¡Hola! Soy West/Westy
Traigo algunas historias cortas con algunos personajes de el anime Kuroko No Basket
¡Espero que lo disfrutes!
Mis portadas son un asco, pero las historias valen la pena, lo juro 😭
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—Al menos podrías...
Me incliné sobre la mesa de aquel restaurante de comida rápida hasta que pude tocar su mejilla con mi pulgar para limpiarle la mancha de catsup que tenía en las comisuras de sus labios
—Listo—dije separándome de él para tomar una servilleta y limpiarme el dedo—A veces comes igual que un niño de seis años, Kags
Al levantar la mirada, lo pude ver mirándome con los ojos abiertos y un sonrojo que iba desde sus mejillas hasta sus orejas
—Uh... ¿estás bien?—ladeé la cabeza
Él carraspeó y le dio otra mordida a su hamburguesa para después asentir silenciosamente
A mi me pareció un poco extraño, pero lo dejé pasar
De todos modos a pesar de ser su mejor amiga aún no entendía del todo algunas actitudes que podía llegar a tener este chico
—Entonces, hoy tienes partido—puntualicé antes de meterme una papa frita a la boca—¿Que tal? ¿Listo para ganar?—sonreí moviendo mis cejas de arriba a abajo
—Claro que si, hemos entrenado muy duro todo el verano para ganarle a Tuouo. Kuroko dice que lo más probable es que Aomine y sus compañeros estén más desarrollados físicamente también—suspiró dándole un sorbo a su soda de cola
—Han trabajado mucho, en verdad espero que ganen—sonreí dándole un pulgar arriba—Sabes que me gusta ir a tus partidos, pero...
—Es muy lejos y acabará muy tarde. Aunque quisieras ir no te dejaría—negó rotundamente, masticando la siguiente hamburguesa que había destapado—No me gusta la idea de que andes sola por la noche
—Como si tuviera diez años, Kagami—rodeé los ojos
—Físicamente te ves de doce
Yo lo miré indignada y el solamente soltó una carcajada por lograr su cometido
Él adoraba molestarme. Y esa no era una conclusión mía; él mismo lo decía constantemente
Nuestra comida continuó amena, él me contaba sobre su equipo y su mejor amigo de cabello azul, su perro insufrible que más bien a mi me parecía adorable por las fotos que me enseñó como referencia y también me contó lo que habían hecho durante el verano, subir montañas, entrenar en la playa, correr como locos e ir a un sauna para relajarse el día anterior al primer partido
