_Vigésimo tercero-.

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Casi a la media noche aquella estancia había quedado sola, los chicos habían abandonado la casa uno tras otro hasta dejarlos solos.

Y vaya que lo esperaban, las películas que habían visto ni siquiera fueron de su entero gusto o prestaron ni la más mínima atención. Sus ojos siempre en el otro, siempre. El deseo ardiendo en sus miradas, la anticipación.

HoSeok se juraba tan mojado que no necesitaría preparación aún si era literal, su segunda vez. Moría por él, lo deseaba tan potentemente como jamás deseo alguna vez a alguien o pensó hacer.

Sus ojos buscándolo apenas aquella puerta de entrada se cerró, cuando NamJoon salió por fin. SeokJin se mantenía en aquella posición, sentado al sofá con las piernas abiertas, hecho de ese conjunto deportivo y casual, de su clásico cabello negro largo que le caía a los costados  de sus sienes con gracia y solo aportaba más sensualidad a su ser.

HoSeok le mantuvo la mirada, ocultando un poco sus ansias, recargado sobre el sofá aún; con  una mano bajo su barbilla y la otra casi entre sus piernas formando un puño y tratando de ocultar lo necesitado que estaba por él, como lo ponia con su sola mirada.

— ¿Quieres quedarte a dormir? Parece que Jimin y Suga tendrán una buena cita — Aquello le coloreo las mejillas. La propuesta era jugosa, sería terrible no admitir que no le atraía y esperaba.

— ¿Si no te molesta...?— Dijo en cambio con la emoción creciendo dentro. SeokJin chistó.

— ¿Voy o vienes? — Dijo enseguida con esa voz sensual clásica de él y esa seriedad que tanto le atraía a HoSeok. A este mismo le martilleaba al corazón contra el pecho. HoSeok suspiró agobiado, necesitado, superado mientras descruzaba las piernas y se erguía del cómodo sofá, caminando con cuidado hasta sentarse a regañadientes al lado de él, cerca pero no tan cerca y eso ya lo estaba sobrepasando. El aroma único de Kim lo llenó, su calor corporal llegó hasta donde él, ¿Como era posible mantener tanta temperatura en el cuerpo y andar como sin  nada? No era como si estuviera caliente todo el tiempo en el sentido de la excitación, simplemente así era su temperatura. Imaginaba miles de escenarios donde no necesitaría siquiera el cobijo de una manta por las noches, pues su cuerpo le daría el cobijo necesario apenas con acercarse a él y eso lo mataba lento y  angustiosamente, pero que divino aquello.

Intranquilo se quedó al sentarse a su lado, reprimiendo la idea repentina que cruzó su mente y las ganas de sentarse sobre las jugosas y fuertes piernas de él.  SeokJin se volvió hacia él, peligrosamente, arrancádole un pequeño brinco de impresión. Siempre lo tomaba por sorpresa ya que no terminaba por acostumbrarse plenamente a él. Pero le gustaba porque Kim le resultaba interesante y sabía que era una caja llena de sorpresas.

Para ese momento HoSeok estaba sonrojado de pe a pa, SeokJin no dejaba de mirarlo y eso lo relajaba, lo drenaba increíblemente.

— ¿Qué pasó hoy en el centro comercial? — Inquirió sorprendiendo a HoSeok, haciendo que este se preguntara si Jimin le había mencionado algo, pero no. Ni siquiera cruzaron palabra cuando llegaron entonces, ¿Cómo?.... "Con esa cara que traes" recordó que le había dicho Jimin antes de bajar del auto— ¿Hay algo que deba saber HoSeok? — SeokJin se inclinó y sin vergüenza enterró su rostro en el cuello de él, olfateando deliciosamente y luego besando la suave y tocada piel por el sol. HoSeok se aferró al sofá y cerró lo ojos con fuerza, sintiendo a flor de piel las caricias humedas de esa lengua y labios expertos. Ronroneó cuan felino, superado ante su toque que tanto ansiaba. Su loción, su aroma natural; lo mareaban para bien y hacía que su mente se vaciara y fuera difícil articular correctamente.

𝑴𝒚 𝑻𝒊𝒎𝒆 𝑰𝒏 𝒀𝒐𝒖. (KSJ&JH)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora