El poder del Amor

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Después de la batalla, Raven y Chico Bestia se encontraron solos en el tejado del edificio. La noche era oscura y silenciosa, solo interrumpida por el sonido de las sirenas lejanas.

Raven se sentó en el borde del tejado, mirando la ciudad. Chico Bestia se acercó a ella y se sentó a su lado.

"Raven, necesito hablar contigo", dijo Chico Bestia, con una voz nerviosa.

Raven se volvió hacia él, mirándolo con curiosidad. "¿Qué pasa, Chico Bestia?"

Chico Bestia tomó una profunda respiración antes de hablar. "Raven, desde que te conocí, he sentido algo diferente. Algo que no puedo explicar".

Raven se sintió abrumada por la cercanía de Chico Bestia y su mirada intensa. "¿Qué es lo que sientes?" preguntó, tratando de mantener la calma.

Chico Bestia se acercó a ella, su rostro a solo unos centímetros del de Raven. "Te amo, Raven. Te amo desde el primer momento en que te vi".

Raven se sintió como si hubiera recibido un golpe en el estómago. No sabía qué decir, no sabía cómo reaccionar.

"Raven, por favor, di algo", dijo Chico Bestia, con una voz llena de ansiedad.

Raven se levantó, alejándose de Chico Bestia. "No sé qué decir, Chico Bestia. No esperaba esto".

Chico Bestia se levantó y se acercó a ella. "Raven, por favor, no te vayas. Necesito saber si sientes lo mismo".

Raven se detuvo y se volvió hacia él. "Chico Bestia, yo... yo también te amo".

Chico Bestia sonrió, aliviado. "Raven, eso es todo lo que necesito saber".

Y así, en medio de la noche oscura y silenciosa, Raven y Chico Bestia se besaron por primera vez, bajo las estrellas.

Después de la confesión de Chico Bestia, Raven se sintió abrumada por una mezcla de emociones. Por un lado, estaba feliz de saber que Chico Bestia sentía lo mismo que ella, pero por otro lado, estaba nerviosa por el futuro de su relación.

"Chico Bestia, esto es muy rápido", dijo Raven, tratando de calmar su corazón acelerado. "No sé si estoy lista para una relación".

Chico Bestia se acercó a ella, su mirada intensa y apasionada. "Raven, no te preocupes por nada. Estoy aquí para ti, siempre. Y no me importa esperar el tiempo que sea necesario para que te sientas segura".

Raven se sintió conmovida por las palabras de Chico Bestia. Nadie había hablado con ella de esa manera antes. Se sentía como si estuviera flotando en el aire, sin saber qué hacer.

"Chico Bestia, necesito tiempo para pensar", dijo Raven, tratando de alejarse de él.

Pero Chico Bestia no se rindió. Se acercó a ella y la tomó de la mano. "Raven, no te vayas. Por favor, no me dejes".

Raven se sintió abrumada por la desesperación en la voz de Chico Bestia. No sabía qué hacer, no sabía qué decir.

Y entonces, justo cuando parecía que todo estaba a punto de estallar, sonó un ruido en la distancia. Un ruido que hizo que Raven y Chico Bestia se volvieran hacia la oscuridad.

"¿Qué fue eso?" preguntó Raven, su corazón latiendo con fuerza.

Chico Bestia se puso en guardia, su mirada escaneando la oscuridad. "No lo sé, pero no me gusta".

Y entonces, de repente, apareció una figura en la sombra. Una figura que hizo que Raven y Chico Bestia se quedaran sin aliento...

La figura se acercó a ellos, y Raven y Chico Bestia pudieron ver que era Slade, el villano que habían derrotado anteriormente.

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