Cap 3.- A solas

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Habían pasado dos semanas ya, la universidad ya había comenzado y yo estaba hasta arriba de proyectos, tenía que aprenderme 50.000 leyes (igual no eran tantas, pero a mi se me hacían un mundo) y no me daba la cabeza para tanto, ¿para qué hacen falta tantas leyes si la mayoría de la gente no les hace ni caso? 

En cuanto a Alex y Rai las cosas se habían calmado un poco, Alex apenas pasaba por casa, nos habíamos enterado de que había conocido a un chico nuevo, quizás quieran empezar algo serio, también tenía que trabajar y estudiar a la vez, por lo que su tiempo era bastante limitado, llegaba a casa para cenar algo y dormir. Rai por su parte se dedicaba a los streams a full, cuando no estaba en directo grababa cosas para subirlo a su tiktok, el estar todos los días haciendo stream hizo que sus seguidores subiesen enseguida. Una noche me metí por cotillear a su canal y la verdad es que genera un contenido bastante entretenido, además su comunidad es muy agradable.

Estaba en el salón haciendo un esquema para un proyecto que tenía que entregar cuando entró Rai por la puerta cargada de bolsas, al verla fui a ayudarla.

-Dame anda, que te ayudo- dije quitándole una bolsa de su mano, sin querer nuestras manos rozaron, mi piel se erizó y un escalofrío recorrió todo mi cuerpo. ¿Qué me pasa?

Dejé la bolsa en la cocina y decidí no comentar nada. Seguí con mi proyecto, ella se veía concentrada ordenando todo en la cocina. Después de un buen rato apareció con un bol lleno de patatas.

-Toma, tanto estudiar te va a dejar el cerebro frito, a y gracias por la ayuda- dijo sentándose a mi lado. 

-Gracias, necesito acabar este proyecto, pasado mañana lo tengo que entregar y no tengo ni la primera página....-dije poniendo mis manos en la cabeza- pensaba que estudiar sería más fácil, pero...se me hace muy cuesta arriba.

-Por mucho que te sientes delante de la hoja en blanco no vas a escribir nada, puedes estar 10 horas si quieres o puedes tomarte un descanso y verás como te viene la inspiración. 

-Pffff que estrés

-Anda ven, siéntate conmigo en el sofá, veamos una peli- dijo haciéndome un puchero 

-Bueno, por ver una película no pasará nada- dije mientras me sentaba a su lado, estábamos en septiembre pero hacía un frío que no era normal, por lo que nos acurrucamos- oye y de Alex sabes algo?- Pregunté mientras ella se encargaba de poner la película.

-Ni idea, me dijo que tenía que trabajar hasta tarde, imagino que luego se irá a casa de su nuevo novio, al menos alguien coge en esta casa.....

Me quedé sin saber que decir, ellos todavía no saben que yo con 21 sigo siendo virgen, aunque se lo diga, tampoco creo que me crean. 

Rai puso una película de los Transformers, al principio nos parecía interesante, pero a mitad de la película Rai comenzó a aburrirse. Puso su mano en mi pierna, creo que sin querer, mi cuerpo se tensó ante su contacto, cosa que ella notó.

Rai volteó sus ojos para mirarme, tenía un brillo especial en su mirada.

-Alo- dijo en un susurro

-Mmmm?- dije haciéndome que prestaba atención a la película.

-Me aburro- dijo susurrándome al oído

-Pero la película está bien.....-dije intentando que se calmase un poco, su mano seguía en mi pierna y la iba moviendo acariciándome. 

-Pero si no la estás viendo- dijo con una sonrisa burlona en la cara- es que....cuando me aburro....intento entretenerme....

-Rai para- dije intentando no desmayarme, su mano seguía acariciándome, cada vez se acercaba más a mi centro, parecía que quería provocarme y que disfrutaba haciéndolo. 

-¿Por qué? ¿Te molesta?- dijo en un suspiro

-No...si yo no siento nada....

-¿Cómo así? ¿No sientes nada?- dijo algo sorprendida- bien, veamos pues

De un salto se colocó encima mío, la miré sorprendida y ella comenzó a mover sus caderas encima mío, nuestros centros estaban juntos y ante su roce comencé a jadear, esos movimientos provocaban demasiadas cosas en mí.

-Ra.....rai....para.....por...por favor....- dije de manera entrecortada.

-¿No decías que no sentías nada?- dijo mientras seguía con un movimiento leve

-PARA- dije en un intento desesperado de no abalanzarme sobre ella y comerle la boca

Rai no me hizo caso y siguió con sus movimientos, mi piel estaba erizada y estaba sudando de la excitación, no aguantaba más, pero ¿yo no era hetero? Bueno las preguntas para otro día, no aguantaba más, subí mis manos hasta la cara de Rai e hice que me mirase

-Hola- dijo ella mostrando su amplia sonrisa, esa sonrisa que me volvía loca.

No la deje decir nada más porque uní nuestros labios, sus labios eran carnosos y suaves, nuestras bocas bailaban al ritmo que nuestros corazones palpitaban, ella seguía con sus movimientos de cadera, aunque ahora sus manos estaban en mi cabeza, me atraía hacia ella para profundizar el beso. 

Paramos un momento para tomar aire y en ese momento fui consciente de lo que estaba haciendo, me entró el pánico, no podía creer lo que estaba haciendo, si mis padres se enteran me van a matar, les acabó de fallar, he caído en el pecado que tanto me advirtieron que se encontraba en la capital. 

Mi cara se tuvo que poner blanca porque Rai se había asustado, me vio como disociaba y se bajó, yo seguía sin decir nada y estaba mirando la televisión, buscando en ella la respuesta a todas las preguntas que se cruzaban por mi cabeza. 

-Alo....alo....¿estás bien?....dime algo....-dijo Rai preocupada.

Me marché a mi habitación, no podía creerme todo lo que me estaba pasando, yo debía estar acabando un proyecto, no besándome con mi compañera de piso. Además yo soy hetero, que hago besándome con una chica, pero no es una chica cualquiera, es Rai, ¿Quién le negaría un beso a Rai? Cerré la puerta con llave y solo pude escuchar como Rai intentaba entrar y al ver que yo no contestaba desistió y se marchó a su habitación. Puñeta no quiero hacerla sufrir, pero yo no puedo gestionar estas cosas como ella. 

Compañeras de piso - RAILODonde viven las historias. Descúbrelo ahora