24. Aceptación y Felicidades

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El reino estaba tranquilo como lo solía ser en el ultimo mes, Mauro podía ver todo desde el balcón de los aposentos que se le dió en su estadía

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El reino estaba tranquilo como lo solía ser en el ultimo mes, Mauro podía ver todo desde el balcón de los aposentos que se le dió en su estadía. Lo que más le llamaba la atención era el hecho de que el jardín se veía ridículamente verde, eso y que todos estaban haciendo sus cosas con calla hablando y sonriéndose entre si con compañerismo, nunca había visto algo así.

Unos pasos firmes se acercaron haciendo que volteara encontrando a su hermano. "¿Vas a empujarme?" Preguntó con tranquilidad.

"Caerías sobre arboles o arbustos, no te mataría pero te rompería los huesos, no lo vale." Le respondió con la misma tranquilidad para apoyarse de el barandal.

Mauro bufó con una sonrisa burlona y continuó apreciando las vistas. "Desde que mamá murió no veía el jardín así de verde." Soltó.

"Lo sé." Respondió Iván. "Antes de irme apenas y era color verde, dejé a Alexis al mando y cuando volví todo estaba con estos colores." Le dijo viendo el verde hermoso del jardín real con sus colores variados por las flores y demás.

"Y las personas..." Señaló el mayor. "Todos se ven tan tranquilos y alegres, todo está en orden sin necesidad de que los guíen. ¿Cómo lo has conseguido?"

"Yo no hice nada." Iván se cruzó de brazos para mirarlo. "No he dado instrucciones de nada desde que volví, Alexis es quien se ocupa de ver que todo se mantenga bien." Confesó sin problemas. Mauro alzó su mirada a su hermano y frunció el ceño confundido ante esa confesión.

"¿Vas en serio con esto?" Preguntó. El rostro del rey le dijo su confusión ante su pregunta tan repentina. "¿De verdad te casarás con ese niño? No sabes de dónde salió o si planea matarte tan pronto oficialmente lo hagas el rey."

"Me mate o no, vaya en serio o no, ha mejorado enormemente las cosas aquí y todos le aprecian. Él mismo ayuda con la cosecha de los alimentos y escucha cada una de las preocupaciones de su pueblo, si me deshago de él todo el reino me va a odiar tanto que posiblemente corten mi cabeza." Dijo con seriedad y calma. "Si me mata por lo menos sé que todo en lo que trabajó nuestra familia continuará y en las mejores manos."

El mayor le miró en silencio escuchando cada una de sus palabras hasta que bufó. "Estás como una puta cabra." Se limitó a decir.

"Es un buen chico, Mauro." Insistió Iván. "No importa de dónde vino o lo que hará."

"Ya lo veo, en un mes ha hecho más que tú en los últimos años." Se burló mirándole.

"¿No tienes cosas que hacer?" Escupió el menor con desagrado. "¿Cuidar de tu mujer o algo?"

"Está en cama." Dijo. "Está enferma, pero está mejorando."

"¿Y sabiendo que está enferma la dejaste sola? Eres un pelotudo." Le regañó el menor frunciendo el ceño.

"¡Tenía que hacerlo! Tía me envió una carta hace unos días diciendo que vendría a hablar contigo sobre una boda arreglada, pidió que viniera a apoyarla, pero no leí la carta hasta hace poco." Bufaba haciendo corajes al pensar en esa mujer.

"Llegas tarde. Esa mujer no te volverá a hostigar en un buen tiempo." Iván le miró sin rechistar ante su respuesta. Su hermano le entendió al instante.

"¿La mataste?"

"No está muerta, pero no tarda en hacerlo." Le respondió sin dar más explicaciones. "En fin, ya deberías ir volviendo con tu mujer."

"Sí." Con un suspiro Mauro se reincorporó. "No sé qué tienes en la cabeza, pero si ese chico es lo que quieres..." se encogió de hombros para tomarse la nuca. "Has como veas."

"Deberías venir." Soltó llamando la atención de su hermano. "La ceremonia será pronto, te enviaré una carta para que vengas con Fiorella." Le dijo.

"Felicidades por tu boda." Dijo el mayor, una frase que nunca creyó decirle a su hermano menor.

"Gracias."

Mauro asintió sin más y caminó alejándose para irse, su deber allí había acabado, él venía a convencer a su hermano de que una boda era necesaria y... bueno, se iba a casar, todo cómo debía ser.

Iván salió de los aposentos y comenzó a caminar pensando en la cena que deberían estar cocinando en esos momentos.

Por otro lado, Alexis escuchó los pasos de su rey poniéndole en alerta. Rápidamente fue a unas columnas y se escondió en un hueco entre estas para tapar su boca con una sonrisa mirando el suelo. Unos segundos bastaron para escuchar un corto silbido que le hizo voltear hacia arriba con sorpresa.

"¿Estás escondiéndote?" Preguntó el rey con una sonrisa divertida y una mirada suave. Este estaba asomado con sus manos en su espalda mirándole con atención, el menor solo podía ver parte de su pecho hacia arriba al estar escondido entre las columnas.

Alexis soltó una risilla tras sus manos y con sus mejillas enrojecidas ante su presencia. Sin pensarlo se abalanzó a él para agarrarse de sus hombros abrazándole. "¡En lo absoluto!" Le dijo con una sonrisa radiante.

Iván sonrió y pasó sus manos hacia adelante para tomarlo de la cintura. "Entonces, ¿qué hacías allí?"

"Cosas de rey." Bromeó soltando una risilla para pensar en una respuesta no tan elaborada que darle. "Solo estaba siendo bonito."

"Si estabas siendo bonito entre el hueco de las columnas en silencio, básicamente estabas escondiéndote." Respondió el rey haciéndole reír una vez más mientras él se quedaba viéndolo con una sonrisa.

"¡Ser bonito no es un crimen!" Se defendía.

"Viniendo de ti fue una guerra completa." Le soltó burlón agarrándole para alejarlo con cuidado. "Debo ir con el doctor para que cambie mis vendajes, ¿te veo luego?" Alexis asintió y le dejó un beso en la mejilla antes de dejarle ir con una sonrisa contento yéndose dando brincos.

Iván le vió irse en silencio con esa expresión que no se la quitaban para nada. De repente y haciéndole entrar en curiosidad notó un detalle interesante. ¿No estaba con Rafael? Él se supone que siempre estuviera con su prometido para cuidarle y demás.

"Sebastián, ¿sabrás de casualidad dónde está Rafael?" Volteando a su alrededor notó que Sebastián tampoco estaba con su rey, siempre se suponía que estuviera con él. "Qué curioso..." Murmuró para si mismo, esto era nuevo.

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Heartless tyrant [Spreeckity]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora