BROKEN HEART

CAPÍTULO 15:

Cuando era niño y cuando veía la gente de su edad usando uniforme escolar y llevando una mochila para estudiar, Khem siempre sentía envidia. Uno de los mayores sueños de Khem era estudiar y a medida que fue creciendo empezó a trabajar en el barrio, por lo que, cuando tenía algo que hacer para obtener dinero lo hacía sin pensar. Cuando tenía dinero lo dividía en tres partes, la primera parte era para comprar alimentos y medicinas para la abuela, la segunda parte la guardaba de ahorro por si acaso necesitaba algo de emergencia y la tercera parte era para  conservarlo para el futuro, para poder estudiar. Pero el dinero que recibía cada día no era suficiente para todos los gastos que debia enfrentarse, dejando sólo unos pocos baht para ahorrar.

Con el paso de los años, Khem pudo ahorrar y ganar dinero, una suma total suficiente para ir a estudiar fuera del sistema, pero la abuela de repente enfermó provocando la necesidad de mantenerse en el hospital por varios días y todo el dinero que había ahorrado Khem en todos los años de trabajo, tuvo que usarlos para el tratamiento de su abuela y no soloneso, también debía ganar mucho dinero más para pagar su continuo tratamiento. La cruel realidad que había comenzado a vivir, había provocado que los sueños de estudiar de Khem poco a pocose desvanecieran y solo se propuso trabajar duro para usar todo únicamente en el costo del tratamiento para la abuela. Siendo así, debía abandonar completamente los sueños de algún día estudiar..

Khem había visto muchos de los libros en los estantes de Tayakorn, que no podía evitar sacarlo y abrirlos para mirarlos. Miraba que cada página tenía muchas cosas que las llenaban, pero solo podía acariciar suavemente cada hoja, porque no podía comprender ni entender lo que allí había.

La mayoría de los libros que Tayakorn tenía, eran libros de conocimiento académico sobre médicos y estaban escritos completamente en inglés. Entonces, si fuera otra persona en cuanto viera ello inmediatamente los cerraría porque sería aburrido y vertiginoso, pero para Khem no era así. Aunque no podía leerlos, seguía siendo algo que añoraba hacer porque si pudiera leerlo, sería un suelo para él.

Khem sacó un libro y lo miró, cuanto más miraba los libros, más se quedaba mirando las ilustraciones porque eran maravillosas para sus ojos, como una forma de poder leer. Por lo que, se quedaba mirando los libros durante mucho tiempo.

Hoy era otro día libre para Tayakorn, por lo que salió del dormitorio a última hora de la mañana sin pensar en encontrarse con Khem de pie junto en la estantería de la sala de estar.

"No puedes leerlo, entonces ¿por qué te quedas mirándolo?"

Cuando escucho aquella voz profunda, Khem que estaba concentrado en el libro se sobresaltó, rápidamente devolvió el libro a su lugar original antes de volverse para disculparse con Tayakorn por miedo a que la otra parte lo culpara de sacar un libro para mirarlo sin permiso.

"Lo siento."

Tayakorn ignoró las disculpas de Khem.

“Cuando te pregunté si sabías leer dijiste que no, pero ahora recoges los libros para mirarlos, ¿Por qué?"

Como era de esperar, Khem apretó los labios antes de responder con sinceridad.

"Yo... siempre he querido leer. Cuando vi todos los libros de Khun Korn, no pude evitar sacarlos y mirarlos ”.

El hombrecito bajó la cabeza y miró al suelo con miedo, pensando en su corazón que Tayakorn nuevamente sacaría su nivel de bajo rango y le gritaría, pero eso, eso no fue así.

“Te quedarás en casa durante este tiempo. Vamos te enseñaré a leer."

No fue sólo Khem quien se sorprendió por esta declaración, Tayakorn cuando oyó salir esas palabras de su boca, él también se sorprendió y mientras estaba a punto de decirle a Khem que olvidra lo que había dicho, esa persona habló primero.