Este libro contiene mini historias que tratan de MaxNat (así como las parejas de sus series). Son pequeñas y quise recopilarlas para que puedan disfrutarlas en su conjunto.
➳Las mini historias no tienen continuidad entre sí, son historias a parte.
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"Te juro que no me iré sin ti, este sentimiento me hace perder el aliento, acércate y abrázame fuertemente, no te vayas esta noche quiero quedarme contigo. No puedo manejarlo, necesito un milagro, tú y yo estamos ardiendo, no hay necesidad de ocultar nuestros deseos, apaga este fuego que hay en mi".
-Over Me, Overdose.
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— ¿Me concede está pieza, su Alteza? — dijo el apuesto hombre.
El príncipe sonrió tan levemente que solo ambos lo notaron y después de unos segundos asintió tomando su mano. Ambos fueron al centro de la pista y bailaron la pieza como todas las demás parejas.
— ¿Cómo has estado? — preguntó el mayor susurrándole al oído.
— Bien... un poco ocupado. Perdón por no responder tu carta. — contestó el más joven con un ligero sonrojo ante la cercanía.
— No te preocupes. Fue lo mejor para no levantar sospechas.
Nat asintió mientras sonreía cuando Max lo tomó por la cintura.
— Eres muy popular hoy P'Max.
— No puedes decirme eso cuando todas las miradas están posadas sobre ti. ¿Sabes cuántas peticiones te llegarán hoy?
— Espero superar las del año pasado.
Max rió — Tenga usted por seguro su Alteza. — tomó un segundo para que la pareja de al lado se alejara. — Ahora que eres mayor de edad es el momento perfecto para desposarte.
Algo en la mirada de Max le decía a Nat que estaba molesto, o tal vez... — ¿Estás celoso?
Mirando la sonrisa divertida de Nat, el mayor respondió — Sí. Pero no te preocupes, enviaré la mía también.
Nat negó riendo — No es necesario. ¿Sabes que eso podría ser más sospechoso?
Max calló y asintió — Te ves hermoso, como un ángel N'Nat.
Nat se sonrojo ante las repentinas lindas palabras del mayor, amando cuando le llamaba de esa forma y tono dulce — Gracias, P'Max. Tú también eres guapo.
Cuando la canción estaba a punto de terminar, Nat se acercó más a su pareja de baile — Está noche, quédate en mi estudio. Te esperaré cuando el baile se acabe.
Max tembló levemente ante el contacto de los labios de Nat con su oreja, por lo que solo asintió y Nat le sonrió amando como las orejas sonrojadas de Max le delataban, pero nadie parecía notarlo excepto él.
Después cambiaron de pareja y el baile siguió. Cómo siempre hubo una adoración a la familia real. También se anunciaron algunos asuntos importantes y por último anunciaron sobre las cartas que recibió el joven príncipe que fue lo que más dio de qué hablar.
