Los amigos se reencuentran y otros se despiden

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Los gemelos continuaron caminando por un largo y estrecho pasillo, hasta que llegaron a una sala, en medio se encontraba aquella torre, rodeada de un tornado que generaba fuertes y cortantes ráfagas de viento.



-"bien, hermano"-. El mayor extendió su mano, la cual fue tomada con gusto por su gemelo pequeño.



-"vamos"-. Los dos ingresaron sin miedo a aquel tornado.



Juntos, el escudo en su corazón se volvía más fuerte. Eran empujados por las ráfagas, a paso lento avanzaban..


Repentinamente, una fuerte ráfaga, como cuchilla, estrelló en aquel escudo, luego otra y otra... Hasta que la defensa empezó a generar grietas.



-"¡cuidado! ¡Humanos débiles!"-. Un pequeño dragón oscuro saltó hacia ellos. Sin embargo, quedó atónito por la determinante resistencia de los gemelos, no solo lograron resistir las frecuentes olas de viento, sino que, al notar a aquel pequeño, incrementaron la radio del escudo para protegerlo.



-"¿¡De verdad nos seguiste hasta aquí!?"-. Resopló el menor.



-"maldición, tendrás que avanzar con nosotros, no hay vuelta atrás"-. Sentenció el mayor. -"estamos cerca, solo cinco pasos más"-.



Los gemelos, a ritmo lento, continuaron su andar. El dragoncito no podía creer el coraje de esos dos humanos, a pesar de ser tan frágiles, en especial el menor.



Mientras caminaban, se escuchaban ruidos, sonidos... Una voz, era de un anciano, lamentos. <<"Fue mi culpa, mis amigos... Les fallé">>.


Solo faltaban dos pasos y la voz se escuchaba más fuerte.



<<"¡MI PODER ES UNA MALDICIÓN"!>>.



Cuando llegaron al centro, el tornado se disipó. Al no ver más amenazas, desactivaron el escudo.



-"demonios, hasta preferiría ser degustador de comida"-. Bromeó el mayor.



-"ni que lo digas, no soporto su lloros"-.



<<"Siento envidia por su actitud atrevida... Me recuerdan a mi hermana">>.



-"ya no lloras... ¿Sabes si el poder se divide para los dos?"-. Preguntó Caleb.



<<"Lo más seguro es que si, si ambos tienen el poder familiar..">>.



-"bien"-.



<<"Solo derriben mi torre">>.



Ambos gemelos tocaron la roca superior. Finalmente, habían superado la prueba, y estaban ahí para reclamar el premio. Cómo dice la leyenda, solo aquel hombre que cumpla su sueño puede derribar su torre. Aun no cumplieron su sueño de ser unos holgazanes, pero sin duda, este fue un paso más.

gemelos basura de la familia del CondeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora