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Bueno, esto no puede ser saludable. ¿Es la cuarta vez que tiene que convencerse a sí mismo de no dar marcha atrás? ¡Dios mío, si no fuera porque su tripulación lo necesita, probablemente ya estaría de vuelta en Goa! ¡Conoció a los mocosos hace dos días! Uno no se encariña tan rápido, ¿verdad?

¿Qué le pasaba a él y a Shanks para que se quedaran atrás después de años en Oro?

Se había asegurado de que los niños estuvieran durmiendo profundamente antes de irse y, en realidad, ¿qué otra cosa podrían haber estado haciendo al amanecer? ¿Jugando al ajedrez? Pero tuvo que admitir que su tendencia a preocuparse había dado sus frutos, ya que los había encontrado en lo que solo podría describirse como un montón de abrazos y roncando no tan suavemente en los oídos del otro.

Davy Jones se lo lleva, pero los mocosos son lindos.

Aún así, ya puede ver el Sombrero de Copa y cuanto antes se ocupe de Krieg, antes podrá ir a otra visita. Ace no hablaba en serio cuando pidió dos semanas entre visitas, ¿verdad? Quiero decir, si hubiera podido pasar dos días más con los niños y se hubiera asegurado de que estarían a salvo, tal vez podría haberlos dejado durante tanto tiempo. ¡Pero no hay forma de que lo haga ahora, no cuando tuvo que regresar corriendo después de que los atacara un maldito tigre! No, les dará una semana como máximo y los visitará durante al menos tres días.

Alguien debe haberlo visto porque la cubierta del Big Top está cada vez más concurrida y Buggy tiene que sonreír cuando ve a su tripulación saludándolo y gritando lo que solo puede suponer que son saludos. Realmente extraña a su banda de idiotas.

Tan pronto como está lo suficientemente cerca, uno de los hermanos Funas le lanza una cuerda. "Bienvenido de nuevo, Capitán".

—Es bueno estar de vuelta. —No parece herido, ni tampoco los otros dos, así que los raspones de las balas deben haber sido menores—. ¿Dónde está Pablo?

Le indican la dirección de la enfermería y se dirige hacia allí, deteniéndose solo para sonreír ante los saludos de sus nakama. Hay muy poca gente en la nave, por lo que la mayoría de su tripulación debe estar distribuida en tantas aldeas como sea posible para actuar como vigías. Bien, esto significa que sabrá la ubicación del primer oficial de Krieg tan pronto como pregunte.

Pero lo primero es lo primero. Abre la puerta de la enfermería y se sorprende al encontrarla llena de flores y comida. Pablo está jugando al golf con lo que parece ser un buen trago de alcohol mientras Lucas y Javi se preocupan por él.

“¿Doc ha aprobado que bebas?” Ante su pregunta Pablo se sobresalta y termina ahogándose con su bebida.

“¡Capitán!”, le saluda Javi mientras Lucas le da palmaditas en la espalda a su compañero de tripulación. “No esperábamos que volvieras tan pronto”.

Buggy resopla y se sirve una manzana del enorme frutero que había en la camilla vacía. “Me has herido. En cuanto me enteré de que habían herido a mi querido subordinado, corrí hacia allí, obviamente”.

Habla en broma, por supuesto, pero Pablo debe haber oído suficiente verdad en su voz como para sonrojarse un poco. “Exagerado”, murmura. Aun así, parece complacido y lo mismo hacen los otros dos.

"El plan es engañar a Krieg para que vaya al Cementerio, ¿alguna objeción?" Buggy no puede destruir a todos los novatos con los que se encuentra y Krieg podría resultar útil, pero si su tripulación lo quiere muerto, eso es lo que será. No es que haya escasez de piratas demasiado ambiciosos después de todo.

—Ninguna, Capitán. —Pablo es el primero en responder y aunque Lucas y Javi no parecen muy contentos también asienten.

Bueno, Buggy sabe qué hará que esos dos ceños fruncidos se pongan patas arriba. “Perfecto, por supuesto que me aseguraré de pagarle a ese primer oficial suyo por tus heridas. Y como me siento generoso, incluso lo duplicaré. ¿Cuántas costillas rotas tienes?”

—Tres —admite Pablo tímidamente.

“Y dos más magullados”, añade Javi.

“¡Tiene todo el lado derecho magullado!” Lucas tira de la camiseta de su amigo para mostrársela. Pablo aparta su mano, pero no antes de que Buggy vea demasiado morado en la piel de su subordinado.

Se sienta junto a la cama. “Necesito un nombre y una descripción”.

Los tres obedecen rápidamente. Al parecer, el hombre, o "maldito demonio" según Lucas, se llama Gin y lucha con dos tonfas cargadas con esferas de metal, pero no tiene miedo de usar armas de fuego cuando es necesario. Parece bastante flacucho y vestía principalmente de gris cuando los Domingos lucharon contra él.

“Era bastante cruel”, admite Pablo, que por alguna razón parece avergonzado. “Y sus armas eran muy pesadas, así que también debía ser fuerte. Mohji o Cabaji probablemente podrían haberlo vencido, pero estaba un poco fuera de mi alcance. Lo siento por haberte fallado”.

Buggy le da un golpe en la cabeza tan fuerte como se atreve. “¿De qué estás hablando? Tu trabajo era proteger a los aldeanos y, considerando la cantidad de regalos que hay en esta sala, diría que lo lograste y que todos se sintieron muy agradecidos. Así que no te preocupes por eso y deja que tu Capitán se encargue de ese malvado, ¿de acuerdo?”

-Che, no soy un niño.

"Lo sé, lo sé, eres un hombre grande y muy fuerte y, como tu capitán, no podría estar más orgulloso de ti, así que asegúrate de descansar y escuchar a Doc, ¿de acuerdo? Javi y Lucas se asegurarán de que estés cómodo, ¿verdad, chicos?"

"¡Bien!"

Se queda un rato más charlando con ellos y probando algunas de las frutas, pero pronto Pablo empieza a sentirse somnoliento, así que se excusa para dejarlo descansar. Cabaji y Mohji todavía no han vuelto y sería bastante irresponsable ir a luchar contra los piratas de Krieg antes de hablar primero con ellos, así que se encuentra con algo de tiempo libre. Y sabe exactamente cómo hacerlo.

Empieza a caminar hacia la parte trasera de la nave y las explosiones amortiguadas que escucha le indican que los gemelos Turner están a bordo. Por supuesto que sí, esos dos locos solo salen de su taller gritando y pateando. Bueno, gritando, pateando y arrojándote cosas peligrosas.

Tom Turner es el más cuerdo de los dos y es un buen lanzador de cuchillos, no tan bueno como Buggy, por supuesto, pero ¿quién lo es? También es el herrero más talentoso de la tripulación. Nadie puede equilibrar un cuchillo, ni siquiera uno de bolsillo, tan bien como Tom.

Su hermana, Taylor Turner, es una tragafuegos, o más exactamente, una escupidora de fuego, y la cocreadora de las bombas de Buggy. Si alguien puede descubrir cómo fabricar un encendedor que solo necesite recargarse una vez al año, esa es Taylor.

La carne de Luffy tendrá que esperar, necesitará la experiencia de Mohji y Richie.

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