Capitulo Nueve.

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En medio del camino, Luffy despertó con hambre y frío, se detuvieron a comprar comida en el primer puesto ambulante que vieron, Law se encargo de abrigarlo lo suficiente, era tarde, habían salido a las 9:32pm de Water 7, el tiempo había pasado lento y la presa los retraso aun más, eran las 11:13pm y aun seguía yendo camino a casa,  lo miro de reojo, estaba entretenido comiendo Nuggets de pollo, sonrió de lado, y retiro su mirada avergonzado al ser pillado por el chico.

El moreno cruzo los asientos imprudentemente sin importarle los regaños de Law y sus amenazas sobre hacerlo limpiar con la lengua, carcajeo, llamándole exagerado, más su risa quedó en el aire cuando su celular sonó, la pantalla brillo, iluminando el contacto registrado como "Shanks ❤️‍🩹" Law contuvo su respiración e ignorando la mirada ajena llena de diversión siguió conduciendo.

—¡Luffy! ¡¿Se puede saber donde estas muchachito?! ¡Más te vale no haberte ido a Australia otra vez!—Viró los ojos divertido.

—¡Shishishi! ¡Estoy con Torao no te preocupes!—Lo miro en pánico, ¿acaso Luffy no entendía la gravedad del asunto? ¡Era el jodido jefe de Estado por Dios!

¿Torao? ¿Y ese quien es? —La voz pasó de molesta divertida a una más seria, interrogante. Law sintió un escalofrío recorrerle el cuerpo, era un hombre muy valiente, pero había escuchado todo tipo de historias acerca de aquel hombre y ninguna donde era precisamente amable. Luffy lo miro, sonriente, todo su nerviosismo desapareció, y en un acto de valentía le devolvió la sonrisa.

—¡Torao, dile hola a mi papá!—Acerco el móvil, el altavoz le permitió escuchar la respiración ajena.

—Hola, señor.

¿Torao?—Law bufo, mirando mal a Luffy, su madre se había esforzando tanto para escoger su nombre, era conocido como "Trafalgar" hasta que llegó Luffy, alegando que le costaba y era feo, bautizandolo como Torao y ahora era inevitable que le dijesen así.

—Si, señor

—¿Sabe usted que hora es?

—Son las once menos cuarto, me disculpo por la hora, Luffy no quería marcharse y accedió hasta que cayó dormido. —No sabía como su voz no estaba temblando, pero su sulso no hacía más que subir, alterado por la adrenalina de parecer un adulto serio y funcional, cosa que era así, simplemente los nervios le ganaban cuando estaba frente a Luffy, lo alteraba, podría estar leyendo y si Luffy aparecía, se le olvidarían hasta las vocales.

Ese mocoso...¡De acuerdo! ¡Torao! Espera, ¡Buggy! ¿Quien era Torao?

Papá, estamos yendo a mi departamento.

¿Yendo? ¿Torao dormirá allí?—Luffy asintió entusiasmado.

《¿Cuando dije que sí a eso?》Pensó, desubicado, no le quedó de otra que confirmar aquella afirmación silenciosa, pensando que, quizá, era la mejor idea, era tarde y Rosinante ya estaría dormido.

—¿Podría?—Pregunto confundido, se escucho un quejido enternecido del otro lado, era la voz del que reconocía como "La primera dama de Estado" título que, le pareció una falta de respeto al ser un hombre, pero que al ver en una entrevista que al mayor no le incomodaba, supuso que estaba bien.

La sonrisa de Luffy lo avivó, pensando que era un poco absurdo preguntar dado a que había estado en la cama del menor solo dos noches atrás, aquel pensamiento lo abrumo, golpeandolo de mala forma, haciendo que sus cachetes se tiñeran de un rojo pálido. Luffy, pensaba que todo aquello era una compleja y elaborada trampa por parte de sus padres, Shanks nunca le llamaba para regañarle por la hora, era bastante liberal, mucho más que su papá Buggy, así que sabía que aquella llamada era solo para molestar un poco a su... compañero.

El capitán de corazones.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora