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-126 d.C-
-Red Keep-

Daera despertó al amanecer como era habitual. El no estar en su hogar no la despojaba de sus obligaciones y lecciones, no es que tuviera muchas realmente. Tenía sus lecciones y, cuando estaba en casa, un lugar en el consejo de Rhaenyra, ayudaba con los pequeños y básicamente se encargaba de labores digamos domésticas, en el sentido noble, porque los criados se encargaban de la mayoría de las cosas. Ella podía dar paseos y jugar con los niños, bordar, leer, instruirse, ayudar a los pequeños con el Valyrio... no era gran cosa, cuando tuviera un esposo ayudarlo en sus baños quizá y participar en la organización de torneos y banquetes, cuidar a sus propios hijos...Ella aún asistía a clases de danza para mantenerse grácil y le gustaba aprender de los maestres tanto como podía, se podía decir que Daera tenía grandes conocimientos políticos, aunque no muchos lo sabían. Mientras la joven dejaba que las damas arreglaran su cabello se preguntaba a qué dedicaban sus días los demás, Helaena por ejemplo ¿qué hacía? Sabía que que sus hermanos y sobrinos daban paseos a dragón cuando se aburrían o pasaban tiempo con ellos ¿los hijos de Alicent harían lo mismo? No recordaba haber visto a Helaena volar mucho de niña... quizá podría pasar tiempo con ella, se sentía dolida por cómo Aegon se comportó anoche, así que no quería pasar tiempo con él, no esperaba que su reencuentro fuese así. Aemond no era opción, y con sus sobrinos/hermanos estaba todos los días en Dragonstone así que no era como que le llamase mucho la atención.

— Lista, Princesa - murmuró la dama que se encargaba de su cabello - tiene el cabello muy largo y hermoso.

— Gracias Shae - murmuró en respuesta con una sonrisa la Princesa.

— Heredó los rizos de su madre, aunque un poco más sueltos. Le lucen maravillosamente - Daera volvió a sonreír.

— También tienes un cabello hermoso Shae - devolvió el cumplido - largo y brillante.

— Me halaga, Princesa - respondió con ligera vergüenza la dama.

Daera se dirigió al comedor para desayunar en familia, como estaba acostumbrada, sin embargo se encontró con que el lugar estaba solo. Preguntó a uno de los sirvientes la razón y se le explicó que la familia real hacía muchos años que no compartía la mesa en las comidas, salvo por algunas ocasiones en la cena. Cada uno realizaba sus comidas en sus aposentos. La Princesa agradeció la información y notificó que ella desayunaría en el comedor, que muy posiblemente sus sobrinos/hermanos se le unirían. Al poco rato mientras Daera se servía pan y carne, con algo de frutas para acompañar, comenzó a llegar el resto de su familia, acompañándola en la mesa tal como ella había advertido. Reian y charlaban mientras comían.

Helaena apareció por una puerta lateral seguida por dos niños idénticos en brazos de sus nanas, debían tener unos tres años, la muchacha se quedó observando la mesa unos segundo confundida, aquello que ella estaba observando era algo que no recordaba haber vivido con su familia.

— Puedes unirte si lo deseas Helaena - mencionó Rhaenyra y la Princesa sonrió levemente mientras se acercaba a la mesa tomando asiento junto a Jacaerys, a su lado las nanas se acomodaron con los niños.

— ¿Son tus hijos? - indagó con curiosidad Lucerys, más imprudente no podía ser. La muchacha miró a sus niños y sonrió antes de asentir.

— No sabía que te habías casado prima - comentó Daera - muchas felicidades, son un par de hermosos niños.

— Aegon es el padre - mencionó Helaena y Daera se atragantó de inmediato con su bocado, perdió todo el control y dominio de su cuerpo y emociones, comenzó a toser mientras un remolino de sensaciones la invadía ¿Aegon es el padre? Pero... solo el padre o... por todos los dioses... ¿Aegon había desposado a Helaena?

Fuego y Dragones (+21) - Aemond/Aegon Targaryen.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora