QHPS Tadano Reencarnaba en Konosuba

Capítulo 4: Un Gesto de Bondad y Nuevos Desafíos

Con su segunda misión completada con éxito y una recompensa considerable en sus manos, Tadano y Aqua empezaron a acostumbrarse a la vida de aventureros. Aunque la dificultad de cazar ranas gigantes había sido una experiencia aterradora para ambos, también les había enseñado valiosas lecciones sobre la realidad de este mundo.

Una mañana, mientras desayunaban en la posada, Tadano se fijó en un grupo de aventureros que discutían animadamente en una mesa cercana. Parecían ser un grupo experimentado, bien equipados y claramente acostumbrados a las dificultades del mundo. Tadano los observaba con una mezcla de admiración y envidia, deseando llegar algún día a ese nivel de habilidad y confianza.

Aqua, por su parte, seguía lamentándose por la falta de comodidades en su vida actual. "No puedo creer que sigamos comiendo esto," se quejó mientras miraba su desayuno simple. "¡Necesito algo más lujoso!"

Tadano sonrió ligeramente. "Tal vez algún día, Aqua. Pero por ahora, es lo que podemos permitirnos."

Aqua suspiró, resignada. "Supongo que tienes razón. Pero deberíamos buscar una manera de ganar más dinero. No quiero seguir viviendo así para siempre."

Mientras consideraban sus opciones, la puerta del gremio se abrió de golpe y entró una joven aventurera, claramente angustiada. "¡Ayuda! ¡Necesito ayuda urgentemente!" gritó, atrayendo la atención de todos en el gremio.

Tadano y Aqua se levantaron de inmediato, preocupados por la situación. Se acercaron a la joven, que estaba casi al borde de las lágrimas.

"¿Qué ha pasado?" preguntó Tadano con amabilidad.

"La granja de mi familia... ha sido atacada por un grupo de monstruos. Mi padre está tratando de defenderla, pero necesita ayuda. ¡Por favor, alguien tiene que ayudarnos!"

Tadano sintió una punzada de preocupación. Sabía que esto podría ser peligroso, pero también sabía que no podía simplemente ignorar a alguien en apuros.

"Podemos ayudarte," dijo Tadano, mirando a Aqua para ver si estaba de acuerdo. Aunque Aqua parecía reacia, finalmente asintió.

"¿Estás seguro de esto, Tadano?" preguntó Aqua, todavía insegura. "Podría ser peligroso."

"Lo sé, pero no podemos quedarnos de brazos cruzados cuando alguien necesita nuestra ayuda," respondió Tadano con firmeza. "Si Komi-san estuviera aquí, estoy seguro de que también querría ayudar."

La joven aventurera los guió hasta su granja, que se encontraba a las afueras del pueblo. Al llegar, vieron que la situación era peor de lo que imaginaban. Un grupo de goblins estaba atacando la granja, causando estragos mientras el padre de la joven intentaba defenderse con una vieja espada.

Tadano y Aqua no perdieron tiempo. Aunque los goblins eran numerosos, Tadano sabía que tenían que enfrentarlos si querían proteger la granja. Con su espada en mano, corrió hacia el grupo de monstruos, seguido de cerca por Aqua, que empezó a lanzar hechizos de apoyo.

La batalla fue intensa, pero gracias a su experiencia previa y a la determinación de proteger a los inocentes, Tadano y Aqua lograron derrotar a los goblins. El padre de la joven estaba exhausto pero agradecido, y la familia les ofreció su más sincero agradecimiento.

"No sé cómo agradecerles," dijo el padre de la joven, su voz llena de gratitud. "Nos han salvado."

Tadano sonrió, sintiéndose satisfecho de haber hecho lo correcto. "No hace falta agradecer. Me alegra que estemos a salvo."

Mientras regresaban al pueblo, Aqua no pudo evitar mencionar lo que había pasado. "No estuvo tan mal, supongo. Pero esos goblins eran realmente molestos."

Tadano asintió. "Sí, lo eran. Pero ayudamos a alguien que lo necesitaba, y eso es lo que importa."

Aqua lo miró con una expresión pensativa. "Sigues hablando de Komi-san. ¿Crees que ella también habría hecho esto?"

Tadano sonrió suavemente. "Sí, lo creo. Komi-san siempre ha sido una persona que se preocupa por los demás, incluso si no siempre lo muestra de forma evidente. Su bondad y valentía son algo que admiro mucho."

Aqua se quedó en silencio, considerando las palabras de Tadano. Aunque no lo admitiera abiertamente, empezaba a entender un poco más por qué Tadano hablaba tanto de Komi-san.

De vuelta en el gremio, la noticia de su hazaña se había extendido rápidamente. Varios aventureros los felicitaron por su valentía, lo que sorprendió a Tadano. A pesar de sus inseguridades, estaba empezando a ganar el respeto de los demás, lo que lo motivaba a seguir esforzándose.

Esa noche, mientras descansaban en la posada, Tadano sintió una renovada determinación. Sabía que aún había mucho que aprender y mejorar, pero también sabía que estaba en el camino correcto. Con Aqua a su lado y la inspiración de Komi-san en su corazón, estaba listo para enfrentar cualquier desafío que el futuro le deparara.