The summer of love

6.

Buenasss, os traigo un capítulo algo más corto de lo habitual, pero aún así muy interesante, espero que lo disfrutéis!!

Sarah

Es el día de navidad, abrimos los regalos por la mañana, desayunamos tortitas con forma de El Grinch que nos hace mi padre todos los años y tenemos el típico almuerzo familiar.
Soy muy feliz porque para mi esto es la navidad, pasar tiempo con los tuyos, ver a esos familiares que no ves en otras épocas del año, los villancicos, las películas románticas tontas de la tele que son todas iguales pero que aún así me encantan, la ilusión de los niños pequeños y las sonrisas permanentes en las caras de mis seres queridos.

Es media tarde cuando me llega un mensaje al móvil.

Noah <3: ¿Estás libre?

Si, nos conocemos desde hace no mucho, pero le he cogido cariño y ya le tengo puesto un corazón, cosa que no mucha gente puede decir.

Yo: Si, acaba de terminar el almuerzo familiar y ahora no tengo nada que hacer.

Noah <3: Genial!! ¿Quedamos y damos un paseo por la orilla?

Sonrio como una tonta al móvil y le respondo.

Yo: Claro!

Me visto rápidamente con unos shorts y un top azul cian, mis converse azul pastel y salgo en dirección a la playa.

Llego y lo busco con la mirada, lo encuentro al par de segundos, va vestido con unas bermudas azul marino y una camiseta blanca, se encuentra en la orilla y está mirando el mar. Me acerco por detrás y le tapo los ojos con mis manos.

-Quién soy? -pregunto con un intento de voz masculina honestamente no muy lograda, pero no admitiré eso en voz alta.

-Ethan, por supuesto. -Me quedo extrañada, hasta que veo que empieza a reírse y se da la vuelta, será capullo.

-Déjame decirte que se me da estupendamente imitar voces- respondo con fingida indignación.

-En ningún momento he dicho lo contrario-responde, pero por su cara se que lo piensa-. Venga no te enfades conmigo, ven, dame un abrazo. -Me rodea con los brazos y al oler su maravilloso perfume olvido siquiera porque estaba enfadada.

-¿Paseamos? -me pregunta al ver que sigo pasmada por su abrazo, me sonrojo y asiento con la cabeza. Si me quedo así solo con un abrazo suyo, no se cómo me quedaré si me besa, pienso en como seria si me besara, seguramente dulce, arrollador y especial, como es él. Niego con la cabeza para sacarme de mis pensamientos, a penas lo conozco.

-¿Qué pasa? -pregunta con cierta preocupación-. Te noto muy callada y algo extraña hoy.

-Solo estaba pensando en que sabemos muy pocas cosas el uno del otro, digo, podrías ser un secuestrador y yo como una mosca en una telaraña estoy aquí paseando a solas contigo.

-Primero, creo que sí fuera un secuestrador ya hubiera tenido tiempo de sobra para secuestrarte, además Alex y mis primos vendrían a por mí así que no renta- me río ante su razonamiento- y segundo, lo de conocernos poco tiene fácil solución.

-¿Estás sugiriendo que te puedo preguntar lo que quiera con tal de conocerte?

-Exacto, adelante.

-Bien pues... -me estrujo el cerebro pensando en algo-. ¿Color favorito?

-Eso es fácil, el naranja.

Pongo una mueca extraña al imaginarme el color naranja chillón como su color favorito, en fin, para gustos colores, ¿no?