༺Final༻

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3 años después

-Entiendo que no puedas venir, pero... es la fiesta del año Tae.

-Jinna, tengo una cita con mi novio, no puedo no ir.

-Él entenderá, ¡Es la fiesta del añooo!-Exclamó la alfa tirando del brazo de TaeHyung.

-Lo siento, pero no, iré a la cita con mi alfa y no cambiaré de opinión.

-No entiendo como pretendes faltar...

-Es mi alfa, ninguna fiesta es más importante que él.

-¿Cómo puedes decir eso, Kim?

-Cuando te enamores, entenderás. Bueno, ya llegaron por mi, ¡adiós!-Se despidió de su amiga caminando hacia la camioneta.

La puerta del piloto se abrió, y bajo el rubio para abrirle la puerta.

-Hola Hobi.

-TaeHyungie, ¿qué tal hoy?

-Todo genial, aunque, sigo sin entender la necesidad de ver filosofía, es... poco tediosa, mucha información.

HoSeok río y asintió.

-Te puedo ayudar con ello, es lo que estudie, pero, termine siendo guardaespaldas del joven Jeon.

-Ni tan joven, ya es todo un treintion, mi hombre.

Subió a la camioneta y HoSeok igual para después comenzar a manejar.

-¿Directo a la casa?

-Si, JungKook me dijo que saldría del estudio a las 17hrs, que de ahí me recogía para irnos.

HoSeok asintió doblando a la derecha para tomar la vía más rápida a casa.

Y si, a casa, pues hace 3 años se había mudando con JungKook a una hermosa casa de 2 pisos color blanca. Era maravillosa, aun recordaba las palabras de su novio "aquí podremos darles el verdadero calor de hogar a nuestros futuros cachorros"

La casa era completamente maravillosa, parecía sacada de un cuento de hadas (según TaeHyung), porque claro, a comparación de la pequeña casa en la que vivió por años, esa para el era una mansión.

La camioneta paro en el garaje y HoSeok camino para abrirle la puerta a TaeHyung, y se dirigieron a la casa, HoSeok solo se dispuso a acompañarlo y quedarse en su posición fuera de la casa junto a otro compañero guardia.

TaeHyung entro colgando su saco en el perchero y cambiando sus zapatos.

Ese vestido le quedaba muy ajustado, le incomodaba, pero le había jurado a JiMin que algún día lo usaría, él se lo había obsequiado.

Subió las escaleras y caminó hacia la recamara principal, entró dejando su bolso en una silla y se adentro al baño.

Se dio una ducha rápida y relajante, salió envuelto en una toalla y abrió la puerta qué daba al armario, un armario enorme, camino a su lado de este buscando la ropa indicada.

Fuera del espectáculo ᘛKookTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora