Emma. 10

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Sami me mira con amor y deseo. —Vamos a la cama.—sugirió, su voz un susurro que me hizo sentir un hormigueo de anticipación.

Me besa suavemente y fue llevándome a la cama hasta chocar con el borde. Agarra el nudo de la bata y termina de abrirla la desliza por mis hombros hasta caer al piso, dió dos pasos hacia atrás, sus ojos verdes se oscurecieron de repente y se saborea los labios.

—Emma.— senti un escalofrío al escuchar mi nombre con deseo.

Se acerco a mi, paso su nariz por mi cuello suavemente, sentí como se erizaba mi piel, nuestros labios se encontraron como agua al desierto. Teníamos una sed tan grande de la una con la otra, una sensación en la que nuestros cuerpos se pertenecen desde siempre.

Tomo mi lengua y comenzo a chuparla suavemente, mientras sus manos masajeaban mis pechos. Nos separamos por la falta de aire.

—No es lo unico que quiero probar.

Me quede quieta un momento mientras procesaba lo que escuchaba de ella, senti un calor emanar en mi interior, me guío suavemente a sentarme en la cama, tomo nuevamente mis labios, el calor alrededor de nosotras era intenso.

Me recosté poco a poco, y fue deslizándose hasta quedar de rodillas en frente de mi, comenzó a besar mis piernas y fue subiendo por los muslos, no pude evitar gemir.

—Oh!.. Sam.

Tomo una de mis piernas, y la subio a su hombro, dejandome más expuesta ante ella, se acerco lentamente a mi vagina, y senti su lengua pasar lentamente por mi clitoris lo que hizo sacudir mi cuerpo.
Verla entre mis piernas, me exitaba aun mas, su lengua pasa por mis pliegues, comienza a lamber y chupar con ansias dandome descargas de placer.

Veo como alza la mirada con una picardia en su rostro que me deja sorprendida, no puedo mas, todo es tan caliente, tan exitante y hermoso, tomo su cabeza entre mis manos y la presiono mas en mi sexo indicandole que estoy lista, ella acelera sus movimientos, hasta que siento como un dedo se introduce en mi.

—Aaahhh.. si.. sam..—gimo.

Su dedo entra fácilmente de lo mojada que estoy y enseguida introduce el segundo sin dejar de darle atencion a mi clitoris.
Muevo mi cadera al compás de sus dedos, siento una presion en mi vientre y comienzan a tensarse todos los musculos, ella acelera aún más y me hace llegar al orgasmo de una forma espectacular.

—aaahh.. Sami..

Mis piernas tiemblan, y mi vientre se tensa hasta ir relajándose, sam aun esta de rodillas tomando todo mi.

Dios!! que imagen tan sexy.

Se sube a horcajada y acerca su rostro para besarme con mucha pasion, siento mi sabor en su boca lo que me excita aun mas y busco su lengua para saborearla.
La giro para que quede boca arriba, aprovecho ese momento y abro su bata dejando todo su cuerpo a mi vista, lentamente me subo a ella, sam me toma por los gluteos y me aprieta mas a ella, comienza a moverse con un ritmo que me derrite, voy a sus senos como niño recien nacido, me fijo a ellos sin temor, chupo y muerdo suavemente su pezón y la escucho gemir, voy dejando le besos hasta tomar su cuello, al llegar a su oido muerdo suavemente su globulo y le susurro.

—Ahora es mi turno de hacerte mia nuevamente, quiero devolverte todo el placer que me has dado.

Bajo una de mis manos acariciando su vientre hasta llegar a su parte mas sensible, esta tan humeda, mis dedos resbalan fácilmente.

El sonido de sus gemidos, mirar sus gestos, el contacto de su piel con la mia, el sabor de su lengua, alborotan todos mis sentidos.

—Por favor Emma.

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