Pase por muchas cosas estos meses... Y pensar que será navidad dentro de unas semanas, me ponía raro.
De forma sospechosamente sospechosa, los rumores provocados por Nao desaparecieron con el pasar de los días.
Y ya no tengo encontronazos con Kokujin desde que la policía lo llevo a la comisaría.
Prácticamente... He tenido paz en estás semanas.
Ahora estaba en el centro comercial junto con mi abuelo. Caminábamos entre las tiendas, mirando los escaparates llenos de luces y decoraciones navideñas. La gente iba y venía, cargando bolsas de regalos y charlando alegremente. El ambiente festivo contrastaba con lo que había vivido recientemente.
Yamamura: ¿Qué te gustaría para Navidad, Hiroki? -preguntó mi abuelo mientras observaba un árbol de Navidad decorado con esferas brillantes.-
Hiroki: No lo sé, abuelo. Creo que lo único que quiero es que todo siga tranquilo. -respondí, encogiéndome de hombros.-
Yamamura: Hah... A veces la paz es el mejor regalo, ¿no? -dijo, dándome una palmada en la espalda.- Pero aún así, deberías darte un gusto. Algo para ti, algo que realmente disfrutes.
Mientras pensaba en lo que dijo, mis ojos se detuvieron en una tienda de videojuegos. Recordé los momentos que solía pasar jugando, una distracción que me alejaba de los problemas. Quizás mi abuelo tenía razón, tal vez merecía un pequeño escape, un descanso de todo lo que había pasado.
Hiroki: Tal vez me compre un nuevo juego. -dije con una sonrisa ligera.- Algo para disfrutar durante las vacaciones.
Yamamura: Eso suena bien. -respondió, asintiendo.- Vamos, elige el que más te guste. Es mi regalo para ti.
Hiroki: Gracias abuelo... Iré a la tienda de videojuegos, ¿me acompañas? -Musité de forma infantil y alegre.-
Su rostro cambio... Su rostro estaba sorprendido.
Yamamura: Je... Me recuerdas a cuando tu eras un niño todavía... Y pensar que ahora estás por cumplir 16 años. -Su voz comenzó a quebrarse poco a poco, preocupándome.- Hace mucho que... No te veía con esa sonrisa tan infantil, jajaja. -Río mientras me miraba orgullosamente.- Eres un muy buen chico Hiroki, No dejes que ninguna otra persona te lastime...
Hiroki: Abuelo... -murmuré, sintiendo cómo un nudo se formaba en mi garganta al escuchar sus palabras.-
El verlo tan emocionado y a la vez vulnerable me hizo darme cuenta de cuánto le había preocupado todo lo que había pasado en los últimos meses. Sabía que había intentado ser fuerte por mí, pero ahora veía cuánto le afectaba todo lo que había vivido.
Hiroki: Prometo que no lo haré, abuelo. -dije, mirándolo directamente a los ojos.- No dejaré que nadie más me lastime.
Yamamura: Eso es lo que quería escuchar, Hiroki. -respondió, colocando una mano en mi hombro con firmeza, pero con un toque de cariño.- Siempre recuerda que, pase lo que pase, tienes a tu familia a tu lado. A mí, a Yuri... No estás solo.
Sus palabras resonaron en mi mente mientras entrábamos a la tienda de videojuegos. Mientras exploraba los estantes, eligiendo un juego, no podía dejar de pensar en lo afortunado que era de tener a alguien como mi abuelo a mi lado, apoyándome incondicionalmente.
Elegí un juego de aventuras, algo que sabía que me mantendría entretenido durante las vacaciones. Al salir de la tienda, noté cómo el ambiente entre nosotros se había vuelto más ligero, más relajado.
Mientras salíamos de la tienda...
Vi a Kaede, junto con Ayumu...
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私を愛して (Kokujin no tenkousei)
RomanceSolo quería huir de la oscuridad... Hasta que tú luz extinguió esa oscuridad