𝐀 𝐌𝐚𝐧 𝐨𝐟 𝐇𝐨𝐧𝐨𝐫

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Descargo de Responsabilidad: No soy dueño de Rwby todo pertenecen a sus respectivos estudios.

"Me tragaré mi sangre antes de tragarme mi orgullo". ~ Al Capone

"Soy una persona amable, soy amable con todos, pero si tú eres cruel conmigo, entonces no me recordarás por mi amabilidad". ~ Al Capone.

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"Esa es una gran historia, Sr. Arc", me reflexionó Ozpin la mañana después de haber visto y detenido al atlesiano en el club tratando de secuestrar a Velvet.

—Entonces, ¿qué opinas de esto? —le pregunté, encendiendo un cigarrillo y mirando por la ventana hacia la calle que había frente a mi apartamento—. El clan se está preparando para ir a la guerra con los altesianos si Nicky no le hace justicia a Junior.

Ozpin se rió entre dientes: "justicia es una forma divertida de describir lo que va a pedir, pero sí, si esto conduce a una guerra, entonces podría muy bien poner un freno a otras empresas criminales de Junior".

"Te refieres a los robos de polvo", dije sabiendo que a Ozpin solo le importaba una cosa con respecto a las llamadas empresas criminales del Clan.

"Por supuesto que lo hago, señor Arc", me admitió Ozpin.

—Entonces, ¿quieres que el Clan vaya a la guerra? —le pregunté, encontrando la idea un poco desconcertante. Si la mitad de lo que O-Ushi me había dicho sobre los altesianos que estaban en guerra era así, sonaba como lo último que alguien podría desear. Ella me había dicho que no se les retenía nada ni se les prohibía hacerlo, sin duda sería sangriento.

"En este momento, señor Arc, los atlesianos son enemigos de mis enemigos, y ciertamente no son amigos de ninguna manera, pero son una espina en el costado de Junior y Roman. Si eso lleva a una guerra, sería un tonto si no aprovechara la situación", me explicó Ozpin.

No dije nada al respecto. Hasta el momento no sentía más que odio por los atlesianos y por lo que habían hecho. "Encontré algo en el tipo que atrapé", le expliqué, "una caja de cerillas para un bar en el lado oeste de la ciudad, cerca de las terminales ferroviarias".

"Esa es una de las áreas que los atlesianos han reclamado como su territorio", reflexionó Ozpin, "¿qué pasa con eso?"

"Si tienen el control del patio ferroviario, estaba pensando que podría ser parte de sus operaciones de contrabando", le expliqué, "Después de lo que le pasó a Velvet, me preguntaba si tal vez valdría la pena investigarlo, incluso podría ser parte de sus operaciones de tráfico de personas".

"Sin duda puedo hablar con mis amigos del departamento de policía para que investiguen más a fondo el asunto", dijo Ozpin. "¿Cómo se llama el bar?"

"El Caboose", le respondí sintiéndome más que un poco decepcionado con su respuesta, "quizás pueda ir a verlo yo mismo, tomar un auto y echar un vistazo al área".

"Usted no es detective, señor Arc, y esa zona sería muy peligrosa. Los atlesianos probablemente ya han oído hablar de usted y no tengo ninguna duda de que se aprovecharían de que usted ande a escondidas por su territorio. Concéntrese en su tarea actual antes de poner la mira en el resto de los criminales de Vale. Déjelo en manos de las autoridades competentes", me dijo.

Quería protestar. No tenía ninguna esperanza real de que la policía hiciera ningún avance significativo considerando que tantos policías en el Departamento de Policía de Vale ya estaban en la nómina. Sobornar a policías y funcionarios públicos para que no se metieran en operaciones criminales era algo normal en este tipo de vida. Incluso si Ozpin tuviera algunas placas confiables para enviar, sabía que los corruptos harían todo lo posible para frenarlos. Podrían pasar meses antes de que sucediera algo y para entonces los Atlesianos habrían quemado sus operaciones y cambiado a otra cosa. Nada cambiaría; la peor gente probablemente se escaparía.