Capítulo 23~Omega y Alfa

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La puerta de la habitación había sido cerrada nada más ingresaron de un portazo. Phuwin estaba siendo apresado por el gran cuerpo de Pond contra la madera de esta y disfrutaba del ardiente, pero delicado, beso que el Alfa le brindaba.

-Phuwin. -El nombre con connotaciones serias le hizo abrir los ojos de golpe, Pond había roto el beso y lo miraba directo con decisión. -¿Estás seguro? -El Omega mordió su labio inferior. -Porque si hacemos el amor caeré del todo rendido a tus pies y no creo poder superar si después te marchas de mi lado... -El Omega le interrumpió con un beso fogoso y necesitado, absorbiendo su lengua con avidez y degustando sus salivas mezcladas mientras retiraba el cabello largo azabache de su rostro con sus dedos hacía atrás.

-Lo pido por algo, Pond. -Respondió al romper el beso, comenzando uno esquimal en el que sus narices se rozaban con cariño y suavidad. -Quiero estar seguro de que no solo es atracción física lo que siento por ti, pero entiendo si tú no quieres hacerlo.

El Alfa dudó, más de diez segundos, tratando de organizar su mente y relajar a su corazón movido por la ansiedad de su lobo de querer hacerlo suyo de la forma más natural y amorosa del mundo. Finalmente, asintió cerrando sus ojos. Porque, dispuestos a perder, sabía que ya había ganado al simplemente haber podido tenerlo entre sus brazos.

-Pero promete que si me rompes alguna vez el corazón será con delicadeza. -Murmuró volviendo a conectar sus miradas. -Si me rompes el corazón dame una buena razón y te dejaré marchar. -Phuwin sintió sus ojos nublarse por ese pedido tan puro y sobrecogedor, sus manos bajaron a abrazar al menor desde sus hombros tratando de reconfortarlo a él y a sí mismo.

-Lo prometo si tú prometes que, si esto funciona, lo hará para siempre. -Pidió sintiendo el abrazo de vuelta.

-Lo prometo. -Besó sobre su marca de aroma.

-Lo prometo. -Copió el gesto.

Dado de nuevo iniciado un beso, esta vez con caricias más fuertes en sus cuerpos sobre la ropa y con una lentitud tortuosa de lenguas enredadas, caminaron a tientas hasta la cama donde, Pond, fue tumbado y Phuwin sentado sobre su entrepierna.

La sudadera del Alfa fue retirada a la par que la chaqueta y jersey del Omega y las caricias pasaron a ser más íntimas sobre la piel expuesta. Los bellos se erizaban y los jadeos dieron inicio del mismo modo. Las uñas cortas de Phuwin se clavaron y arañaron por completo la espalda tatuada del menor cuando este comenzó a jugar con sus pezones rosados.

El gemido agudo y roto de Phuwin, cuando un chorro de lubricante abandonó su cuerpo al restregarse con fuerza sobre el miembro erecto de Pond, hizo a este cambiar posiciones ansioso. El Alfa se puso en pie y desnudó de cintura para abajo antes de ver el pecho moverse de forma acelerada del mayor. Acto seguido lo desnudó a él con más calma y trepó sobre su cuerpo besando desde sus tobillos, pantorrillas, rodillas, muslos (donde dejó varios chupones), ingles, caderas, ombligo, costillas, pecho, cuello, mandíbula y mejillas.

-¿Te cuento un sueño absurdo que tengo? -Preguntó ladeando su cabeza. Pond asintió retirando de nuevo su cabello hacia atrás. Amaba sujetar esa rebelde cabellera con sus largos dedos como si fueran unas pinzas, amaba ver todas las facciones del menor cuando lo veía y le hablaba. -Quiero que un día nos mires a ambos juntos y digas que encajamos perfectamente, que somos preciosos juntos y que quieras presumirme como tu Alfa.

Una lágrima escapó de uno de sus ojos, estos empañados por las misma y los labios rojizos e hinchados de Pond besaron sus párpados para retirarlas con estos.

-Eso también me gustaría. -Murmuró bajando una de sus manos a acariciar la mandíbula marcada del menor. -Mucho. -Confesó soñar con algo así.

Pond volvió a besar sus labios y se alejó tan solo para coger un condón de la mesita de noche y colocárselo. Viéndose directo a los ojos entró en el Omega, que aún estaba dilatado del día anterior, con lentitud. Al igual que siguieron viéndose fijamente mientras las embestidas comenzaron lentas, pero profundas.

Phuwin sintió que estaba en un mundo paralelo, en el que aquello debía suceder, en el que el hecho de que su lobo aullara emocionado y feliz fuera un sentimiento que debería quedarse para siempre con él.

Pond suspiró sintiendo el nudo en su garganta formarse cuando escuchó al Omega aullar dentro de Phuwin y su lobo le respondió del mismo modo. Su frente cayó sobre el pecho del mayor y se quedó así mientras seguía dando placer tortuoso y lento a su amante.

-Pond. -Le llamó el mayor sin lograr nada. -Pond. -Volvió a tratar inútilmente, el llamado sabía que lloraría si lo veía al rostro. -Bebé. -El Alfa suspiró tembloroso y la primera lágrimas escapó de sus ojos mojando el pecho contrario. Phuwin sujetó su rostro tratando de hacerlo salir de su escondite de forma inútil ante su resistencia. -Mocoso irrespetuoso, hazle caso a tu P' caso y mírame, Nong Pond.

Tal vez fue el apodo que extrañaba y siempre le había revuelto el estómago: mocoso. Tal vez el que Pond se autodenominada como algo suyo aunque fuera diciendo que era su mayor: su P'. Tal vez el lindo y tierno diminutivo de su nombre a pesar de haberlo dicho con tonos molestos: Nong. Pero finalmente el Alfa alzó su vista con lágrimas adornando sus largas pestañas, misma lágrimas que Phuwin se encargó de retirar con delicadeza antes de decir sus palabras que los llevarían a ambos a un orgasmo en conjuntos.

-Me quedo contigo. ¿Vale, bebé? Omega se queda con Alfa.

Nota: Nunca había escrito un sexo tan cute y sentimental 😭 Pond best Alfa

El suegro de mi hermano ~ PondPhuwin ~ OMEGAVERSE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora