TIEMPO ATRÁS...

INTRODUCCION

Primeros años de vida...

Vivo en Francia junto a mi madre, desde que era pequeña siempre la he tenido a mi lado... Aunque a veces he querido a un padre, con ella me vasta. Tengo su amor y todo lo que necesito. Nunca había pensado en el hecho de que un apellido podía ser tan importante hoy en día. Ciertamente después de la segunda guerra mágica dejo de serlo pero... para algunos aún lo es.

Desde que tengo cuatro años que mi madre sale con Theodore, él ha hecho muy bien el papel de mi padre y su hijo se convirtió con el paso de los meses en mi mejor amigo. Lo quiero mucho y no quiero que sea mi hermano, porque si se convierte en eso, lo odiare. Eso es definitivo. Yo desconocía el nombre de mi padre hasta hace poco...

[...]

-¿Cambiadas al nacer? ¿Está jugando conmigo?

Mire a la pareja de ancianos en frente de mí.

-Imposible mi madre es hija de muggles, que su hija allá sido squib no es mi problema, quiero pruebas de no ser así... no lees creeré ni una palabra.

-Aria querida, de no ser así no abrían irrumpido en nuestro departamento de esa manera.

-Mamá... esos sangre pura, mienten. Se están aprovechando de ti, yo no creeré en ustedes a menos que se hagan un análisis de sangre.

Me miraron mal.

-No se hagan los tontos, cualquier ilustre familia pura... quisiera tener a Hermione Granger dentro de su árbol genealógico, y no lo digo solo porque sea mi madre. Sino porque así es.-Dije de manera desafiante.

-Pero que edad tienes niña...

Mire al que se supone debe de ser mi abuelo.

-¿Tengo 9 algún problema con eso?-dije mientras ponía mis manos a la altura de las que vendrían a ser mis caderas. (O futuras al menos, aun no me desarrollo)

[...]

Esas momias tenían razón, según estos papeles... ellos estaban emparentados directamente con mi madre. Esto tiene que ser una broma...

-Entonces... ¿ustedes son los padres biológicos de mi madre?

Ambos asintieron algo dudosos, creo que los intimide. Mi madre me veía con el ceño fruncido, pero que podía hacer. No confió mucho en los desconocidos.

[...]

Cuando nací, mi madre se alejó de todo, incluso de sus deseos de proteger a los desafortunados. Puso un atelier en el país de la moda. No sé si aún sea considerado el país de la moda... pero bueno. Francia ha sido mi hogar desde siempre...

Mis nuevos abuelos han intentado convencer a mi madre de volver a Inglaterra, quieren recuperar los siglos perdidos, pero ella es aún más testaruda que yo. De alguien lo tenía que haber heredado.

Después de meses de práctica fue que mamá, pudo tutear a sus padres... bueno no tutear, pero los llamo mamá y papá. Yo ante su ejemplo, bueno a mí no me quedo de otra más que llamarlos abuelo, aunque créanme que quería llamarlos por sus nombres de pila... Fue una gran tentación.

[...]

-Deneb querida en Londres tendrás la mejor educación.

Yo mire mal a mi abuela.

-Eso lo dices porque tú no dejaras tu vida aquí. Tu vida esta allá en Londres, mientras mis amigos están acá... ¡Todos!