Rebelde way y tu (Pablo Bustamante)

Cap. 53

Narra Luz.

Cuando me iba a volver a ir del lugar, pues pense que Pablo ya no me diría nada, que ya me dijo bastante.

Me equivoque.

Pablo: ¿No será que estás con el para darme celos? ¿Por qué todavía me querés?

No se cansa más este pibe -pense-

Luz: No ¿Cómo te voy a querer yo si ni tu familia te quiere? —dije para ahora si ya irme del lugar—

Si, capaz sonó algo muy hiriente, pero el también me dijo e hizo cosas hirientes, hace un rato me acababa de llamar prostituta y ni hablar lo de hacerme recordar mi pasado, algo que le había confiado a el, pues nunca pensé que usaría para algún tipo de venganza.

Que error.

Con algo me tenía que defender ¿No?

...

Ya en mi cuarto estaba con mi hermana revisando el celular de Dunoff, yo estaba sentada en su cama y ella en el piso.

Luz: Ay Dunoff te voy a programar todo el telefonito —dije con el teléfono de Dunoff en mis manos—

Marizza: Aun no puedo creer que te arriesgaras a que te echen del colegio.

Luz: Como si no me conocieras —dije apartando mi vista del celular un rato para luego volver a ella— a ver... Reparador telefonico... borrar —leí— ¿Jessy? —pregunté para pasar mi vista a mi hermana—

Marizza/Luz: Borrar —dijimos al mismo tiempo con una sonrisa, en eso veo algo y hago como un suspiro—

Marizza: ¿Qué pasa? —me preguntó mientras se acercaba para sentarse a mi lado así también podía mirar el celular—

Luz: Tiene para mandar mail, le podemos mandar uno a Luji —en eso suena la computadora que tenía Lujan para comunicarse con su tutor— yo no mandé nada.

Marizza: ¿Entonces qué suena? —preguntó para luego irse a sentarse en el escritorio de Luji para mirar la computadora y yo me paré detrás de ella para también poder mirar—

Querido tutor, le escribo para que me saque cuanto antes de este colegio, aunque tenga que mandarme al peor de los reformatorios, gracias.

Lujan...

Esto era el mensaje que estaba en la computadora de Lujan, ella le había escrito a su tutor.

Con Marizza nos miramos preocupadas, hasta que ella aprieta para poder mandarle un mensaje nuevo al tutor de Lujan.

Luz: ¿Qué le vas a decir?

Marizza: Olvidese del mensaje anterior, no me saque, tengo muchas cosas que hacer acá —ella leía mientras escribía hasta que escuchamos que alguien entraba haciendo que ella rápidamente se pare de la silla y yo me de media vuelta—

Lujan: ¿Qué hacen? ¿Me contestó mi tutor?

Marizza: No, pero le mande otro mensaje porque el tuyo era una porquería.

Lujan: ¡¿Por qué te metes?! ¿Qué pasa? ¿Te doy lastima de vuelta?

Luz: ¡Cortala con eso de la lastima! —le defendí a mi hermana— ¿Cómo es eso que querés irte?

Lujan: Son cosas mías —dijo en un intento de pasar hacía la computadora, pero con Marizza nos pusimos en medio y le volvimos a poner en su lugar anterior—

Narrador omnisciente.

Luz: No, no, no.

Marizza: ¡¿Qué?! ¡¿Nuestra amistad no importa?!