Casual (Kivi)

Capitulo 18

Esas palabras sirvieron para dejar a Chiara sin habla.

¿Qué se respondía cuando alguien te decía algo así?

Estaba claro que la Chiara del pasado no habría dudado en reaccionar y seguir las ordenes de cualquier mujer que le dijera esas palabras con tal convicción.

El problema era que Violeta no era cualquier mujer.

Y llevaba todo el día intentando evitarlo, intentando ignorar todo lo que sentía por ella. Y lo estaba logrando.

Hasta ahora.

Porque después de las palabras de Violeta ambas seguían cerca debido al abrazo en habían estado varios minutos, sin separarse ni un milímetro. La pelirroja la miraba con intensidad, intercalando su mirada de sus ojos a sus labios.

Y eso la estaba volviendo loca.

Sentía el aliento la chica cada vez más cerca, y sabía que se tenía que apartar. Pero no podía.

Estaba cansada de luchar.

Necesitaba hacerlo, necesitaba besarla, aunque fuera solo una vez.

El problema era que, si lo hacía, no estaba segura de sí podría parar.

Despues de varios minutos de tensión entre las dos, Chiara acabo cortando la distancia, y apoyo su frente en la de Violeta.

- ¿Estás segura? - le pregunto la inglesa susurrando

-Nunca lo he estado tanto – le contesto la pelirroja acercándose a los labios de la inglesa para acabar con la distancia que estaba matando a ambas

-Aquí estas! - oyeron a Tana gritar saliendo de la discoteca junto con Dani

-Igual deberíamos dejarlas solas amor, ya sabemos que están bien – intento convencerla su prometido al ver la cara de frustración de la pelirroja

- ¡Uy perdón por joderos el polvo, pero Violeta como te vuelvas a escapar sola de noche te mato! ¿me oyes? - le recrimino su hermana preocupada

-No te preocupes, ya le he echado la bronca yo – le dijo Chiara poniendo un poco de distancia a nuestros cuerpos

¿Por qué se separa?

-Pues sigue así, yo soy tu y la mandaba hoy al sofá por tonta – le soltó su hermana haciendo reír a la inglesa y a su prometido

-Venga, llevaros el coche si queréis, ha sido una noche larga las dos – les dijo Dani ofreciéndoles las llaves de su coche

-Seguro? ¿Y vosotros? - pregunto la inglesa dudosa

No sabía si era la mejor idea quedarse sola de nuevo con la pelirroja.