MEMORIA || secuela EL FUTURO DEL DESTINO [TERMINADA]

cap 5

Narrador Camila.

Llegó el día el Gran Rex llegó, llegó la hora, era la hora de lucir.

Estábamos todos atrás del escenario, respirando profundo, yo me encontraba tomando agua.

- bien es hora- dijo Sabrina.

Empecé a toser, agarre un papel y me dolió toser, se di la vuelta para que no vieran y luego de terminar sentí un sabor raro en mi boca, miro el pañuelo y era sangre, mire a los chicos y ellos miraron el papel.

Me miraron y agacharon la cabeza, me limpie la boca y respire ondo para no sacar lágrimas.

- arriba- dijo Sabrina, llegamos al escenario y la gente empezó a gritar de la emoción.

Está era una larga noche.

(...)

- fue una locura- dijo Luisana.

- la verdad que sí- dije emocionada.

Nos encontrábamos en la sala de descanso del teatro.

Los chicos estaban tomando champagne y yo solo agua.

- bueno yo tengo un regalo para los cuatro- dijo Benicio, nos dió una caja a cada uno.

Decidí abrirla con delicadeza.

Era una cajita roja en forma de corazón, al abrirla me encontré con un collar, de tapa, al abrirlo me encontré con dos fotos mini, una de los cuatro y la otra de Felipe, Lucas y yo, sonreí por el gesto y lo abrace.

- gracias es muy lindo, te quiero mucho- dije abrazando a Benicio.

- es un placer que algo le guste a Camila Bustillo y encima el regalo en mío- dijo con una sonrisa.

Yo sé la devolví divertida.

(...)

Con Felipe nos dirijamos a casa, yo estaba llenando a Lucas en mis brazos y Felipe tenía su brazo sobre mis hombros.

Suspiré al llegar, el abrió la puerta y yo fui a dejar a Lucas en su camita, luego Felipe se estaba bañando.

Entre al baño y el estaba en la ducha.

- Feli iré a comprar algo para comer, tengo hambre y lo que quiero no tenemos- dije mientras mi mano sostenía la manija de la puerta.

- y que quiere comer?

- helado de dulce de leche - dije con una sonrisa.
El  soltó una risa- bueno amor, cuando llegues deja un poco para mí- dijo y yo solo dije okey.

Me puse una campera negra fina y salí de la casa, no sin antes poner llave.

Me dirigí a la heladería que quedaba a tres cuadras de casa.

Camine tranquila, pensando.

Era difícil sentir lo que yo siento, pensar que recién tengo 20 años, ya tengo un hijo, estoy creando mi familia y por culpa de una maldita enfermé me la arrebatará.

Sentir como la sangre sale de mi garganta debido a la tos es horrendo, siento que se me desgarra y es doloroso, siempre que pasa quiero llorar y llorar pero no quiero mostrarme debil, Quiero darle una familia a Felipe pero no puedo, el quiere que este bien y se demuestra bien pero se que en el fondo bajo ese actor hermoso que es se que le duele.

Seguí caminado intentando no pensar en eso.

De pronto vino un viento que me dió escalofrío, intenté acomodar mi pelo con mis  manos, al terminar de arreglarlo mire mis manos y tenían mechones de pelo.

Me frente y mire asustada mi mano- noo, por favor no- dije, quería llorar, no quería perder mi pelo, no, amo mi pelo y me costó mucho tenerlo bien cuidado, y ahora me quedaré pelada.

Y seguía horrible, me vería al espejo y no quería hacerlo.

- se encuentra bien señorita- dijo un señor mayor.

Lo mire y solo asentí con una sonrisa fingida, el me la devolvió pero era verdadera y sincera, seguí caminando hasta llegar a la heladería y luego le diré a Felipe de lo sucedido, no quiero pero lo haré.

Será un infierno.