Capitulo 2

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-Bueno, pues si está decidido nosotros nos vamos, Kiki tú te quedas que tenéis mucho de lo que hablar – les dijo mientras empujaba a su novio y la prima de su amiga en dirección a la puerta

-Pero mi comida... - se quejó Alex intentando oponer resistencia

-Ya pillamos algo en el bar, así nuestra nueva parejita tiene algo para picar, nos vemos mis niñas - dijo Denna antes de cerrar la puerta lanzándole un guiño a su amiga el cual no pasó desapercibido por la morena la cual sonrió ante el gesto

-Quita esa cara de idiota, lo que sea que estas planeando déjalo, esto tiene que salir bien Oliver – le acuso Violeta

-No estoy planeando nada, es más creo que tendrías que estar agradecida, te acabo de salvar el culo – contrarresto la menorquina

-Vamos seguro que lo estas disfrutando, tienes dos semanas para torturarme – se regodeo Violeta sin aceptar que su enemiga tenía razón

De no ser por ella, las cosas estarían muy jodidas. Pero no se lo iba a admitir, no le iba a dar el gusto.

-Dos semanas, he enamorado a chicas en mucho menos tiempo, igual no te aguanto tanto – le pico la morena

-Ja que graciosa, pues si tanto te voy a aburrir porque no te vas con un de tus muchas conquistas, total no soy tu tipo – le respondio aun con orgullo

Por mucho que no quisiera ni verla, necesitaba que se quedara su cabeza lo sabia, pero cada vez que la chica le decia algo no podia pensar en sus palabras. Siempre conseguia sacarla de sus casillas.

-Es verdad, definitivamente no eres mi tipo, pero como soy una buena persona voy a ayudar a un caso de caridad como tu – le respondio para luego darle un toque en la nariz

Decidió ignorar el gesto por mucho que quisiera matarla porque seamos sinceros. Gracias a dios que no se había rajado, ahora lo malo seria tener que soportarla todo el viaje, con suerte, una vez en Granada podría centrarse en su hermana y su familia, y así intentar ignorar la presencia de la chica.

-Bueno, entonces ¿comemos? Porque no puedo ponerme a pensar en nuestra horrible historia de amor con el estómago vacio – dijo Chiara mientras se acercaba a la olla de comida

-Largo, mañana nos vemos en el aeropuerto y ya esta, te enviare la hora y el billete en un rato – le respondio Violeta intentando que su tortura acabara lo antes posible

La inglesa decidio ignorarla, lo cual como no, molesto a la periodista, en su caso empezo a sacar dos platos del estante de arriba de la cocina de la pelirroja y una vez llenos se sento en el sofa junto a la mayor.

-Tenemos que inventar una historia creíble - finalizo

-Claro que no, podemos improvisar, no eres artista, seguro que se te da bien – sugirió sarcásticamente Violeta cogiendo el plato que la morena había puesto a su alcance con mala gana

No le iba a dar las gracias. Chiara no se molestó, de hecho, le hizo gracia la forma en que la pelirroja era completamente inmune a sus encantos o a su opinión.

-No me extraña que no hayas encontrado novia, eres mala – le dijo haciéndole un puchero y poniendo los pies en la mesa del salón

-Tu como en tu casa – le soltó Violeta sin poder creer la poca educación que tenía esa sinvergüenza

-Ya lo se amorcito – le respondió picándola

-Como me vuelvas a llamar así te mato Oliver – le amenazo la pelirroja

-Para empezar, estaría bien que me llamaras por mi nombre, no mi apellido, incluso con un apodo como churri o bebe – siguió ignorando las quejas de la pelirroja

Casual (Kivi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora