Capítulo 2.

40 3 0
                                    

Años atrás.

Dejo a la pequeña Camila de 7 años en la puerta de su salón de clases, la observo de lejos y mis ojos se hacen pequeños, es el primer día de clases en el nuevo colegio, y sé que su padre debería estar aquí también. Mi niña ya es grande.
Siento una mano tocar mi brazo y volteo.

-Hola Isa, yo quería decirte que escuché lo que pasó y quería mostrarte el apoyo que te tengo acercándome a ti. Me haz apoyado mucho con Khai, y si necesitas algo, no olvides que estoy listo para ayudarte.- Asiento y Zayn se acerca abrazándome.
-Gracias, aunque no debes preocuparte, estoy bien.
-¿Tienes planes ahora? Iré a desayunar pero la verdad es que una buena compañía me ha hecho falta.

Zayn es un hombre muy inteligente, estos años he visto como tiene un corazón enorme, lo conozco desde años, pues toda la vida, mi hija Camila, y su  hija, Khai, han estado juntas.
A lo que se refería cuando dijo sobre "apoyarlo mucho" es que, él es un padre soltero, y al tener una hija, quieras o no, necesita algunos tips de madre. Entre broma, una vez logró decirme que solo se había acercado a mí porque soy la única mamá del grupo que no ha intentado salir con el, y es que, ciertamente es un un hombre muy guapo, y todo el tiempo huele delicioso, pero yo estoy... estaba casada.


La mesera cola frente a cana uno su plato enorme repleto de pancakes.
-La cosa es que, él me engañaba.- digo mientras tomo el primer bocado de comida.
-No puedo creerlo, ¿cómo te enteraste?- pregunta genuinamente interesado por saber.
-Vas a decir que soy una tonta...-suspiro.- esto no era nada nuevo, desde que nos casamos fue así y yo lo sabía.-me detengo y miro a Zayn.- la última vez fue hace un año, pero esta vez simplemente ya no pude.
-Oye!.- Zayn toma mi mano.- Tu no eres una tonta, él sí.- asegura mientras su mano regresa a sus cubiertos.- cualquier hombre sería afortunado de tenerte , eres graciosa e inteligente, Isa.- No puedo evitar hacer una mueca.
-Dijiste las cosas que se le dicen a alguien que no es atractivo.- comienzo a reír nerviosa, él se atraganta y ríe.
-No, eres muy atractiva, Dios, eres demasiado atractiva que no entiendo cómo.- deja de mirarme.- no lo dije porque no quería incomodarte.- y para nada es incómodo, solo siento como me sonrojo como una niña de 15 años en su primera cita.

Tú y yo./ Z.M.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora