Capítulo 8: Díaz festivos

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Aria Rosier...


No había hecho ningún ataque en meses. Las prefectas terminaron por atraparme mientras salía de una clase. Recupere con creces los puntos perdidos...

Mi madre me había mandado una carta, había recuperado comunicación con sus antiguos amigos y estos habían hecho una cena navideña de bienvenida en su honor.

-Afuera de la casa de los Potter-


-¿Debes de estar bromeando?

-Aria, esto no es una broma.

-Yo no pienso entrar ahí.

-Cariño, tenemos que entrar... nos están esperando.

-Que esperen, yo no pienso entrar ahí.

Nos encontrábamos en frente de una casa, yo estaba abrazada a un poste de luz. No de esos que te electrocutan, sino de esos que tienen una lamparilla de luz, con los que alumbran las entradas de las casas.

Esa era la casa de los Potter, por lo que James Potter debe de estar ahí.

Y todos saben que yo y el, no somos una buena combinación.



Narrador Omnisciente...


-Dentro de la casa de los Potter.-


-James, se racional. ¡Quítate de ahí!

-Si ser racional significa no dejar que ella entre, pues lo seré.... ¡Ella no entra! Y es mi última palabra-Decía James Sirius Potter Weasley mientras jalaba muebles que impidieran el paso a la puerta principal, salto por sobre ellos y el mismo comenzó a ser un obstáculo para que esa puerta no se abriera.

-En la entrada de la casa de los Potter-


-¿Hermione?

-Hola George.- saludaba una Hermione muy apenada, ya que a su lado estaba una pequeña rubia que se aferraba a un poste de luz.

-¿Pero porque no entras?

Fred a su costado, señalo a la rubia.

-Creo que por ella.

-Vaya, menudo problema.

[...]


-¡Aria suelta ya ese poste!

-Me reusó, yo no pienso entrar.

-Señora Rosier-r

Hermione levanto la vista, el hijo de George le estaba hablando.

-¿Que pasa cariño?

-Aria tiene una debilidad por lo que se, son las cosquillas... si me deja hacérselas tal vez suelte el poste.

Aria le dedico a Fred una mirada de te odio...

-Claro inténtalo.

-No te acerques Fred.

-Yo solo quiero entrar y tú interfieres en esa acción.

-Das un solo paso más y tendrás que atenerte a las consecuencias.

TIEMPO ATRÁS... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora