𝘙𝘦𝘥 ━━━━ 𝘒𝘦𝘪𝘨𝘰 𝘛𝘢𝘬𝘢𝘮𝘪 𝘰𝘯𝘦 𝘴𝘩𝘰𝘵𝘴

Amándose

Este shot contiene leves insinuaciones de smut, si no te gusta ese tipo de contenido es mejor que te saltes este <3

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Sintió como la mano de su amado pasaba por sus muslos, subía más hasta sus caderas, seguía por su cintura, torso, brazos y pecho. Se paseaba con delicadeza por su clavícula, pasaba por su cuello y llegaba hasta su rostro, acariciando suavemente su mejilla, tan suave, casi como si creyera que podría romperla con su toque.

Casi como si ya supieran qué hacer, enredaron sus piernas debajo de las sábanas, sonriéndose cómplices mientras apenas se veían por la falta de iluminación de la habitación.

—¿En qué piensas? —se atrevió a preguntar mientras observaba con atención al rubio, ahora con facciones aún más maduras en comparación al tiempo en que lo conoció.

—En esto.

—Sé más específico —rio.

—En ti y en mí, ahora en este preciso momento, si me dieran a elegir donde quiero estar ahora mismo no diría nada, porque no existe otro lugar en el que quiera estar que no sea contigo, ahora y en esta madrugada. Ambos agotados, ambos no haciendo nada más que amarnos.

—Keigo… —susurró cerca de su cuello sin palabras, él era así, a veces simplemente decía cosas con el potencial suficiente para dejarla sin palabras —Te amo tanto, de verdad tanto.

—Yo también te amo demasiado —susurró mientras pasaba su mano por su espalda, sintiendo como se estremecía ante su toque para luego sonreír en medio de un beso porque sabía el efecto que él tenía en ella, pero sobre todo sabía el efecto que tenía ella sobre él, porque ella era capaz de hacer que cualquier suelo bajo sus pies se derrumbe.

De vez en cuando tenían esas madrugadas juntos, donde se exploraban con suavidad, sin prisa y prestando atención a cada pequeño detalle del cuerpo ajeno. Lento, muy lento hasta que cierta prisa llegaba y los besos se hacían más intensos, las caricias más necesitadas y los suspiros eran algo más audibles. Justo en ese momento sus manos se entrelazaban con fuerza, como si en ese gesto estuvieran de manera tácita las palabras «nunca me iré» o un «te amo» o quizás ambas cosas, solo ellos sabían eso.

Sí, esas madrugadas donde se amaban intensamente, entregándose en cuerpo y alma eran las mejores, y no terminaba allí, ya que terminaba con ellos enredados entre las sábanas y sus caricias suaves. Con sonrisas fugaces y ojos somnolientos que no conciliaban el sueño ya que en realidad sus corazones no pedían dormir luego de aquellos intensos momentos, pedían seguir admirando a la persona que amaban, pedían eso a gritos y no podían hacer más que complacer ese dulce deseo.

Sus corazones y alma pedían que se susurren cuanto se amaban hasta que el amanecer irremediablemente llegase y ambos tuvieran que levantarse y cumplir con sus actividades diarias. Ambos sabían que el resto del día, y el resto de sus vidas en su cabeza solo resonaría sus frases de media noche mientras sus recuerdos se inundarían de aquellas escenas protagonizadas por ellos dos amándose, sí, eso, solo amándose.

N/A: Y no, no sé qué se me antojó cuando escribí esto 🚶‍♀️.
En realidad lo escribí la semana pasada ya, lo iba a publicar anoche pero estuve enferma, tenía fiebre así que ya no pude, de todas maneras espero que no hays sido una metida de pata muy grande y que les guste ❤️