La estrella más brillante

El fantasma de la biblioteca

A medida que los días iban pasando en el reino Champiñón, era cada vez más evidente que el siguiente torneo de karts no se podría llevar a cabo a tiempo, por lo que la princesa decidió recurrir al plan B que se había discutido y retransmitió el antiguo torneo de tenis para mientras. Mientras tanto, la construcción de la nueva sucursal del Centro Cocotero continuó su curso, pues los trabajadores pianta finalmente regresaron, aunque la inauguración se iba a atrasar un par de semanas, tal vez incluso un mes. Fuera de esos retrasos imprevistos, el reino se había recuperado perfectamente del último ataque de Bowser y sus fuerzas, y todo había vuelto a la normalidad ... o bueno, casi todo.

Uno de los días en que Mario y Luigi visitaron la ciudad central del reino se dieron cuenta de que había algo de ajetreo alrededor de la biblioteca, con varios toads aglomerados cerca de la entrada. Entonces, los hermanos decidieron acercarse para ver qué despertaba la curiosidad de tantos habitantes, y una vez que estos los vieron les dieron paso, aliviados de que los "expertos" en el tema hubieran llegado. Al estar cerca de la entrada se toparon con Toad, quien llevaba solo su chaleco de aventurero sin su mochila o su linterna y estaba hablando con un toad con un bigote negro bastante marcado, más grande incluso que el de Toadsworth, y que llevaba puesto un chaleco azul con un par de lapiceros en un bolsillo en el lado derecho. Al notar la presencia de los hermanos el toad de bigote prominente se acercó a ellos y les dio un apretón de manos, claramente aliviado y emocionado a partes iguales por verlos en persona.

??? : ¡Oh, Mario y Luigi! Es un alivio tenerlos por aquí, siento que me voy a volver loco si esto continua.

Mario (confundido) : Claro, no se preocupe señor ...

??? : Ted, me llamo Ted.

Mario : Bien, señor Ted ¿puede comentarnos qué está sucediendo aquí?

C. Toad (se acerca) : Creo que será mejor tratar esto dentro de la biblioteca. Toadette dice que será mejor así. (se acerca a Mario para susurrarle) No queremos causar pánico.

Mario asintió, tras lo que los hermanos entraron a la biblioteca junto a Ted mientras que Toad se quedó hablando con todos los toads que se habían aglomerado en la entrada, y a lo lejos Mario pudo escuchar que el autoproclamado capitán prometía que capturarían "al ladrón". Esto llamó su atención, pues se preguntaba qué estaría sucediendo realmente para que tener un ladrón fuera a causar menos pánico que lo que realmente estaba sucediendo. Ya en la biblioteca se toparon con Toadette, quien estaba hablando en la recepción con una toad algo anciana, quien llevaba puestos unos lentes con aros en forma de media luna, un collar de perlas y un chaleco rojo oscuro. 

Toadette (al ver a Mario y Luigi) : ¡Chicos! Menos mal que llegan.

Luigi (nervioso) : Estoy empezando a preocuparme por lo que está pasando.

Mario : Además, escuché a Toad hablando sobre atrapar a un ladrón o algo así.

Ted : Nada de ladrones, lo que realmente sucede es que alguien embrujó a la ciudad.

Luigi : ¿E~embru ... embrujar?

La toad con quien Toadette estaba hablando asintió. En ese momento llegó Toad luego de cerrar las puertas de la biblioteca para que ningún oído curioso pudiera enterarse de lo que iban a hablar.

C. Toad : Veo que ya conocieron a la bibliotecaria también.

Mario (se cruza de brazos) : Sí, y parece que tenemos un problema con el "más allá".

Ted : Y por eso es bueno que estén aquí; si alguien sabe lidiar con fantasmas esos son ustedes dos.

Mario (toma a Luigi de los hombros) : En especial este hombre de aquí.