𝟎𝟏𝟖

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                    La oficina de Tatsuo Gojo se encontraba en un estado de caos sin precedentes. Libros antiguos que normalmente se encontraban alineados de forma meticulosa en las estanterías ahora se encontraban amontonados sobre el suelo junto a incontables tazas sucias de café. El aire estaba cargado de una mezcla de desesperación y tensión. Tanto Tatsuo como Seijuro, el líder de los Tenshi, con los ojos inyectados de sangre por la falta de sueño y exceso de cafeína, estaban sumidos en una frenética búsqueda del culpable que había atentado contra la integridad de la heredera de los Tenshi.

                    El padre, en un arranque de ira, lanzó un montón de papeles al suelo. Reflejando tanto furia como dolor en su mirada.


                    — ¡Esto es inaceptable! ¡Alguien intentó matar a mi hija mientras estaba bajo tu cuidado! ¿Cómo lo pudiste permitir?


                   El mayor de los Gojo, respiro profundamente, intentando mantener la calma antes de responder.


                     — No hay momento donde no me lo recuerdes, Seijuro. Tampoco hay nadie que lo lamente tanto como yo. Pero enfadarnos no nos va a llevar a ninguna parte. Necesitamos mantener la cabeza fría para encontrar al culpable.

                    — ¿Mantener la cabeza fría? ¡Cada minuto que pasa sin respuestas es una tortura para mi clan! ¡Mi niña aún no despierta!

                   — Compartimos el mismo objetivo, Seijuro. — apretó sus manos, hablando con un tono firme. — Encontrar al responsable y hacer que pague. Hemos investigado a los peces gordos y a los Zenin. Y llegamos a la conclusión de que ninguno de ellos tiene realmente motivos para quererla muerta, la necesitan con vida.

                  — Entonces, ¿quién más podría ser? ¡Esto tiene que haber sido planeado por alguien cercano! ¡Alguien en quien confiábamos lo suficiente!

                 — Si...he estado pensando en eso. Podría ser alguien dentro de nuestras propias filas. Alguien a quien no sospecharíamos.

                — ¿Estás sugiriendo que alguien de tu clan fue quien nos traicionó? No...no suena tanto como una locura.

                — No estoy sugiriendo nada sin pruebas, Seijuro. — alzó sus manos, en un gesto de frenar su reacción.— Pero tenemos que considerar todas las posibilidades. Nadie está por encima de la sospecha.

                — Quiero respuestas, Tatsuo. Y las quiero ahora. — suspiró pesadamente, pasando una mano por sus castaños cabellos. — Mi hija aún está en peligro y no puedo permitirme más retrasos.

                — Yo...— el mayor de los Gojo frotó sus ojos cansados. — He notado que Hana, la sirviente dedicada a los niños, ha estado actuando extraño últimamente. Podría ser una pista.

                — ¿Hana?— Seijuro frunció su ceño, tratando de recordar cualquier momento donde se hubiese encontrado con la mencionada. — Para llegar a estar a cargo del heredero Gojo, debería ser alguien que siempre se mostró leal, ¿por qué sospechar de ella ahora?

               — Precisamente porque nadie sospecharía de ella. Puede haber sido manipulada o amenazada, claro está. Debemos investigarla más a fondo, no tenemos más pistas que esas.

𝑹𝒆𝒔𝒐𝒏𝒂𝒏𝒄𝒊𝒂 𝑰𝒏𝒇𝒊𝒏𝒊𝒕𝒂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora