Antes de dormir había puesto la alarma ya que el turno que nos tocaba en la tarde era deporte. Algo que detestaba pero era algo que influía en el índice académico así que a darle.
Me levanté de la cama suavemente para no despertar a Ronni ya que estaba en un profundo sueño. Camine hacia el baño y me di una rápida ducha y me puse unos legins negros y un top a juego, algo que para mí era bastante deportivo y me gustaba ya que hacía resaltar mucho más mis glúteos y quedaba lo suficiente ajustado para también resaltar mis caderas y por otra parte el top hacia que mis pechos no muy grandes la verdad se apretaran y se vieran bastante notorios, me hice una coleta alta y ya estaba lista para ir al terreno. Me pase unos 15 minutos mirándome en el espejo hasta que Ronni entró por la puerta. Me miro de arriba a abajo como si nunca hubiese visto cosa igual.
–¿Piensas ir así?–dijo eso con un tono agudo apuntándome con el dedo índice.
–¿Por qué no? esto es bastante deportivo.
–Si pero te vez... diferente, esa no eres tú. Tu eres más de ropa aestetic o como se diga.
–Tienes razón. Pero esta vez quiero usar algo diferente.
–¿Y si te digo que no quiero que vallas así?–dijo mirándome a través del reflejo del espejo.
–¿Te molestaría que otros me miraran?
Camine a su dirección y me paré a unos escasos centímetros de él, tuve que alzar la cabeza para poder mirarlo a los ojos.
–¿Y si te digo que no me molestaría los ojos de todos en sima de mi?–pose mi mano sobre su hombro y fui haciendo una línea recorriendo todo su cuerpo hasta llegar a su abdomen.
–Andrea... No sabes lo que estás haciendo–dijo en un tono que me invitaba a tocarlo en otras partes.
Pero como soy masoquista y me hago de esperar pare y le di un manotazo en el hombro y le dije:
–Muévete que se nos hace tarde–le di una sonrisa de boca serrada y camine para entrar en el coche.
Entro en el coche riéndose estúpidamente no se de que pero a mi también me dio risa.
–¿De que te ríes?–le pregunté.
–De lo fácil que eres y lo difícil que te haces–y comenzó a reírse de nuevo.
–¿Me estás diciendo regalada?–dije haciéndome la indignada.
–No, ese es el caso. Que solo te regalas conmigo y después te haces la dura–y volvió a reír mostrando sus perfectos dientes que parecían perlas de mar de lo perfectos que eran–y eso es lo que me gusta–me miro a los ojos–que solo sea conmigo...
Después de eso hubo un tranquilo silencio que no fue para nada incomodo, de hecho me sirvió para poder ver bien el oufits de Ronni ya que en el apartamento no me había fijado bien. Tenía una franela color gris y un pantalón del mismo color con sus respectivos zapatos de jugar fútbol ¿Cómo era posible que un hombre sea tan guapo?
–Tenemos que hablar.
–¿Ah si? ¿De qué?
–Antes, no te pide preguntar que habían hablado tu y Lukas. Si no te incomoda el tema...–dijo mirando fijamente a la carretera–¿Qué paso ahí?
–Él solo quería disculparse conmigo por la forma en la que pasó todo y... ya sabes.
–Vale...
Estacionó el coche y bajamos por supuesto con las indiscretas miradas de todos en sima de nosotros, algo que por lo menos para mi era bastante incómodo.
Cuando llegamos al terreno vimos que las gradas estaban llenas de personas de nuestra clase, por lo que veo si habíamos llegado un poco tarde.
Después solo tuvimos un aburrido turno de educación física y te juro que me iba a derretir de la calor que había ya que estábamos en pleno verano.
–Necesito un baño ¡ya!–dije exhausta de tanto esfuerzo físico. Yo no era para nada de esas chicas atléticas que iban al gim ni nada de eso.
–Ya término el turno–dijo limpiándose el sudor de la cara con un pañuelo–¿Quieres ir conmigo a un lugar especial?–dijo con cara juguetona a lo que solté una carcajada.
–Vale–dije todavía riéndome–Pero... ¿a dónde es?
–Ya te dije, es especial.
–Vale. Pero ¿puedo saber tan siquiera a que te refieres con especial para vestirme conforme a la situación?
–¿Fiesta de chicos?
Bueno, la última vez que me invitaron a un lugar de esos no la pasé muy bien, espero que no pase lo mismo está vez.
Nota de la autora:Tarde pero seguro, (en el siguiente capítulo vamos a adentrarnos más en lo que es la situación de la mafia y la droga del mafioso más temido de Italia) sin adelantar más. Os amo.
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Mi obsesionada perdición
Fiksi RemajaSinopsis Andrea Wisin era una chica de 16 años con ojos claros y pelo corto. Desde los 13 años sus padres la habían internado en un colegio privado llamado "Alborán", en el cual conoce a un chico del cual se enamora sin saber que este iba a ser su p...