Bajo las escaleras detrás de Atsushi-kun, sabía que no podía evitar por más tiempo esté interrogatorio, demasiados secretos por explicar y seguir ocultando algunos, sí bien es cierto necesitaré todo el poder para salvar a Chuuya, no quiero involucrarlos demasiado, no sé que tan confiables serán, tendremos que ir en contra el mismo gobierno.
En cuanto llegamos al café todos se quedan en silencio y me observan.
-No es nada interesante – sonrió.
-Si claro, de pronto no es interesante que tengas una bebé, que seas un ex miembro de Port Mafia y además hijo del mismísimo jefe – Yosano hace una mueca de repulsión – solo espero que tu madre haya sido mayor de edad.
-No hablaré de mi madre – me tenso un poco, no es un recuerdo necesario para salvar a Chuuya.
-Justo – asiente y me señala una silla.
Tomo asiento, Naomi me pide a Sonoko se la doy y la arrulla suavemente.
Aunque me turno con Kouyou para cuidarle aún pasa la mayor parte del tiempo conmigo, simplemente tengo miedo a perderla.
-¿De quién es hija Sonoko? – es Kunikida quién pregunta, son detectives y obviamente al presenciar mis pocas interacciones con Kouyou es obvio que no compaginamos muy bien.
-No tiene caso negar lo obvio, es mía – suelto una risa burlona.
-Sin rodeos – exige Yosano – escucha el jefe nos dio la orden de que te apoyemos, pero; ¿como te apoyaremos si no eres capaz de confiar en nosotros?
Borro mi sonrisa, los observo uno a uno, están tensos, son sinceros, lo cierto es que son confiables.
-Es mía y de Chuuya – observo a mi hija – es lo único que me queda de él – mi voz sale más ahogada de lo que pretendo.
-Entonces, ¿Quién es Kouyou-san?
-La madre de Chuuya y mi madrastra – hago una mueca – ni yo me esperaba esto.
-¿Como es posible que no la conocieras si es tu madrastra?
-Mori no es alguien comunicativo, sin excepciones, bueno... si tiene una excepción y es mi hermanita Elise – Yosano hace una mueca de asco.
-Deberían alejar a esa niña.
-Créeme esa niña es un demonio – niego – tampoco soy cercano a ella, un día simplemente Mori llego con ese bebé a su oficina, y me la presento, no cuestione más. No me interesaba.
-Vaya familia...
-Lo sé, es un desastre – le sonrió a Kunikida – aunque mi situación familiar no es importante – él frunce el ceño, antes de que diga algo decido continuar – hasta ahora he demostrado que he cortado totalmente mis lazos con la Port Mafia, y sinceramente si ahora hay un acercamiento es por Sonoko... mi hija corre peligro.
Mi tono es serio, mi mirada también, los recorro uno a uno.
-Nosotros lo apoyamos Dazai-san – el primero en hablar es Atsushi.
-Lo agradezco.
-Ahora bien, no tengo idea exactamente de a qué nos enfrentamos, pero el gobierno también está involucrado, como lo notaron Sonoko es especial... y Chuuya lo es más, él está en peligro.
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Creí que había jugado mis cartas de forma adecuada, pero solo era una falsa ilusión, ahora mi hija y Osamu corren peligro, lo que más amo...
Siempre he creído que nunca es momento para acobardarse, y no voy a empezar ahora.
Tironeo con fuerzas de mis ataduras, no me importa lastimarme, el veneno me mantiene débil y aturdido, no es suficiente, no me rendiré.
Decido que es necesario cambiar de estrategia, por lo menos para que dejen de envenenarme y pueda canalizar mi poder, de lo contrario no tendré oportunidad de escape, si Fyodor lo que necesita es un heredero con mi sangre puedo fingir que lo he aceptado.
Inmerso en mis cavilaciones no me percató que precisamente el susodicho ingreso a mi celda.
-Chuuya-kun... - me sobresalto y lo observo, su sola presencia me repugna y quiero borrarle la sonrisa de un puñetazo.
-Fedya – ladeo la cabeza fingiendo estar más aturdido de lo normal.
Se sorprende un poco, es listo, así que se acerca con sigilo.
-Interesante – murmura, comienza a morder su uña – Nikolai...
-A la orden Dos-kun – lo sigo con la mirada tratando de parecer aturdido, no puedo ver correctamente, aunque me concentro en escuchar – sus ataduras siguen firmes – no baja la guardia y cuando me doy cuenta me ha inyectado de nuevo...
-Contigo no me puedo confiar querido – se acerca toma mi cabello obligándome a alzar mi rostro – tienes demasiado poder en ese pequeño cuerpo...
Siento su otra mano en mi cintura y como se desliza descendiendo hacia abajo, tocando hacia el naciente de mis escamas, me repugna, solo me concentro en resistir, en no apartarme, mi cuerpo se tensa por completo.
-Está más sumiso, no debemos confiarnos – se separa de mi – dime Nikolai, ¿hiciste lo que te pedí?
-Por supuesto – suelta una risa – ahora soy secretario de un miembro importante de la Dieta, el gobierno aún busca al ser de alta energía y está dispuesto a negociar, tienen planes interesantes.
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Suelto un suspiro estoy exhausto, esta reunión con los miembros de la agencia fue demasiado agotadora, al principio dudaron de mi cordura con eso de las sirenas y tritones, por suerte Yosano confirmo varias cosas y Rampo aclaro el resto.
Ingreso a mi hogar, Sonoko ha estado bastante quieta, la dejo en la alfombra con una sonaja, mientras busco algo para que sea mi cena, no es que tenga apetito, es simplemente rutina para mantenerme, no puedo estar débil, por Sonoko y Chuuya debo estar en mi mejor condición.
Encuentro un poco de sobras de una comida que me trajo Atsushi hace unos días, la pongo a calentar en el microondas, saco mi celular buscando un contacto al que no he recurrido en mucho tiempo, tampoco tengo ganas de verlo o siquiera escucharlo.
-No hay opción – suelto un suspiro cansado, aprieto el botón de llamada, espero un momento, ¿Dazai-kun?; su voz me cuestiona – necesito que nos reunamos...
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Gabrielle: Bueno mil disculpas por la demora, vida complicada e historia complicada dos cosas que no juegan muy bien a mi favor, entonces estoy tratando de actualizar historias, sus comentarios y apoyó me alientan, si pueden recomendarme también seria de mucha ayuda, he creado un discord por si gustan. https://discord.gg/taYCckrZ
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Llanto de sirena
FanfictionLos mares esconden oscuros secretos, lo cuales quizás nunca deberían ser revelados. La furia del mar es implacable... El dolor por una traición es incurable... ¿Y si la traición es un acto de amor? ¿Preferirías condenar tu alma y no la del ser amado...