Trazos de caminos Cruzados

conociendo

**Daniel** conoció a Melisa. En el club de debate, un lugar que Melisa había encontrado para canalizar sus pensamientos y preocupaciones. Daniel, que se unió al club con la intención de desarrollar sus habilidades de comunicación, pronto destacó por su capacidad para escuchar y comprender a los demás.

Un día se les pidieron a los integrantes del club tener una reunión para debatir  sobre si tener un viaje escolar por ser los últimos 2 meses de clases. La reunión iba ser específicamente en la sala de conversación de la biblioteca a las 1:20 pm después de las clases.

Cuando la mayoría estaban preparados y listos para debatir las posibles opciones y lo que más conveniente para los estudiantes, maestros e institucion pero aun faltaba alguien, "Melisa" que sorprendentemente no había llegado a pesar de ser las primeras en llegar casi siempre, pero no había tiempo para esperar a que esta llegara. Después de unos minutos llegaría algo agitada por al parecer correr.—ho..*cof cof*.la— dijo agotada y tosiendo

"Hola, Melisa," dijo Daniel mientras recogía sus cosas. "He notado que has estado un poco distraída últimamente. ¿Todo bien?"

Melisa, sorprendida por la preocupación de Daniel, se sintió aliviada al encontrar a alguien dispuesto a escuchar. Le confió que había tenido un inconveniente

—"Si necesitas hablar o si hay algo en lo que pueda ayudarte, estoy aquí para escucharte."— dijo Daniel algo relajado hasta ver a...

**Juliana**, la chica que le gustaba, Daniel conoció a Juliana en la primaria. Desde entonces, Juliana se destacó por su energía y su habilidad para hacer amigos fácilmente. A pesar de sus diferencias de personalidad él estaba decidido a conquistarla.

Ese misma reunión, Juliana, al enterarse de que su compañera llegó tarde decidió acercarse a preguntar por su tardanza  sin darse cuenta que esta estaba al lado de su viejo amigo.

—"¡Dani, cuánto tiempo sin verte!" exclamó Juliana,— abrazando a Daniel. —"¿Qué tal todo? ¿Y quién es esta amiga?"—

Daniel, algo sorprendido por la visita pero feliz por tal apodo que le gustaba y mas que sea parte de quien siente cosas en su corazón, a pesar de eso presentó a Melisa a pesar de no ser nueva. —"Esta es Melisa."—

Juliana, siempre abierta y amigable, extendió la mano para saludar a Melisa. —"Encantada de conocerte, linda. Daniel ha hablado mucho de ti. ¿Qué te trae a nuestro pequeño grupo?"—

Melisa, agradecida por la bienvenida, le explicó a Juliana cómo había llegado a conocer a Daniel, y su interés en brindarles apoyo a el grupo. Juliana, impresionada por su actitud desinteresada, decidió invitar a Melisa a comer juntas en el recreo como amigas pero Melisa le explicó que ya estaba comprometida con sus amigos, rechazando gentilmente la propuesta.

Pero no existe un "no" como respuesta para ella, Juliana organizó una pequeña reunión en su casa para que todos pudieran conocerse mejor. Invitó a Daniel, Melisa, Lísienle y Jerónimo. La reunión fue un éxito, ya que todos se llevaron bien rápidamente.

Daniel y Jerónimo descubrieron que compartían intereses similares en música y literatura, lo que facilitó una conexión genuina entre ellos. Juliana, con su entusiasmo, logró que la atmósfera fuera relajada y amigable, permitiendo que Lísienle se sintiera cómoda y bienvenida.

Así, la amistad entre Melisa, Lísienle, Jerónimo, Daniel y Juliana se consolidó. Cada uno aportó algo único al grupo: Daniel con su comprensión y apoyo, Juliana con su energía y entusiasmo, y Jerónimo con su presencia calmada y empatía.