The altar is my hips

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El aire otoñal le cala los huesos,su pequeño caminaba a lado de ella jugando con un pequeño león de peluche y pisando las hojas secas que caían de los más hermosos árboles.

La imagen era muy hermosa a su parecer, los tonos terroso y rojizos eran sus favoritos,junto que su época más esperada era Otoño.

-mami crees que este un tiranosaurio Rex?- pregunto el de cabellos rubios volteando a mirarla,la mayor sonrió igual de emocionada que su hijo,pero por diferentes razones.
Al no querer molestar a Spencer ofreció la idea de encontrarse afuera de el museo, luego de prácticamente horas en el teléfono hablando con Spencer este había accedido a regañadientes.

-talvez,sabias que el dinosaurio más grande no era ese?-comento pasando sus manos por sus brazos frotandolos como si fuera a darle calidez,se arrepiente de no haberse puesto un abrigo.
Su camisa manga larga roja era abrigada pero no la calentaba del frío viento.

-sip,es el espinosaurius-aveces le sorprendía la facilidad de memorisarse los nombres de esos animales,pero claro que no se memorizaba las tareas.

Cassius no dijo más nada continuando caminando con su peluche en su mano, visualiza a lo lejos el enorme edificio.
La sangre bombea fuertemente al ver la característica cabellera de su novio unos metros de ellos.

El pequeño fue el primero en distinguirlo saltándose de la mano de su madre corriendo hacia el,Spencer se sorprende por el tan repentino tacto,se gira para poder ver bien al niño.

-Spencer! Mi mamá dijo que íbamos a ver dinosaurios!-exclamo haciendo señas con sus manitos y su radiante sonrisa,la peliroja le da una sonrisa con las mejillas coloradas guardando el peluche en su bolso.

-hola Cass,como estas?-la mayor se acerca más hacia sus chicos.

Abraza a Spencer dándole un beso en su mejilla como saludo,en pequeño solo sonríe e interrumpe para hablar con el mayor comenzando una conversación interesante sobre lo que verían al entrar.

-que te dijo Strauss?-cuestiona Spencer sin apartar la mirada de Cassius que estaba observando restos de dinosaurios junto a otros niños y una guía del museo.

-nada interesante,solo que debería dejar de estar metida en ese tipo de acciones que ignoren las órdenes de ella-le resta importancia,ayer tuvo que escuchar un largo sermón del porque no debería estar de acuerdo con cada cosa que hace su hermano,obviamente ni le hizo caso.

-y estoy seguro que nisiquiera escuchaste algo de lo que te dijo-ya la conocía,y conocía el carácter de su pareja,era terca hasta morir.

-si que me conoces-le da un suave beso en la mejilla causando un gran sonrojo en su novio el cual baja la mirada.

-no quiero presionar te Stella pero,Cass sabe de nuestra relación?-su cara demuestra su curiosidad,no hay momento en los que no quiera besarlo como si su vida dependiera de eso,la mayor baja la mirada conciente que tenía que hablar nuevamente con su pequeño príncipe.

-se que debo decirle,simplemente no logro encontrar el momento,siento que con todo lo que pasa no encuentro el tiempo-y aunque era verdad había una pizca de mentira,en verdad deseaba retrasar la oportunidad para hablar con su hijo,no por el hecho de avergonzarse de su relación con su novio,si no más bien el hecho que no sabía como se lo tomaría.

-te lo volveré a repetir Stella,no quiero presionarte,si deseas esperar no me negare,solo quiero que te sientas cómoda con nuestra relación-un gran malestar se instala en su pecho,odiaba mentirle a él,no quería repetir lo que ocurrió hace años.

-no se que hize para merecerte-separa la vista de donde esta su hijo para mirarlo, los ojos de Spencer se iluminan al verla

-no hicistes nada,te mereces todo Stella-y el se lo daría,Spencer seria y es capaz de dar todo por ella,un sentimiento extraño ya que nunca por nadie,ni siquiera por su equipo había sentido.
No era ciego,tenía las sospechas que la mayor había tenido una relación tóxica y abusiva,los patrones estaban hay.

Wildest Dreams |Spencer ReidDonde viven las historias. Descúbrelo ahora