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-Hola amor- dijo mi novio entrando a mi cuarto, al parecer ya había la suficiente confianza por parte de mis papás hacia Junior, y eso me encantaba.
-Hola bebé- dije dándole en beso en cuanto se acosto a mi lado -¿Como te fue en el estudio?-.
-Bien amor, ya tenemos fecha para sacar "Las Tres Torres"- me dijo con emoción en su rostro, yo solo me dedicaba a dejar caricias en su cabello.
-No quiero que te olvides de mi cuando seas mucho más famoso- dije viendo directo a sus ojos, intentando leer su mirada, él solamente sonrió dejando un beso en mis labios.
-¿Tú crees que te voy a olvidar algún día?- dijo acariciando mi cintura sobre la tela de la sudadera.
-Yo creo que la fama destruye relaciones- dije con algo de miedo en mi voz, se que Junior jamás haría algo así, pero había ocasiones en las que temía por nuestro futuro.
-La de nosotros jamás será destruida mi niña- dijo dejando un beso en mi frente -En cuando pueda te voy a pedir matrimonio- dijo haciéndome sentir emoción, viendo como mis cachetes se ponían rojizos -Te amo- dijo volviendo a besarme.
Entre besos ahora él estaba sobre mi, dejando besos sobre mi torso, desde mi cuello hasta mi ombligo. A mi me encantaba que me hiciera sentir amada, no solo con palabras y regalos, también con sus acciones. Después de una larga sesión de besos, se levantó a cerrar la puerta con seguro, pues mis papás estaban viendo una película en la sala, pero preferíamos no arriesgarnos tanto.
-Terminando el álbum te dedicare muchas canciones amor- dijo haciéndome sentir aún más feliz, cosa que me hizo robarle un beso. Y continuamos con lo que habíamos empezado.
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Ahora estaba arrodillada ante Junior, sintiendo como su intimidad llenaba mi boca y aún no estaba completamente dentro, con su brazo izquierdo hizo una coleta improvisada, mientras que con su brazo derecho acariciaba mi rostro. Me dio una señal para levantarme y obedecí.
Me acosto sobre la cama, posicionándose sobre mi, comenzó a desvestirme poco a poco, y al llegar a mis bragas decidió quitarlas de un jalón, dejando marcas en mi cuerpo. Yo solo me limitaba a soltar suspiros.
Abrió mis piernas con sus manos en mis muslos, para después ponerse entre ellas -Sin ruido mami- dijo poniendo su mano en mi boca para comenzar a meterla poco a poco. Con cada embestida lenta que daba, yo me dedicaba a apretar su muñeca, ya que intentaba calmar mis gemidos con besos pero fue en vano, tuvo que volver a posicionar su mano en mis labios.
Todo se sentía muy especial, saber que Junior hacía todo por verme feliz hacía que mi corazón latiera como loco. Continuó con sus embestidas, todo era lento, se sentía muy bien.
En un movimiento cambiamos de posición, ahora él estaba acostado, y yo sentada sobre él, dando pequeños movimientos en círculos, de arriba a abajo. Me encantaba entrelazar su cabello entre mis dedos, eran tan lindo.
Unos cuantos movimientos después terminamos, pareciera que fue casi al mismo tiempo -Te amo- volvió a decir dándome un beso, para después comenzar a vestirse pasándome mi ropa.
-Yo también Junior- dije sentándome en la orilla de la cama.
-¿Vamos al cine?- dijo con una sonrisa inocente cuando termine de cambiarme. Literalmente lo amaba tanto.
