo de la canción, me indicó que las chicas finalizaron una coreografía de casi tres minutos. Aplaudí un poco ante la excelencia que tuvieron al bailar y su mejoría tras muchos meses de trabajo, que se verían plasmados en dias no mas.

-Perfecto – dije algo emocionada. Deje de aplaudir y me dirigí hasta el equipo para apagarlo – ¿Ya saben de la presentacion? - pregunté mientras me mantenía concentrada en apagar el aparato.

-Si – respondieron todas a unísono.

Escuchaba que la mayoría me saludaba con un lijero “Chau profe” y desaparecian de mi vista. Me dedique a buscar mis cosas, saqué el celular de la mochila y me fije si tenía alguna mensaje. Como era de esperarse, Tom era el que mas me había mandando.

“A qué hora salís? Te paso a buscar? A penas termines, avisame”.

“No me ignores eh! Mira que sino cuando llegues a casa se te arma. Jajaja! Te amo♥”

“Tanto iba a tardar en terminar. Tenes que saber que te extraño”.

“|._______________.| Ballenaaaa JAJA”

No pude evitar reir ante el ultimo mensaje. Una carcajada se escuchó en todo el salón, completamente vacío, haciendo un poco de eco.

“Me parece que estabas un poco aburrido. Ya salí, si queres venir, vení :) me ahorarrías el tema de tener que ir en colectivo”

“Por fin contestaste. Ya no me siento un forever alone ;) Ahí voy”

Meneé la cabeza de un lado a otro y guardé nuevamente mi móvil en la mochila. Tomé mi buzo que estaba al lado del equipo de música y me dirigí hacia la sala de ensayos de Kelsey Belle. Me llamaba la atención que, hace por lo menos una semana, estuviera tan vacía y sin la presencia de la rubia. Fruncí un poco el ceño y caminé por todo el pasillo hasta terminar en la entrada del lugar.

-¿Comó estuvo tu tarde? - pregunté al ver a Kelsey Ann en la recepción.

-Tranquila. Mucho ensayo por el tema de la presentación – respondió algo atareada y pendiente de unas libretas.

-¿Qué pasa con Kels? No viene desde hace una semana mas o menos – pregunté algo preocupada.

-Está un poco enferma – Levantó su mirada y esbozó una pequeña sonrisa – Si el miercoles no viene, el viernes tomo yo su clase. El sabadó es la presentación y sus alumnas no practicaron demasiado.

-Si queres, puedo tomarla yo, para que no cargues con tantas clases.

-No te preocupes. Justo es el horario en el que tenes tu clase y yo no hago nada a esa hora, así que es preferible que tome el mando yo. Gracias de todos modos.

-De nada – La bocina del auto de Tom, interrumpió nuestra pequeña charla no interesante – Tengo que irem Kels, si necesitas algo, llamamé – Antes de que pudiera contestarme algo, abrí la puerta de un solo movimiento y bajé las escaleras para encontrarme con un dia completamente lluvioso. Rodeé los ojos al sentir que la lluvia torrencial me empapaba por completo.

-Te dije que esperaras a que bajara – Tom se acercó a mi, con un paraguas en mano, y me besó los labios. Fruncí un poco el ceño – Te mandé un mensaje, amor.