Compañeras de piso - RAILO

Cap 4.- Hablemos

Había pasado una semana desde nuestro beso, nos evitábamos mutuamente, yo porque no quería afrontar que llegué a sentir algo por Rai, y ella creo que me evitaba porque no tenía el valor suficiente para plantarme cara, o eso creía yo. 

Hoy estaba estresada sin encontrar nada de lo que buscaba, iba deambulando por la casa histérica, había dejado mi proyecto en la mesa del salón y ahora no lo encontraba, no sabía donde podía estar, y me daba miedo que la señora que viene a limpiarnos la casa lo hubiese tirado a la basura. Estaba rebuscando entre los cojines del sofá cuando Alex entró por la puerta

-¿Qué puñeta pasó aquí Alo? ¿Entraron a robar?- dijo algo asustado al ver el desastre que tenía montado

-No, algo peor, perdí mi proyecto, anoche me quedé hasta las 3 de la madrugada para acabarlo y no consigo encontrarlo, debo entregarlo antes de las 3 de la tarde o reprobaré la materia.

-¿Y no te acuerdas donde lo dejaste?

-Aquí Alex, aquí tendría que estar, pero no está puñeta- dije resoplando, estaba al borde del colapso y lo único que quería hacer era estamparle un cojín a Alex en la cabeza, para ver si me tranquilizaba. 

-Bueno, solo no se ha podido ir, digo, tendrá que estar por acá, dejame ayudarte.  

Alex y yo nos pusimos a buscar el proyecto y nada, no encontramos nada, me fui a mi habitación a ver si me lo había llevado sin darme cuenta y tampoco había nada, joder. Miré en todas las papeleras de la casa y tampoco había nada. Miré el reloj 12.30, el tiempo se acaba.

-Alo, ¿y no tienes una copia en el ordenador? lo volvemos a imprimir y listo- dijo Alex intentando encontrar una solución. 

-No tengo tiempo, tengo que ir hasta el centro para eso y me cuesta 30 minutos de ir y otros 30 de volver. Y en la universidad no imprimen nada para los alumnos hasta las 4 de la tarde. Voy a suspender esa materia- dije sentándome en el sofá y tapando mi cara con mis manos. 

-A ya sé, Rai creo que tenía una impresora en su habitación, ¿por qué no le preguntamos?

-NOOOO!!!, digo, no- dije abriendo mis ojos como si hubiese visto un fantasma

-¿Estáis bien?-

-Sí, o no, digo qué? No se como estamos Alex, solo sé que tendría que estar entregando un proyecto-

Mientras yo seguía lamentándome en el salón Alex llamó a la habitación de Rai, pero no hubo respuesta. La llamó por teléfono y sonó dentro de la habitación.

-RAI PUÑETA ABRE LA PUERTA QUE SOY ALEX- dijo Alex gritando al otro lado de la puerta.

Se escuchó como Rai se arrastraba desde la cama hasta la puerta y quitaba la llave, nos abrió y le pude ver unas ojeras enormes, incluso diría que está más delgada, ¿Qué le pasaba?

-¿Qué carajo quieres Alex? Estaba durmiendo- dijo Rai sin apenas ánimo. 

-¿Sigues teniendo la impresora? Alo necesita imprimir su proyecto, el anterior lo ha perdido y lo tiene que entregar a las 3 y ya es la 1 de la tarde. 

Rai se quedó pensativa un momento, después se volvió a meter en su habitación, tardó unos 10 minutos en salir y me entregó una carpeta.

-¿Qué es esto?- dije mirándola por primera vez a la cara. 

-Tu proyecto, lo guardé ayer porque te dejaste la ventana abierta y me daba miedo que se te perdieran las hojas, intenté dejártelo en la habitación pero la tenías cerrada con llave, así que la guardé en la mía. 

-Gra....gracias...- dije emocionada, aún estaba a tiempo de aprobar la materia, agarré el proyecto, le di un beso a Rai en la mejilla de la emoción y salí corriendo hacía la universidad deseando que el profesor se encontrase todavía allí. 

*NARRA RAI*

-¿Y a ti que carajo te pasa?- dijo Alex mirándome de arriba a abajo

-NADA- dije sin mirarle, intenté entrar en la habitación pero Alex me seguía. 

-A ver puñeta, sales de la habitación como una muerta y Alo te da un beso en la mejilla y parece que resucitas?.....AAAAAAA.....A TI TE GUSTA ALO, COÑO- dijo dando saltos 

-SHHHHHH, a ver si te va a oír- dije intentando parar su ataque de hiperactividad. 

-Desde la universidad me va a oír o que? 

Le ordené que se siente para contarle todo lo que había pasado en su ausencia.

-A ver, mientras tu estabas cogiendo con ese novio tuyo, aquí pasaron cosas- Alex me miró sorprendido, quiso decir algo pero le interrumpí- Hace una semana Alo y yo nos besamos. 

-QUEÉEEEEEEEEEEEEEEE- dijo Alex claramente sorprendido- pero si Alo es hetero

-Pues para ser hetero me metió la lengua hasta la campanilla- dije con una sonrisa al recordar ese beso.

-Explícate

-Pues eso Alex, que nos besamos, estábamos viendo una película pero me aburría, entonces quise provocarla un poco, ya sabes que me gusta jugar- dije de manera pícara. 

-Ajam

-Puse mi mano en su pierna, y la acariciaba lentamente, noté como se tensó y probé a tensar la cuerda un poco más, me subí encima suyo y comencé a mover mis caderas contra su centro, y me pidió que parase porque ella no sentía nada, como no la creí seguí y ella me besó. 

-Y?.... ¿No lo habréis hecho en el sofá, pedazo de cerdas?

-¿QUÉ DICES? NO. Después del beso Alo se agobió y se marchó a su habitación, intenté hablar con ella, pero lleva una semana que me evita, cada vez que aparezco en la cocina sale corriendo. Por eso ya no salgo de la habitación, estoy sobreviviendo con lo que tengo en esta mini-nevera- dije señalando una nevera que tengo en la habitación- y salgo para ducharme a las 4 de la madrugada, así sé que no coincidiré con Alo. 

Suspiré y me tumbé en la cama, estaba agotada, no conseguía dormir, cada vez que cerraba los ojos me imaginaba la figura de Alo, sus ojos penetrándome con la mirada, sus labios....esos labios carnosos y suaves que encajaban a la perfección con los míos....

Estuvimos un rato en silencio hasta que Alex habló 

-¿Y si todo esto es nuevo para ella?

-¿Qué dices Alex? Ese beso me demostró que tenía experiencia, nadie mete la lengua de esa manera en su primer beso. 

-Coño no digo eso

-¿Entonces que carajo dices? Habla claro

-Puede que sea la primera vez que bese a una mujer, cuando yo le dije que era gay me dijo que nunca había conocido un gay. No sabemos nada de su familia, quizás no sean tan liberales como tus padres, te recuerdo que los míos me echaron de casa aún siendo menor por ser gay.....no todos tenemos esa suerte Rai- dijo suspirando

-Ya, y ¿Cómo hablo con ella si me evita? Cada vez que oye la puerta de mi habitación corre como si viese un alíen. 

-Se me ha ocurrido algo, ahora vengo.

Alex se marchó corriendo de mi habitación, a saber que carajo se le ocurrió ahora a este hombre.