Estoy saliendo de mi departamento vestida casualmente con un vestido un poco suelto, color blanco junto a una chaqueta negra y unas botas del mismo color. Llevo una gorra y unos lentes para que nadie me reconozca.
Al pisar la calle, ajuste mi gorra asegurándome de que estuviera bien colocada y empecé a caminar hacia la pequeña cafetería que había elegido junto a Charles, estaba lejos del bullicio de todos los fans y los paparazzis. Era fuera de la ciudad y eso hacia que no me preocupe mucho por salir en alguna pagina de chismes de pilotos.
Cuando llegue a la cafetería, Charles ya estaba sentado allí, sentado en la mesa de la esquina con una sonrisa que iluminaba su rostro.
-Hola, espero no haberte hecho esperar tanto.- Dije, tratando de mantener la calma mientras me sentaba frente a el.
-Para nada.- Sus ojos verdes brillan con un toque de nerviosismo y emoción al mismo tiempo.- es bueno verte fuera del Paddock.
La conversación fluyó con naturalidad, hablando de todo menos de las carreras. Compartimos historias de nuestra infancia, nuestros sueños y miedos. Me resulta sorprendente que sea tan fácil hablar con Charles, es como si nos lleváramos hablando desde niños, todos los días.
De vez en cuando tuve que mirar para asegurarme de que nadie nos viera. La adrenalina de mantener cualquier cosa que tenga junto al monegasco, en secreto, añade emoción a la salida.
-Oye, sobre lo de ayer... ¿Que sucedió?- Esa pregunta me toma por sorpresa. Parece que Charles esta a punto de explotar de la risa.
-Uhm... No recuerdo nada de lo que paso ayer.- Digo, intentando fingir demencia.
-No me digas que también tomaste.- Dice Charles con una sonrisa burlona. Lo miro de manera un poco amenazante y el continua.- Casi te tiras encima de mi. Y no te digo que no me hubiera gustado que lo hagas...- Susurra esto ultimo pero logro escucharlo.
-Ah, no me estaba por tirar encima de ti. Solo te pregunte a que hora seria la salida. -Digo intentando convencer a Charles de lo contrario. -Espera... ¿Te gusto?- pregunte, al darme cuenta de lo que acababa de decir.
-Entonces si lo hiciste.- Charles se acerca a mi, con una expresión victoriosa. -Lo sabia. ¿Por que me mientes?- Pregunta con un tono juguetón.
-No te miento, solo... No quiero hablar sobre eso.- Intento escapar de la vergonzosa situación con todas mis fuerzas. -¿Podemos cambiar de tema, por favor?- Me quejo, mirando hacia mis manos.
-Esta bien, cambiemos de tema pero algún día volveremos a hablar de esto.- Charles se vuelve a alejar.
Dios, en estos momentos quiero matar a Camile por decirme que haga eso y también me odio a mi misma por acceder a una estupidez así.
...
Terminamos de hablar y nos despedimos con un abrazo claramente, intentando que nadie nos viera juntos. La pase tan bien que me encantaría repetirlo millones de veces. Sus ojos burlones cuando hablábamos sobre el encuentro de ayer o cuando me hablaba de cosas que le gustan, su voz un poco ronca cuando susurraba. Es una persona con la cual es extremadamente fácil estar charlando sobre cualquier cosa y estar así durante horas.
Me dirijo al departamento de Camille, ya que habíamos acordado en ir de compras. Hace rato que no hacíamos una salida de chicas y servirá para distraerme de algunas cosas.
...
-¿De verdad estuvo tan mal?- pregunta Camille luego de que le haya reclamado sobre la conversación con Charles.
-Estar con el fue muy lindo, pero lo único que no me agrado mucho fue que se dió cuenta de lo que hice, aunque dijo que le gustó... Fue muy incómodo.- Digo avergonzada.
-¿¡Te dijo que le gustó!?- Grita sorprendida, tirándose en el sofá junto a mi. Asiento con la cabeza. -Tienes que hacerlo de nuevo.- Se para de un salto, asustándome.
-No, ni lo sueñes. No necesito perder más dignidad de lo que ya perdí. -Digo, caminando hacia la puerta para intentar dar por terminada la conversación
-¡Vamos, le gustó! Y no me digas que a ti no...- Camille me sigue hacia afuera, cruzando un brazo por arriba de mis hombros.
-No lo voy a hacer, está decidido. Tengo que dejar de hacer lo que me dices y empezaremos con esto. -Dije frenando frente a ella.
-Sabes que no parare hasta que aceptes.- Tiene razón, no lo hará.
En el camino hacia el centro de la cuidad, pienso en lo que me dijo Camille y llegué a una conclusión. Si ella quiere que repita lo de la otra noche, tendrá que hacer algo por mi. Algo que se que no le gusta.
-Háblame sobre tu relación con Lando.- La sorprendo en la tienda. Ella me mira extrañada. -Si quieres que lo haga, háblame sobre ustedes.
-No hay un nosotros.- Dice Camille, alejándose de mí.
-Si lo hay, hace meses que vienes diciendo lo mismo, "Te lo contaré luego". Si no hubiera algo, no me dirías eso. - Me acerco a ella y la enfrento.
Ella me mira seria. No sé por qué no me quiere decir nada.
-Esta bien, tarde o temprano te ibas a enterar.- Ella mira sus manos y juega con ellas antes e seguir hablando.- El día de la fiesta de Carlos, Lando y yo pasamos un buen rato y el me invito a tomar algo mas alejado de las personas. Acepte y pase la noche en su departamento, pero te prometo que no sucedió nada.- Mientras Camille dice esto, sus ojos brillan de una manera en la que nunca lo habían hecho.
-De verdad te gusta, no me lo niegues porque te conozco. Quiero que sepas que apoyo su relación y el día que se casen, quiero ser la dama de honor.- En cuanto dije esto, Camille me miro y me abrazo fuerte. -Lo que no entiendo es porque no me querías contar nada.
- No quería adelantarme. Sabia que si te lo contaba, ibas a estar de acuerdo y yo me ilusionaría con el. No quiero salir lastimada, ¿Sabes?- Dice avergonzada.
-Tienes un poco de razón pero si vieras la manera en que te mira, te darías cuenta de que esta interesado en ti. El siempre me dice que quiere una chica que lo quiera y que lo pueda acompañar a las carreras.- Confieso.
-Yo puedo hacer eso...- Dice y noto que intenta ocultar su emoción. - ¡Ahora tienes que seguir calentando a tu monegasco!- Camille cambia el tema de conversación, recordándome nuestro pequeño acuerdo.
Suspiro hondo, preparándome para las estupideces que voy a hacer.

ESTÁS LEYENDO
La Menor De Los Verstappen. || Leah Verstappen.
Fiksi PenggemarLeah Verstappen, entra al deporte en Mercedes. La primera mujer en competir desde 1992. Pasan demasiadas cosas en su tiempo en el mundo de la formula 1. Conoce a personas nuevas y se reencuentra con otras pero una de ellas hace que la vida de Leah...