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La joven pareja caminaba de la mano por la noche, sus pasos eran guiados por la luz de la luna mientras simplemente la pareja disfrutaba de su momento juntos, Yoongi cargaba su mochila y Hoseok lo ayudaba con las compras recientes, ambos sin separar sus manos y sin pensar en aquellos que los miraban con curiosidad o con una mirada juzgona.

—¿Estas bien?— interrumpió el pelinegro deteniéndose de golpe.

 —¿Por que no lo estaría Yoon?— pregunto mirando la mueca preocupada de Yoongi.

—Bueno... yo no te lastime, ¿o si?— bajo la cabeza mirando las manos de Hoseok.

No paraba de pensar en aquel momento, el rostro de Hoseok aun estaba en su cabeza, su gestos, sus jadeos, su cuerpo empapado en sudor y aquella cálida sensación de entrar en su cuerpo, simplemente no podía dejar de pensar en aquello, y para su mala suerte su pesimista mente le repetía una y otra vez que habría podía lastimarlo ante su necesitada sed.

Las cálidas manos de Hoseok tomaron el rostro sonrojado de Yoongi, lo levanto y acaricio sus mejillas—No me hiciste daño, estoy perfecto— brindo una caricia en el rostro ajeno.

 —¿Seguro?, la próxima vez lo hare bien, lo prometo— Hoseok sintió su rostro arder miro a otro lado mientras repetía aquella frase en su mente una y otra vez, la próxima vez.

—Lo hiciste bien Yoonie— la sonrisa de Yoongi creció, tomo de nuevo la mano de Hoseok y siguieron caminando a la estación.

—Aquí esta bien— confeso Yoongi quedando solo a pasos de la estación, no muy lejos de la casa del castaño—Es muy tarde, deberías regresas.

Hoseok pareció dudarlo, sin embargo con la cabeza agachada asintió—Esta bien—muy a la fuerza soltó la mano del pálido y se despidió con una sonrisa, sin notar al chico que los miraba a lo lejos.

—Ve con cuidado—hablo sonriente Yoongi suspirando con fuerza al ver la silueta de Hoseok alejarse lentamente.

   —¡Yoongi!— la fuerte voz de Jihoon lo hizo voltear de golpe.

—Hyung— hablo sorprendido Yoongi mirando a su hermano acercarse a pasos relajados.

—¿Ese era tu novio?— pregunto el pelinegro de golpe mirando en la dirección en la que el castaño se fue.

 El menor de los Min paso salivo, miro la lasciva mirada de su mayor, sintió sus manos y piernas temblar con terror—¿Que?— apenas logro decir, la atenta mirada de Jihoon lo atacaba con fuerza—Si, lo es— Yoongi no sabia de donde había sacado el valor, sin embargo supo que no cometió un error a decirlo ya que de pronto sintió los brazos de su mayor tomarlo con cariño.

—Estoy tan orgulloso de que finalmente estés viviendo tu vida, siendo honesto contigo mismo, mi Yoon—hablo apretando a su hermano con fuerza, lo soltó lentamente y después se alejo comenzando a caminar hacia su hogar—No tienes mal gusto eh—bromeo logrando una mala mirada del pelinegro— camina Min Yoongi.

—Ya voy... ¡Oye que quieres decir con que no tengo mal gusto!— grito apresurando el paso.

—Tranquilo tigre, no soy gay, a menos que...

—Min Jihoon, ¿quieres morir?— amenazo el mas joven caminando junto a su hermano.

—No, no, ah no soy una gata rompe hogares, ya que si el tiene una hermana...

—¡Hyung por dios!—las risas de Jihoon se hicieron sonoras tomo el brazo de su hermano y sonrió con orgullo.

Hoseok caminaba rumbo a su hogar por aquella raya blanca, no tenia idea a donde lo podría llevar en el futuro, pero si de algo estaba seguro, era de que mientras el y min Yoongi estuvieran juntos, todo estaría bien, ¿verdad?

ᴇʟ ᴀᴍᴏʀ ᴇɴ ᴜɴᴀ ʟÍɴᴇᴀ⁀➴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora