Una hora después las cuatro chicas acabaron su travesía en su Ikea de confianza. Como suponían, una vez reunieron lo básico para su piso, el cansancio se había apoderado de sus cuerpos. Por ello Chiara y Ruslana habían decidido darles una sorpresa a sus chicas antes de acabar el día.
-Amor cuanto falta? - pregunto Violeta queriendo llegar a su casa
-Poco – contesto la inglesa intentando disimular su plan
-Y seguro que es por aquí? - pregunto Nerea al ver que no le sonaba el camino
-Si, es un atajo confiar en la kikineta – soltó Ruslana apoyando a la inglesa
Unos quince minutos después las chicas llegaron a su destino.
-Donde estamos? - pregunto Nerea al ver que no se encontraban cerca de su casa
-Bueno habíamos pensado que seria guay ver el amanecer las cuatro, y tenemos comida y mantas en el maletero – explico Chiara
-Cita doble sorpresa – solto Ruslana
-Pero como vas a ser tan mona – hablo Nerea abrazando a su chica
-Te gusta? - pregunto tímida Chiara mientras veía como la pelirroja admiraba el paisaje con una sonrisa
-Me encanta, vamos – contesto para después agarrar la mano de la inglesa y instalarse en el césped juntas con ilusión
Las chicas se instalaron encima de la manta y comenzaron a comer y charlar sobre cualquier cosa. El tiempo paso muy rápido, la incorporación de Nerea había sido un golpe de aire fresco y parecía que se conocían de toda la vida.
-Un momento, ¿eso es lo que creo que es? - soltó Ruslana separándose de su novia para ver mejor
-Pero de donde han salido esas vacas? - pregunto Kiki al ver como los animales se multiplicaban delante de ellas
-No lo sé, pero yo quiero una foto – pidió Nerea mientras arrastraba a Ruslana con ella
Chiara y Violeta decidieron quedarse un rato más en el césped, aun querían aprovechar la cercanía de la otra. Y habrían seguido así, pero la inglesa noto como la pelirroja se movía tratando de buscar más calor.
-Tienes frio? - se preocupó la inglesa
-Un poco
-Espera, te dejo mi sudadera – le ofreció la morena
-No entonces tu tendrás frio – se quejó la pelirroja aun así conmovida por el gesto de la chica
-Yo soy inglesa, no siento el frio, además si nos levantamos y hacemos el idiota con estas seguro que se nos va el frio – soltó la inglesa abrazando a la pelirroja con intención de arrastrarla con ella
-Se me ocurren otras formas de no tener frio – soltó Violeta para después dejar un beso muy cerca de los labios de la morena
Antes de que Chiara pudiera responderle la chica se levantó y fue hacia donde se encontraban Ruslana y Nerea.
Esta mujer va a acabar conmigo.
Despues de una sesión de fotos express, las chicas acabaron agotadas. Poco después las chicas ya habían acabado con la comida y se encontraban viendo como el sol desaparecía de sus vistas.
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Casual (Kivi)
أدب الهواةVioleta Hódar 23 años (Granada, Motril), es una estudiante en último curso de periodismo en Barcelona. Esta se ve envuelta en una encrucijada cuando es invitada a Motril para la boda de su hermana. Al llamarla su madre insiste en saber si vendrá con...