Esa tarde la pasaron junto al señor Jeon.
Jungkook y su tío estuvieron poniéndose al día sobre sus respectivas vidas, mientras que Jimin estaba algo más alejado de la conversación leyendo un libro.
A pesar de que el más alto insistió en que su tío se quedara a dormir, el hombre prefirió descansar en su casa.
Cuando la pareja ya estaba sola, se sentaron en el sofá para ver una película.
Jimin se sentó delante de Jungkook, con su espalda recostada sobre el pecho ajeno. Esa era la posición perfecta para que el más alto pudiese tocar la barriga donde crecían sus dos pequeñas.
—¿Cuándo empezarán a moverse?— Cuestionó Jungkook mientras acariciaba la piel del mayor.
—Aún falta un poco, Kookie.
—Jo...— Jungkook hizo un puchero. —Yo quiero sentirlas ya...
—Eso es porque no te molestarán a ti para dormir.— Jimin frunció levemente el ceño.
—Bueno, hyung, cuando te den patadas en la noche, despiértame a mí también y trasnocharemos juntos.
—Quiero eso firmado en un papel.
Jungkook soltó una pequeña risita.
—A sus órdenes, mi sargento.
—Kookie, tus hijas tienen hambre...
—Acabamos de cenar hace quince minutos.
—Pues tienen hambre.
—¿Salado o dulce?
—Dulce.
—¿Qué hay de las galletas que compraste esta mañana?
—Ya me las comí...— Jimin hizo un pequeño puchero con sus labios.
Jungkook giró la cabeza para mirar el reloj que colgaba de la pared del salón.
—Ya es tarde, hyung. Estarán todas las tiendas cerradas...
—Jo... Entonces me haré unos fideos.— El mayor se levantó del sofá y se encaminó a la cocina.
Jimin optó por tomar su segunda cena sentado en la cama, con la espalda apoyada en un blandito cojín.
—Kook, ¿podrías esperar a que terminara de comer?
Jungkook estaba tumbado de lado sobre el colchón, con su cabeza descansando en las piernas de Jimin y su mejilla pegada al vientre del contrario, mientras acariciaba con delicadeza la barriga con su pulgar.
—Estoy feliz, Bebé.— Sonrió, ignorando por completo lo que el más mayor acababa de decirle.
Jimin sonrió también, enternecido.
—Yo también estoy muy feliz, Kookie.— Dejó su cuenco con fideos a un lado para acariciar el pelo del menor.
—Ya he pensado algunos nombres, hyung.
—¿Cuáles son?
—Chaewon podría ser uno.
—Huuuum...— Jimin frunció levemente los labios, un gesto que solía hacer cuando pensaba sobre algo. —¿Jeon Chaewon?
—Síp.— La sonrisa del menor se hizo más amplia en cuanto escuchó el nombre provenir de los labios de Jimin . —¿No es lo más precioso que has escuchado nunca?
—¿No es un poco largo?— Cuestionó mientras seguía acariciando el pelo del menor.
—Para nada.
—Aceptaré ese nombre si tú aceptas el que yo tengo pensado.
—Soy todo oídos, hyung.
—Jihye.— Sonrió.
—¿Jeon Jihye?
—Síp.— Jimin asintió con la cabeza.
—¡Suena adorable, hyung! ¡Me encanta!
—Entonces tu propuesta también me encanta. Aunque sigo pensando que es algo largo.
—Jeon Chaewon y Jeon Jihye.— Volvió a repetir Jungkook , dentro de su burbuja de emoción y felicidad. —Son los mejores nombres del mundo.— Sonrió antes de dejar un montón de besos sobre la barriga ajena. —Hyung, voy a dormir en esta postura. Es comodísima.
—Ni se te ocurra.— Jimin frunció el ceño mientras hacía un pequeño puchero. —Yo también quiero dormir...
—Era broma, hyung.— Jungkook se incorporó para dejar un beso sobre los labios de su pareja.
Cuando Jimin ya se tumbó, Jungkook se acurrucó a su lado para seguir acariciando la barriga del contrario.
—Kook.
—¿Hum?
—Me vas a desgastar la barriga de tanto tocarla.— Bromeó.
—Jo, hyung... yo también quiero estar cerca de mis bebés... déjame ser feliz.
—Vale... solo era una broma. Puedes seguir tocándola, me ayuda a dormir.
Jungkook sonrió y volvió a besar al más mayor.
—Buenos noches, Bebé.
—Buenas noches, Kookie.
—Y buenas noches a vosotras también. Chaewon y Jihye~~
Jimin no pudo evitar sonreír al escuchar al menor.
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𝓒𝓘𝓡𝓒𝓛𝓔𝓢 ᵏᵒᵒᵏᵐⁱⁿ ᵃᵈᵃᵖᵗᵃᶜⁱᵒⁿ
Roman d'amourNo todas las parejas tienen una historia igual de bonita que en los cuentos. Adaptación autorizada por Todo es ficción M-Preg Mención de otras parejas