Cap 16.- FINAL

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*Narra Rai*

Estaba mordiéndome las uñas sin saber que hacer hasta que Eric volviese, la espera me estaba consumiendo. Por fin escuché la puerta abrirse, de un salto alcancé a Eric.

-¿La has visto?¿Cómo está?¿Te ha dicho algo?¿Ha leído la carta?-

-Ey nena, frena- dijo Alex obligándome a sentarme 

-ERIC HABLA CARAJO O TE ARRANCO LA LENGUA- grité histérica 

-Me dio esto, no nos dio tiempo a hablar porque volvieron sus padres. 

Agarré la carta y la leí, BIEN BIEN BIEN, no estaba todo perdido, Alo me seguía amando, el plan tenía que seguir adelante, estaba decidido, nos marchamos a Argentina, a ver si ahí conseguimos ser felices. 

-Alex, Eric, vamos con el plan.

Pasó un mes, teníamos todo preparado ya, los billetes, el apartamento donde nos íbamos a alojar en Argentina, un coche potente para huir de la boda, mi plan era presentarme en la boda antes de que Alo se casase, crear una distracción y que Alo huyese conmigo, olvidándonos de todo lo sufrido y siendo felices por fin. 

Me subí al coche con Eric y Alex, no tenía vidas suficientes para agradecerles a estos dos lo que estaban haciendo por mi. 

*NARRA ALO*

Llegó el día de mi boda, y Rai no había dado señales de vida.....quizás se lo ha pensado mejor y no quiere arriesgarse. Me vestí para la boda y mis padres me metieron en un coche, se colocaron uno a cada lado, evitando así que pudiese salir corriendo, mierda, adiós plan. 

Estábamos a punto de comprometernos y yo no paraba de mirar a la puerta, esperando que entrase el verdadero amor de mi vida gritando a todos que la boda se tiene que cancelar. El cura llevaba rato hablando pero mi cabeza estaba en otra parte, concretamente en el piso de San Juan, aquel lugar donde fui tan feliz. 

-Bien, antes de pasar a compartir los votos, ¿alguien se opone a esta boda? Que hable ahora o calle para siempre- dijo el cura.

-CANCELEN ESTA BODA, ALONDRA NO SE PUEDE CASAR, NO CON ESE SEÑOR- dijo Rai gritando, ahí estaba el amor de mi vida, salvándome tal y como me prometió. 

Rai corrió hasta el altar y me plantó un beso en toda la boca, respondí con cariño a sus besos, los anhelaba, eran mi manera de vivir y ahí estaba ella resucitándome otra vez. De fondo escuché como todo el mundo comenzaba a murmurar y todas las señoras mayores se santiguaban al mismo tiempo que se sorprendían. 

Pegué mi frente a la de Rai, -te amo- le susurré mientras le cogía la mano. Rai me indicó que saliésemos corriendo, salimos corriendo de la iglesia, pero cuando estábamos a punto de subir al coche se escuchó un sonido sordo, mis oídos comenzaron a pitar, todo el mundo salía corriendo y yo miraba a mi alrededor sin saber que estaba pasando, vi a Alex y a Eric echarse las manos a la cabeza y venir corriendo hacia nosotros, entonces miré a Rai, estaba en el suelo con una gran macha de sangre, había recibido un disparo.

-NOOOOOOOOOOOOOOOOOOO- grité- Rai mi amor, mírame- dije llorando mientras agarraba con cuidado la cara de Rai

-Alo.......-dijo con cierta dificultad, el disparo le había alcanzado el pecho, sus pulmones deberían estar encharcándose de sangre. 

-No hables mi amor, yo te cuidaré- dije mientras le llenaba la cara de besos 

-Te amo Alo- dijo Rai en su último suspiro, noté como su cuerpo se iba relajando y su pecho dejaba de respirar, miré furiosa hacia el lugar donde provenía el disparo

-TÚ, TÚ ERES UN PUTO ASESINO- dije amenazando a mi padre

-TE DIJE QUE TE CASARÍAS, POR LAS BUENAS O POR LAS MALAS, TÚ HAS QUERIDO QUE ESTO OCURRA, SI TE HUBIESES CASADO EN SU TIEMPO HABRÍAMOS EVITADO LA MUERTE DE ESTA NIÑA DESCARRIADA- dijo mi padre escupiendo al cuerpo de Rai

La ira comenzó a circular por cada poro de mi cuerpo, mi propio padre había matado al amor de mi vida, no podía marcharme así y dejarla ahí tirada, mi padre me seguía gritando que entrase a la iglesia a terminar con lo que había empezado. Le solté un puñetazo y fui a abrazar a Rai, me negaba a separarme de ella.

Alex y Eric tiraban de mí para marcharnos, mi padre estaba furioso y seguía con el arma en la mano, después del puñetazo que le propiné se volvió loco. 

-ALEX HUID, YO YA NO PUEDO IRME A NINGÚN LADO, NO SIN ELLA- dije sollozando 

Alex se negaba pero Eric consiguió tirar de él, espero que al menos ellos puedan vivir su historia de amor felices, no  como Rai y yo.

-LO HAS CONSEGUIDO, NOS HAS SEPARADO PARA SIEMPRE- le grité a mi padre

-TE DIJE QUE PREFERÍA A UNA HIJA MUERTA ANTES QUE DESVIADA- gritaba furioso mi padre, sus ojos lanzaban chispas. 

-PUES MÁTAME PORQUE NO PIENSO VOLVER A ENTRAR EN ESA IGLESIA, LA ÚNICA PERSONA CON LA QUE ME IBA A CASAR ESTÁ MUERTA POR TU PUTA CULPA- dije mientras otro sonido hueco sonó, un calor intenso comenzó a recorrer todo mi cuerpo, miré hacía mi abdomen, mi propio padre había sido capaz de matarme con tal de no casarme con la persona que yo amaba. 

Caí de rodillas, comencé a escupir sangre, mi madre vino corriendo y vio toda la escena, comenzó a gritarle a mi padre y a desmayarse al verme con un disparo. Miré a Rai

-Te amor Rai- dije sintiendo que eran mis últimas palabras y agarrando la mano fría de Rai.

Caí completamente al suelo, finalmente Rai y yo si que íbamos a estar juntas, aunque sea en otra vida, nuestros cuerpos descansarían siempre juntos porque ambas morimos en el mismo sitio. Ahora podremos ser compañeras de piso y de vida durante la eternidad.  

FIN 

Tenía ganas de buscarle un final, no quería hacer el típico final feliz que encuentro en la mayoría de los fanfics, espero que os haya gustado. 

Quiero daros las gracias a tod@s los que habéis leído la historia, siento si ha habido algún error, es mi primera vez escribiendo fanfics y todo me resulta bastante nuevo. 


Compañeras de piso - RAILODonde viven las historias. Descúbrelo ahora