*Narra Lali*
Peter me había dicho su historia, su verdad. Igual yo estoy con Seba. Estoy bien. No cambiaré nada, solo mi forma de pensar. Quizás en unos días le diga a Peter quien es el padre realmente.
Yo: eh, Peter. Yo siento haberme enojado contigo. Solo que no podía creer que me estés haciendo lo mismo otra vez...
Peter: bien, te entiendo. Solo quería aclararte las cosas. Tampoco quiero que cambie nada entre nosotros. Quiero que seamos solo amigos...
Si, solo amigos me dijo. Lo escuché bien.
Yo: eh, si. Yo tampoco. Quiero que seamos solo amigos. Sin mal entendidos.
Peter: bueno, te cuento de Natalie?
Yo: como quieras
Peter: tuve una oferta para un trabajo. Iba a protagonizar un programa. Me llamaron para la reunion y allí me reencontre con Natalie. Nosotros teníamos una linda relación antes que esta. Eramos buenos amigos. Pero ahora que estamos juntos logré descubrir una nueva Natalie. Mas egocéntrica, mas creída. Pero por sobre todas las cosas mas mandona. Ella me quiere dominar. Igual, se nota que me quiere mucho. Ese es solo un lado de ella. El otro lado es bueno, comprensivo, amistoso, cariñoso.
Yo: wow! Justo me vino a tocar el lado oscuro de Natalie. Digo por lo mal que me trata.
Peter: tu la provocaste anoche. Buscabas pelea.
Yo: peter, no quiero discutir. Solo te voy a aclarar una cosa: no tengo ningún problema contra ella. Respeto a quienes me respetan. Así que dejáselo en claro a ella.
Peter: bien.
Me comenzó a sonar el móvil. Era papá. Oh! Seguramente es algo de Ana. Me había olvidado completamente de ella. Quemala hermana. Había dicho que hoy iría a la clínica.
*Llamada Telefonica*
Papa: hija, Ana despertó. Esta pidiendo verte. Ven un rato , si?
Yo: hey! Que buena noticia. Si, de hecho estaba preparando mis cosas para ir. Ya en un rato estoy allá.
Papá: okay mi niña. Te esperamos.
Yo: chau, te amo.
*Fin llamada telefónica*
Peter: era Sebastian?
Yo: no. Era mi papá. Están en el hospital con Ana, se despertó. Me tengo que ir. Chau.
Peter: espera. Dejame llevarte.
Yo: oh, no. Peter deja. Debo caminar.
Peter: como digas. Adiós.
Salí del bar y me fui hacia la clínica. Me tomé un taxi ya que habíamos venido en el coche de Peter.
Papá: Lali!
Yo: papi! Donde está Ana?
Papá: en su cuarto. Pero hay un problema..
Yo: cual? No se despertó?
Papá: si, pero piensa que tienen ella quince y tu diez años.
Yo: qué?
Papá: si. Eso.
Yo: bueno, puedo pasar?
Papá: si, ve.
Entré al cuarto y allí la vi. Hace tanto tiempo no la veía. Nuestra relación es única. Ella es como mi mejor amiga, mi segunda mamá. Inmediatamente me acerqué a ella y le dije
Yo: Anu
Ana: hermanita! Que estirón que pegaste! Te levantaste como cinco centímetros!
Yo: si, es que...
Ana: ah no. Tienes esos zapatotes. Ni yo con quince años uso eso... Tu tienes diez , niña! Pues... Lo que usan las pequeñas de ahora...
Yo: si, Ani, es que mamá me lo permitió. Como te sientes?
Ana: bien. Pero no se lo que ha pasado...
Yo: tuviste un desmayo. Sólo eso.
Ana: ah... Y a ti como te está yendo con la novela? rincón de luz, no?
Yo: si, rincón de luz. Bien.
Esa fue mi primer novela. La hice a los diez años.
Ana: magnifico. Cuando me iré de aquí?
Yo: cuando los medicos lo digan... Ana, me tengo que ir... Mamá dijo que debo ir a lo de la tía... Te veo luego. Te amo
Ana: oh, bueno. Mandarle saludos a la tía. Y nos vemos. Yo también te amo.
Yo: adiós.
Me fui de la habitación del hospital muy mal. No creí que fuese para tanto pero si... Mi hermana cree que somos niñas de diez y quince años cuando en realidad tenemos veintitrés y veintiocho años. Dios mío.
