He reencarnado hace miles de años y he estado en el bosque everfree sin que nadie lo supiera o se diese cuenta. pero eso cambiará cuando un grupo de ponis hagan que quiera salir de mi hogar.
Era un día como cualquier otro en el bosque Everfree. Nine estaba afuera de su templo, observando el bello paisaje.
Nine: Qué hermoso día tenemos hoy.
Dijo tranquilamente, mientras sus ojos recorrían los alrededores con una serena admiración.
Todo estaba muy tranquilo hasta que escuchó un grito proveniente de un lugar lejano.
Con un suspiro, se teletransportó hacia el origen del grito y, al llegar, notó cómo una pegaso amarilla caía del cielo.
Nine, rápidamente, extendió sus colas hasta alcanzar y tomar a la pegaso amarilla. Nine, con la yegua envuelta en sus colas, la acercó a él y, al mirarla...
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Nine: ¿Fluttershy?.
preguntó incrédulo, ya que jamás pensó que encontraría a una de las Mane 6, especialmente a ella, en este bosque.
Fluttershy, al abrir los ojos, se encontró con los de Nine, el Kitsune. Al verlo bien, rápidamente se separó de él y, sin poder contener su alegría, lo abrazó con entusiasmo.
Fluttershy: ¡Oh, eres tan adorable!.
Exclamó, su voz llena de emoción. Aunque no conocía a Nine, la forma de zorro que él poseía la hizo sentir una conexión instantánea.
Su corazón se llenó de alegría desbordante, y no pudo evitar chillar de felicidad.
Fluttershy: ¡Siempre he amado a los zorros! ¡Eres tan hermoso!.
A pesar de la confusión, la emoción de Fluttershy era palpable, iluminando el bosque con su alegría genuina.
Nine arqueó una ceja, sorprendido por la efusividad de Fluttershy. En ese instante, comprendió que su apariencia como zorro había despertado una gran alegría en ella, quien siempre había tenido una profunda afinidad por los animales.
Nine: Ya veo, jejeje.
Pensó él con una sonrisa, mientras negaba con la cabeza en un gesto de complicidad.
Después de aquel momento de alegría compartida, Fluttershy, en su emoción, se dio cuenta de que había olvidado que él podía hablar. Se separó ligeramente de Nine y, con una mezcla de timidez y alegría, le preguntó:
Fluttershy: ¿Puedes hablar?.
Él asintió con la cabeza, y, con una de sus colas, revolvió suavemente la melena de ella, provocando un ligero sonrojo en su rostro.
