Confort | 3° Triologia Amores Diferentes

Partido

Narra Stella:

Me desperté más tarde hoy, eran las once de la mañana. Me duché y desayuné unas tortitas y me dispuse a hacer cosas.

Pasaron las horas mí madre y mi padre vinieron a mí casa para las siete, a las y media fuimos a dónde sería el partido.

Agarramos lugar en primera fila. Decidí mandarle un mensaje a Ethan.

Ethan⚽

¡¡¡Suerte!!!

Gracias❤️

¡¡¡Me ha puesto un corazón!!! ¡No me lo creo! ¡¿Esto es un sueño?!

Entraron los de los equipos, ya habían calentado así que no tardaron mucho en empezar a jugar. Ethan era delantero.

Llevaban unos minutos de partido, le pagaron la pelota a Ethan, que estaba al lado de la portería y marcó. Nos pusimos a celebrar. Él me señaló y me lanzó un beso, se quitó la camiseta y se acercó trotando para dármela. El partido continuó, yo estaba feliz con su prenda.

Volvieron a meter. Y otra vez.

Acabó el partido, habían ganado por tres puntos. Salimos, yo aproveché para entrar al baño y cambiarme, me puse su camiseta, me quedaba enorme. Guardé la mía en una pequeña mochila que llevaba.

Estábamos afuera buscando a Ethan y su familia, había bastante gente y eso hacía que no los viéramos.

-¿Y si no han venido? -Preguntó mi padre

-Claro qué han venido -Los vi entre toda la gente -Ahí están -Nos acercamos un poco más -¡Ethan! -Él giró a verme y cuando me vió su sonrisa se ensanchó.

Corrió hacía mí y cuando me alcanzó, rodeó mi cintura y me levanto, yo rodeaba su cuello, reí un poco cuando noté que se había desequilibrado. Me dió unas vueltas y me bajó, yo me encontraba riendo y él con una gran sonrisa.

-Lo has hecho genial -Le felicité

-Te he dedicado el gol

-Lo sé -Reí nerviosa.

Vió a mis padres y los saludó, nos acercamos a su familia, había un hombre que supongo que será su padre. Eran idénticos.

-¿Daiyanara? -Preguntó el hombre

-La misma. Cuánto tiempo

-Sí. Fíjate ya tienes una hija

-Sí, es una gran coincidencia que se conocieran.

-Sí. No me quiero imaginar como se conocieron -Yo evité reír al recordar esa noche.

-Ni una palabra -Me susurró Ethan

-Todavía recuerdo esa recuperación que nunca hice.

-Se me olvidaba, fuiste la única qué suspendió

-No era tan mala en esa asignatura -Ambos rieron. Mi madre se fijó en la suya. -Un placer, soy Daiyanara y él es Everett, mi esposo y ella es Stella mi hija

-Soy María, él es Christopher, mis hijos Ethan, Alice y Chloe y mí hermano Adam.

-Un placer

Estuvimos hablando y fuimos a cenar, quedamos que el día siguiente irían a nuestro restaurante.

No sé en qué momento Ethan me agarró la mano, pero lo hizo y no la soltó.

Cuándo volví a casa, mis padres se negaron a quedarse conmigo así que se fueron yo me duché, me cambié y me tumbé en la cama para dormirme.