Gran sonrisa.

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6025 palabras pa ustedes cabros.

Corrió a gran velocidad para llegar a su objetivo, su misión era clara, un pedido de su madre, si lo hacía correctamente tendría tempura esa noche, todo el tempura que entrara en su estomágo.

Inosuke: ¡Gompachiro!
Tanjiro: buenos dias Inosuke, ¿qué puedo ofre...?
Inosuke: ¡toma!-extendió la invitación a la cara del chico pelirrojo-¡estás invitado a la boda de mi madre y el insecto de Douma! ¡Tú y toda tu familia!
Tanjiro: ¡¿ya se casarán?! ¡Muchas felicidades! ¡Debes estar feliz!
Inosuke: ¡claro que no! ¡Estoy hambriento! ¡Adiós!

Volvió a correr, pero esta vez a la casa del Agatsuma.

Zenitsu: ¿enserio? Felicidades, el abuelo y yo iremos entonces.
Inosuke: ¡bien!
Zenitsu: ¿Tanjiro irá?
Inosuke: ¡si!
Zenitsu: ¡entonces Nezuko-chan también! Esta es la oportunidad perfecta, cuando ella tome el ramo de flores me arrodillaré y...
Inosuke: ¡si arruinas el gran dia de mi madre acabaré contigo con mis propias manos!

Volvió a correr hacia diferentes direcciones dando invitaciones, todos sorprendidos por la repentina noticia que se les estaba siendo presentada.
Se tenía entendido que Douma iba al hogar de Kotoha ya que estaba notablemente enamorado, y ella también, nunca creyeron que se iría enserio, después de todo él trabajaba en el culto de oración, y ella trabajaba para él, había quienes la tachaban de aprovechadora, otros de ingenua, pero los demás no le daban importancia y los dejaban vivir su amor.

Douma se lo había planeado cuidadosamente, renunciaría al culto finalmente y aprovecharía sus ganancias para adquirir un negocio, sería pequeño, pero Kotoha estaba dispuesta a ayudarlo, pensaba incluir a Inosuke, pero él aún estudiaba, y como no estaba muy de acuerdo con que su madre estuviese con alguien más...

Douma: ¿qué dices? ¿Trato?
Inosuke: ¡no! ¡Me niego a que le pidas matrimonio!
Douma: ssshh, te escuchará.
Inosuke: ¡no me importa!
Douma: Inosuke, sé que no te agrado, y que no quieres que esté con tu madre, pero entiendeme, nos amamos, la amo, y quiero que esté feliz, ella merece ser feliz.
Inosuke: quiero que sea feliz, pero tú...
Douma: no te preocupes, no la encerraré ni nada por el estilo, no la alejaré de ti, quiero dejarlo claro desde un principio, los amo a los dos por igual.
Inosuke: ¿eh? ¿A mi también?
Douma: claro, te pareces mucho a Kotoha.
Inosuke: ah, solo por eso.
Douma: más allá de eso, te admiro, durante años mantuviste cuerda a Kotoha, ella se esforzó por ti y tú por ella, ambos son fuertes.
Inosuke: lo sé.
Douma: entonces... ¿Me ayudarás?
Inosuke: con una condición, quiero volver a comer tempura seguido, ella solo te pregunta a ti por la comida y la carne está demasiado condimentada.
Douma: es que asi está tierna.
Inosuke: quiero tempura.
Douma: bien, asi será.
Inosuke: ¿qué tengo que hacer?
Douma: hoy vamos a un restaurante especial.

En el restaurante cada uno pidió su plato de comida favorito, Inosuke devoraba con fervor el tempura, siendo regañado por su madre que le pedía ser algo decente a comer, arruinando el ambiente que Douma quería crear.

Kotoha: Ino, eres como un animal salvaje.
Inosuke: ¿ah? Me enfadas mamá.
Kotoha: no te enojes, pide más si quieres.
Inosuke: ya no quiero.

Inosuke se retiró, su madre trató de ir por él pero Douma lo detuvo.

Douma: espera, sabes que ese chico es enfadado, pero se calmará, no puede vivir sin ti.
Kotoha: si...

Inosuke aprovechó la distracción de su madre y se escondió debajo de la mesa lejos de los pies de ambos para evitar ser descubierto, ya tenía todo listo.

Douma: Kotoha, te conozco desde hace ya mucho tiempo, pasamos mucho tiempo juntos y me divierto estando a tu lado, lograste derretir mi frio corazón que se congeló debido a cosas del pasado, gracias por todo, Kotoha.

DIAS DE MARIPOSAS.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora